Gnoscos

Nuestro amigo Reaktor se halla surcando los cielos desde su aeroplano, a la búsqueda de respuestas y de un horizonte esperanzador.

Lo que no sabe, es que su búsqueda está a punto de dar frutos...

GNOSCOS, ¡muy pronto en vuestros auriculares!

Os habla El Comodoro:

Inauguramos este espacio de intimidad y sociedad, de ajetreo y de serenidad, de inacción, y de frenesí.

Os doy solemnemente la bienvenida a mi casa. Os habréis percatado de que es el mío un nomadismo atípico, pues resido en este sumergible desde el que os hablo y en el que me plazco en recibiros.

Sed bienvenidos queridos amigos y amigas, a GNOSCOS.

Aprovecharemos el abrigo de las profundidades marinas de nuestros pensamientos, donde siempre podemos disfrutar de la quietud de la noche y ésta se presta solícita a toda suerte de soliloquios y sugestiones, que deleiten nuestro gusto mientras no embotan nuestra razón.

Trataremos de la actualidad... muy someramente, para que los árboles no nos impidan ver el bosque.

Charlaremos sobre acontecimientos históricos, para comprender los agitados mares que habremos de surcar.

Pero sobretodo, disfrutaremos de la suave música, la luz tenue, y los aromas clásicos del buen brandy y el tabaco de Kentucky quemado en cazoleta de ébano. 

Ponéos cómodos, dejad los mejores aposentos para las damas

comienza nuestra singladura.