Esto va de ti

¿Eres de las que año tras año aprovecha los últimos días de diciembre para hacer su lista de propósitos o prefieres hacerlo en otro momento? ¿Lo sueles cumplir o se quedan olvidados al fondo del cajón?

Tan importante como aprovechar el tiempo es saber desconectar. De hecho, la desconexión y el descanso son imprescindibles para conseguir esa ansiada productividad.

A menudo creemos que no podemos conseguir aquello que buscamos porque es para otros: gente más lista, más preparada, más organizada...

Y no es así.

Vuelvo a este espacio de conversación contigo aprovechando el tema de la inercia precisamente para romperla.

En este episodio comparto contigo mi visión sobre lo de dejarse llevar y como puedes aprovecharlo para alcanzar tus objetivos poniéndotelo un poquito más fácil.

Que Marie Kondo se rinde, querida. Que dice que no puede más y que con tres churumbeles es incapaz de mantener la casa ordenada. Muchas hemos sentido empatía y un poco de "ya lo sabía yo que tanta perfección no era posible". 

Y de eso precisamente va este episodio, de aprendizajes que yo he sacado de Marie Kondo, de su método y de esta repentina retirada que algunos achacan a la realidad maternal y otros muchos a una estrategia de marketing. 

Anyway, si tienes curiosidad por saber que he aprendido de la gurú japonesa además de cómo doblar prendas en vertical, dale al play que comenzamos. 

¿Eres exactamente la persona que quieres ser? Supongo que no, verdad? Porque si no, menudo aburrimiento, sin tener nada más que conseguir, ninguna meta que lograr, alguna cosita que pulir... 

El tema es que puedes pasarte la vida soñando con ser de tal o cual manera o puedes hacerlo realidad empezando ahora mismo. ¿Cómo? Pues comportándote desde ya como esa persona en la que te quieres convertir. De eso va, al menos desde mi punto de vista, lo del fake it till you make it. 

En este episodio del podcast te cuento con más detalle como puede ayudarte, algunas estrategias para ponerlo en práctica y por qué me parece tan potente esta idea si aprendes a utilizarla a tu favor. 

En estos días ando de celebración porque hace nada más y nada menos diez años que me convertí en madre. Y en días como estos es inevitable echar la vista atrás y revisar mentalmente todo lo que ha sucedido en esta década, cómo ha cambiado mi vida en muchos sentidos y qué cosas he logrado (aunque muchas estén aún en la lista de objetivos y sueños pendientes). 

El caso es que con la excusa de este momento quiero compartir contigo algunas ideas para que tú también puedas revisar tu propia historia. Y no para que te pongas melancólica con el paso del tiempo, para nada! La idea es que te pares a verlo con la distancia suficiente para darte cuenta de que has conseguido un montón de cosas, que has aprendido mogollón y que paso a paso te acercas a esa versión de ti con la que soñabas. 

Así que te animo a compartir conmigo unos minutitos y que al escuchar el episodio te digas a ti misma "¡Ole yo!". Por que el trajín del día a día casi nunca te permite pararte a ver lo genial que eres y todo lo que has ido haciendo realidad en los últimos años, así que esta tarde de domingo me parece el momento ideal para hacerlo. 

Hay algunas cosas que consideramos como lujos que no deberían ser tales. Una de ellas es el tiempo, especialmente el que nos dedicamos a nosotras. 

No hacer lo que sabes que tienes que hacer es algo en lo que caemos con frecuencia y que ya todas identificamos perfectamente con la etiqueta de procrastinación. 

Pero hay algo aún más agotador y contraproducente (al menos desde mi perspectiva) que es marear la perdiz. 

En el episodio de hoy te cuento qué es para mi eso de marear la perdiz, cuales son sus consecuencias y, por supuesto, algunas ideas para que puedas dejar de hacerlo. 

¿Sabes que eres mucho más sabia de lo que crees? Que sí, que no es peloteo. Es absolutamente cierto. De montones de cosas que te pasan en tu día a día sacas aprendizajes que pueden ser super valiosos pero que a veces dejamos un poco olvidados o no les prestamos suficiente atención como para aprovecharlos al máximo. 

En este episodio del podcast comparto contigo una reflexión sobre el tema y algunas sugerencias para que a partir de ahora puedas ser más consciente de todo eso que aprendes cada día y de lo útil que puede resultar para tu vida.

El Síndrome de Año Nuevo es eso que nos pasa cuando nos flipamos y de repente queremos incluir un montón de hábitos y rutinas nuevas en nuestra vida. 

Lejos de quedarse en una anécdota es algo que sucede recurrentemente y de forma especial en ciertos momentos del año, como enero y septiembre. En el episodio de hoy te cuento por qué no te hace ningún bien caer en este bucle y de dónde surge, para que así puedas ponerte manos a la obra y evitarlo.

Con septiembre llega ese momento de vuelta al cole (o rentrée, que el francés siempre queda muy chic 😉) y supone el pistoletazo de salida a la realidad y las rutinas que tendremos la mayor parte del año. 

Por eso es especialmente importante que al organizar los horarios, actividades y responsabilidades tengamos en cuenta una serie de claves que comparto contigo en este episodio. Estas claves te ayudarán a conseguir que este no sea un curso más en el que asumes más de lo que puedes/debes y terminas agotada, desmotivada y sin tiempo para ti, soñando con que lleguen de nuevo las vacaciones. 

¿Cómo conseguir ser productiva, avanzar personal y profesionalmente sin caer en la trampa del perfeccionismo y hacer todo esto mientras tienes una vida real en la que hay que hacer la compra, poner lavadoras y llevar a los peques al cole? ¿Es un imposible? No, en absoluto. 

Muchísimas mujeres siguen hoy en día teniendo un profundo desconocimiento de su naturaleza cíclica, no solamente desconectadas de su ciclo menstrual sino viviéndolo como algo incómodo, incomprensible y molesto. 

Por experiencia propia, aprender sobre esta realidad tan intrínseca a nosotras supone un cambio radical tanto a nivel de autoconocimiento como de reconciliación con una misma y cuidado de nuestra salud a todos los niveles. Incluso nuestra productividad, organización y relaciones cambia a mejor porque nos entendemos más. 

Una transformación mucho más potente de lo que puedas imaginar que comienza por hablar abiertamente de menstruación, ciclicidad, salud sexual y reproductiva de las mujeres y hacerlo con la información y la evidencia científica en la mano. 

Te confieso que me gusta la rutina ¿y a ti?

Puede que pienses que es lo más aburrido y tedioso que existe cuando, en realidad, la rutina puede convertirse en una grandísima aliada para conseguir ser más productiva y lograr más tiempo para ti. Incluso, y aunque parezca increíble, puede ayudarte a reducir esa carga mental que tanto nos pesa y de la que parece más difícil deshacerse que de un chicle pegado al pelo. 

Algunas de estas ventajas son las que comparto contigo en este episodio junto con los principales errores que yo misma he cometido en este tema. Para que tú no tengas que pasar por lo mismo o, si llego tarde y has caído en las mismos baches que yo, que mi experiencia al menos te pueda ayudar a corregirlos lo antes posible. 

¿Cómo te llevas con los cambios? Ya seas de las que disfrutan saliendo de su zona de confort o de las que prefiere quedarse dentro, la realidad es que lo único permanente en esta vida es el cambio así que más nos vale afrontarlos de la mejor manera posible, no crees?

En este episodio vamos a abrir un melón interesante. ¿Motivación o disciplina?

Porque a menudo nos dejamos llevar por la carga emocional que tienen estas palabras, amando una y demonizando la otra. 

¿Sabes que en realidad están más relacionadas de lo que crees?

Ni la motivación va de estar a tope de energía ni la disciplina es un régimen militar con alguien persiguiéndote para que cumplas con tus obligaciones. 

Y como no me apetecía abrir el melón yo solita cuento con tres invitadas de excepción: