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Paso a Paso a la Eternidad.

Paso a Paso a la Eternidad.

By Jesus Is Life

Pasao a Paso a la Eternidad es un espacio de reflexión para cada día, reflexionar que en todo el eterno Creador está presente en la vida del hombre.
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EL AMOR VERDADERO

Paso a Paso a la Eternidad.Nov 18, 2022

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NO NOS AFERREMOS

NO NOS AFERREMOS

NO NOS AFERREMOS

Aferrarse a un título gubernamental o a un cargo en los puestos de trabajo, es propio de los seres humanos, por eso no estarán dispuestos a abandonar con facilidad, sino que lucharán fervientemente para mantenerse en esos cargos. Algo similar también sucede en la vida cristiana, pues algunos creyentes se aferran tanto a los cargos ministeriales que no están dispuestos a que otro creyente pueda ocupar su lugar. Por eso se oponen a cualquier reestructuración de liderazgo dentro de las congregaciones cristianas y ministerios. En contraste a los hombres, Jesucristo no se aferró a Su título y lugar de privilegio que tenía en el reino de los cielos, sino que se despojó en beneficio de toda la humanidad: “Aunque era Dios, no consideró que el ser igual a Dios fuera algo a lo cual aferrarse. En cambio, renunció a sus privilegios divinos; adoptó la humilde posición de un esclavo y nació como un ser humano. Cuando apareció en forma de hombre,” Filipenses 2:6 NTV.

Antes de Su venida a este mundo, Jesucristo ocupaba un puesto de privilegio junto a Su Padre en el reino de los cielos, compartía Su misma divinidad, autoridad y poder sobre toda la creación. Los ángeles de la corte celestial estaban a su servicio día y noche, porque era Dios mismo sentado en Su santo trono. Pero pese a todos estos privilegios que tenía, cuando vio que la humanidad necesitaba ser redimida de sus pecados que le condenaban a una eternidad de sufrimiento, no se aferró a su posición y privilegio que compartía con Su Padre, y estuvo dispuesto a dejar Su igualdad posicional con Dios y venir a este mundo para redimir a toda la humanidad y rescatarlo de su condenación.

El Señor por Su inmenso amor y misericordia, voluntariamente y en completa humildad renunció momentáneamente a todos sus privilegios divinos, para adoptar un cuerpo y una naturaleza humana para el beneficio de toda la humanidad que se encontraba sumergida en las profundidades del pecado. Jesucristo al encarnarse, no renunció a su deidad para convertirse en humano, sino que dejó a un lado el derecho a su gloria, su poder y su majestad en el reino de los cielos que compartía junto a Su Padre. Al Señor tampoco le importó ser rechazado, menospreciado, afligido y asesinado por los mismos hombres pecadores por quienes abandonaba su divinidad. Su amor y misericordia por la humanidad, prevaleció sobre cualquier título y posición divino en el reino de los cielos. Al igual que Jesucristo, no debemos aferrarnos a los cargos que podamos ostentar en este mundo, ya sea en el ámbito secular y ministerial. Siempre debemos estar dispuestos a dejarlos, si eso beneficia en algo a los que nos rodean. Nuestro corazón debe estar dispuesto siempre a servir a nuestro prójimo.
Apr 18, 202403:54
ALEGREMOS AL ESPÍRITU SANTO

ALEGREMOS AL ESPÍRITU SANTO

ALEGREMOS AL ESPÍRITU SANTO

Uno de los mandamientos más quebrantados por los seguidores de Cristo, es el mandamiento de honrar a sus padres. Pues los hijos constantemente desobedecen y se rebelan contra ellos , provocándoles un profundo dolor en sus corazones. Con esta actitud en vez de honrarlos, los deshonran, acarreando de esta manera condenación para sus vidas. Posiblemente abran muchos hijos que no quebrantan este mandamiento y no les ocasionan dolor a sus padres, pero sí hay a alguien que le provocan dolores constantemente, y es al Espíritu Santo de Dios que mora en cada uno de los redimidos. Ante esta realidad del creyente, el apóstol Pablo nos hace esta exhortación: “No hagan que se ponga triste el Espíritu Santo de Dios, que es como un sello de identidad que Dios puso en ustedes, para reconocerlos cuando llegue el día en que para siempre serán liberados del pecado.” Efesio 4:30. NTV.

Al ver a nuestros padres podemos saber cuándo ellos están tristes, y si la causa de sus tristezas es nuestro comportamiento inadecuado, podemos acudir a ellos para pedirles perdón y cambiar nuestra actitud. Pero no sucede lo mismo con el Espíritu Santo, pues al no verlo, pasamos por alto si Él está triste a causa de nuestra desobediencia a la voluntad de Dios Padre. Pese a que no le veamos, podemos saber cuándo está triste el Espíritu Santo, y esto lo podemos saber examinando nuestra vida como seguidores de Cristo. Si no estamos llevando una vida de total obediencia a Dios, cumpliendo y obedeciendo su Palabra, podemos tener la certeza de que el Espíritu Santo está triste a causa de nuestra actitud. Para no seguir entristeciéndolo, debemos cambiar nuestra vida, escuchar Su voz y permitirle que dirija nuestra vida, pues Él nos ama profundamente y quiere que llevemos una vida que honre al Padre Eterno.

En nuestra conversión a Cristo, fuimos sellados con el Espíritu Santo para el día de nuestra liberación de la condenación eterna. El sello del Espíritu Santo es nuestra garantía de nuestra salvación total, por eso cuando regrese Jesucristo a este mundo, nos llevará consigo a su reino para que vivamos eternamente con Él, y no seremos condenados con el resto de las personas que jamás lo recibieron como su Señor y Salvador. Por todo lo que hace el Espíritu Santo día tras día por nosotros, en vez de entristecerlo, debemos alegrarlo, y la única manera de hacerlo; es escuchando su voz, permitiéndole que dirija nuestra vida, y llevando una vida de comunión con nuestro amoroso Padre eterno mediante el estudio de Su Palabra, la oración y el servicio en el cuerpo de Su amado Hijo Cristo Jesús , con los diferentes dones y talentos que hemos recibido según el beneplácito de Su Santo Espíritu.
Apr 17, 202403:54
NUESTRA GLORIOSA VIDA ETERNA

NUESTRA GLORIOSA VIDA ETERNA

NUESTRA GLORIOSA VIDA ETERNA

Mientras los seguidores de Cristo sigan viviendo en este mundo, tendrán que seguir afrontando el dolor y el sufrimiento hasta que lleguen a la presencia del Señor. En ocasiones parecerá que los dolores corporales serán más fáciles de sobrellevar que los dolores ocasionados por la traición de los amigos, familiares y cónyuges, o el dolor ocasionado por la muerte prematura de un ser amado, o por la desilusión que viene tras un sueño hecho pedazos. Cada uno de estos dolores físicos o sentimentales que puedan afrontar los creyentes en este mundo, son pasajeros en comparación a su vida eterna con Cristo Jesús en el reino de los cielos. Estas palabras de aliento son dadas por el apóstol Pablo para que los creyentes no desfallezcan en medio de su dolor y sufrimiento. “Estoy seguro de que los sufrimientos por los que ahora pasamos no son nada, si los comparamos con la gloriosa vida que Dios nos dará junto a él.” Romanos 8:18 TLA.

El apóstol Pablo con estas palabras para nada trata de minimizar el dolor o el sufrimiento que puedan padecer los seguidores de Cristo, lo que trata de hacer, es de alentarlos para que no se rindan cuando estos padecimientos lleguen a sus vidas, sino que sigan adelante superando todas esas penalidades, teniendo la certeza de que cualquier dolor o sufrimiento que padezca, no serán para siempre, pues en un futuro no tan lejano, estos serán cambiados por dicha y alegría, las cuales sí durarán para siempre, y borrarán todo rastro de tribulación que haya padecido durante su vida terrenal. Cuando los creyentes lleguen a la presencia de Dios Padre, cualquier dolor o sufrimiento de su vida terrenal, no será nada en comparación a las recompensas públicas que recibirán ante las huestes celestiales que moran en el reino de los cielos.

En el reino de Dios, hasta el más crudo dolor que puedan padecer los creyentes en este mundo, parecerán meros alfilerazos cuando finalmente su Señor y Salvador corone sus frentes con la corona de la vida. La seguridad de la maravillosa herencia que tiene nuestro amoroso Padre Eterno, debe alentarnos a no dejarnos vencer del dolor o el sufrimiento que lleguen a nuestras vidas. Debemos tratar de superar toda aflicción de esta vida terrenal, y caminar firmes en el camino que nos lleva a nuestra morada eterna. En esa morada futura, donde nos espera con los brazos abiertos nuestro amoroso Padre Eterno para darnos una maravillosa herencia, la cual compartiremos con su amado Hijo Cristo Jesús. Con esta maravillosa esperanza, esperemos con impaciencia a que nuestro Señor y Salvador, regrese por nosotros a llevarnos a su reino para que moremos eternamente junto a Él.
Apr 16, 202403:54
NADIE HA VISTO JAMÁS A DIOS

NADIE HA VISTO JAMÁS A DIOS

NADIE HA VISTO JAMÁS A DIOS

En el presente se puede ver y escuchar testimonios de personas que afirman haber visto a Dios Padre y conversado con Él. Mucho de estos testimonios son de personas que han estado en una situación crítica de salud, o en coma. Pero también hay personas que afirman haber visto a Dios Padre en un éxtasis de espiritualidad. Estos testimonios no son reales, ya que nadie puede ver a Dios Padre, sin antes haber sido transformados a Su misma gloria. Esta transformación solo se dará una vez que Jesucristo regrese a este mundo para llevar a sus siervos al reino de los cielos. Un hombre con un cuerpo y su ser no glorificado, jamás podrá estar en la presencia de Dios Padre y verle cara a cara, por eso hasta el momento el único que ha visto a Dios Padre en todo su esplendor es el Hijo, tal como lo afirma el apóstol Juan: “Nadie ha visto jamás a Dios. Pero el Hijo, el único, él mismo es Dios y está íntimamente ligado al Padre. Él nos ha revelado a Dios.” Juan 1:18 NTV.

En el periodo del Antiguo Testamento, Dios se comunicó con varias personas como los profetas para darles mensajes específicos, pero no se les manifestó en todo su esplendor, ya que Dios es Espíritu y por ello invisible. No tiene cuerpo y aunque Él se manifestó a los profetas en forma visible como Ángel o como Hombre, estas apariciones no revelaban realmente cómo es Dios. Por eso ninguna persona a excepción de Cristo ha visto a Dios Padre en todo su esplendor. Jesucristo como el Unigénito Hijo de Dios Padre, ha visto a su Padre en todo su esplendor, porque Jesús es la misma esencia o ser que el Padre, engendrado desde la eternidad. Él es el que vive en unión íntima con el Padre, por eso tiene una relación íntima, completa y personal con el Padre. Jesucristo al venir a este mundo con un cuerpo encarnado, reveló la naturaleza y la esencia de su Padre, de una forma que podía verse y tocarse. En su amado Hijo, el Padre se hizo hombre y habitó entre los hombres.

Aun estando aquí en la tierra, Jesús seguía estando en el seno del Padre. Era uno con Dios e igual a Dios. Por eso cuando los hombres veían y oían hablar a Jesús, veían y oían hablar al Padre. En Cristo sentían el amor y la ternura del Padre. Los pensamientos y las actitudes de Dios para con la humanidad han sido plenas y absolutamente dadas a conocer por Jesucristo. Por eso no hay otra manera de conocer a Dios sino por medio de Jesucristo, el Verbo. Todo aquel que quiera conocer al Padre, tendrá que aceptar a Su Hijo como su Señor y Salvador, pero con esta declaración de fe, el creyente todavía no verá al Padre en todo su esplendor, sino únicamente cuando sea transformado a su misma gloria, y esto se dará cuando Jesucristo regrese a este mundo para llevar a sus seguidores al reino de su amoroso Padre Celestial.
Apr 15, 202403:54
SANTIFICACIÓN COMPLETA

SANTIFICACIÓN COMPLETA

SANTIFICACIÓN COMPLETA

Es un error creer que en sus fuerzas los creyentes pueden mantener su vida completamente apartadas del pecado, o creer que pueden mantener sus vidas en estrecha comunión con Dios, mediante la oración, el estudio de su Palabra y el servicio con los dones y talentos que han recibido. Los creyentes no pueden hacer nada de esto en sus propias fuerzas, necesitan sí o sí de la ayuda de Dios, porque Él es la fuente de la fuerza, la sabiduría y el poder del creyente para que pueda llevar una vida de santidad, libres de la maldad y el pecado. Para poder mantenerse en santidad, los creyentes deben extender su clamor a Dios, algo similar a la oración ferviente que hizo el apóstol Pablo por los creyentes de la iglesia de Tesalónica: “Que Dios mismo, el Dios de paz, los santifique por completo, y conserve todo su ser - espíritu, alma y cuerpo - irreprochables para la venida de nuestro Señor Jesucristo.” 1 Tesalonicenses 5:23 NVI.

La santidad o santificación no se obtiene automáticamente tras la conversión a Cristo, es un proceso continuo que llegará a su final cuando el creyente esté finalmente en la presencia de Dios. Por eso mientras no llegue a la presencia del Padre Eterno, el creyente debe perseverar en oración para que Dios le de la fuerza necesaria y así mantenerse libre de las tentaciones y placeres de este mundo. Dios es la fuente de las bendiciones espirituales de sus hijos, por eso es Él único que les puede capacitar para que se mantengan santos en todo su ser, y así cuando Jesucristo regrese a llevarlos a su Reino, los encuentre totalmente libres de toda mancha de pecado.

Es un error pensar que se puede separar la vida espiritual de todo lo demás, obedeciendo a Dios sólo en algunos sentidos etéreos o viviendo para El sólo un día a la semana. El Señor no solo está preocupado de la santidad espiritual de sus seguidores, sino de todo su ser, esto incluye su alma y su cuerpo. El creyente no puede llevar una vida separada de su espíritu, alma y cuerpo mientras esté en este mundo, estos tres aspectos del ser del creyente son inseparables, por eso debe tratar de mantenerse totalmente santo en todo su ser. Porque el espíritu es la vida de su relación con Dios, el alma es su personalidad humana y el cuerpo es por medio del cual actúa y se expresa a sí mismo.

Aunque la vida cristiana demanda un esfuerzo humano, pero en un análisis final, todo depende de Dios mismo que es fiel. Solo por medio de Él los creyentes pueden llevar una vida santa hasta el regreso de Cristo Jesús. Teniendo presente esto, los creyentes deben perseverar en oración, pidiendo a Dios que les mantenga libre de todas las tentaciones de este mundo, y así mismo dándoles el deseo de mantenerse involucrados siempre en las cosas espirituales.
Apr 12, 202403:54
ALABEMOS A DIOS

ALABEMOS A DIOS

ALABEMOS A DIOS

Una victoria sobre los ejércitos enemigos, sin duda causa furor, gozo y alegría entre los habitantes de la nación victoriosa. Esta alegría les mueve a alabar y engrandecer a sus heroicos y valerosos hombres que hicieron posible esta victoria. En especial estas voces de alabanzas son dirigidas al comandante que lideró en la batalla al ejército. Tal como los hombres celebran las heroicas hazañas de sus valerosos hombres en este mundo, en un futuro no tan lejano, en el reino de los cielos, los ángeles y todos los redimidos unánimes celebrarán las hazañas del único Dios verdadero. El apóstol Juan, en una de sus visiones del porvenir, escuchó esta futura celebración de multitudes en el reino de los cielos: “Después de esto, oí las fuertes voces de una gran multitud que decía en el cielo: “¡Aleluya! La salvación, la gloria y el poder son de nuestro Dios. Apocalipsis 19:1 NTV.

En su visión, el apóstol escuchó que estas celebraciones de gozo y alegría de las multitudes en el reino de los cielos, empezaron con un grito de aleluya, la cual sin duda era una palabra muy usual en el vocabulario religioso. Aleluya quiere decir literalmente "Alabad al Señor". Esta es una palabra hebrea, y está formada por el imperativo plural de halal, que quiere decir alabar, y Yah, forma abreviada del nombre de Dios que figura en la mayoría de las traducciones de las Sagradas Escrituras como Yahvé. Esta alabanza de gozo y alegría es en reconocimiento a que la salvación, la gloria y el poder le pertenecen al único Dios verdadero. Al Dios que creó los cielos, la tierra, los mares y todo lo que subsisten en ellos.

Las multitudes alaban a Dios porque ha ejercido Su justo y verdadero juicio sobre la ciudad cuna del pecado y la inmoralidad. Dios es el único ser perfecto para ejercer un juicio justo y verdadero sobre los pecadores, porque solo Él puede escudriñar los pensamientos y deseos íntimos de las personas. Él es el único que tiene un corazón puro y libre de rencores, por eso puede juzgar sin ninguna clase de prejuicios. Y solo Él es el único que tiene la sabiduría para encontrar el juicio correcto, y tiene el poder para aplicarlo. Además, Dios es alabado por las multitudes porque a Él pertenecen la salvación, la gloria y el poder. Las demás deidades adoradas por los hombres inconversos, nunca podrán rescatar a sus fieles de la condenación eterna, porque la salvación de los hombres no les pertenece, ni tampoco tienen la gloria y el poder para hacerlo. La salvación del hombre pecador le pertenece solo a Dios, porque Él es su Creador, y tiene la gloria y el poder para hacerlo. Estos atributos únicos de nuestro Dios, deben movernos a los que hemos alcanzado la redención de nuestros pecados y la salvación, a alabar y bendecir el nombre de nuestro Dios por toda la eternidad.
Apr 11, 202403:54
PERMANEZCAMOS EN NUESTRA SALVACIÓN

PERMANEZCAMOS EN NUESTRA SALVACIÓN

PERMANEZCAMOS EN NUESTRA SALVACIÓN

Los hijos de Dios no están totalmente inmunizados para no ceder a las influencias negativas que puede ejercer el mundo. Por eso en algunas ocasiones, los creyentes ceden con tanta facilidad a las influencias que ejercen sus familiares y amigos inconversos para que se enreden nuevamente en los placeres que ofrece este mundo. Al ceder a estas influencias, corren el peligro de apartarse definitivamente de los caminos del Señor y volver a su vieja naturaleza dominada por el pecado. Todo aquel que vuelve a su vieja naturaleza, queda peor como si nunca hubiese conocido el camino de la salvación y la vida eterna. Este hecho nos da a conocer el apóstol Pedro: “Y cuando la gente escapa de la maldad del mundo por medio de conocer a nuestro Señor y Salvador Jesucristo, pero luego se enreda y vuelve a quedar esclavizada por el pecado, termina peor que antes.” 2 Pedro 2:20 NTV.

Toda persona que acepta el evangelio de Cristo en su corazón, y reconoce el Señorío de Cristo en su vida, escapa de la condenación de sus pecados y tiene la oportunidad de vivir eternamente en el reino de los cielos. Pero para que todo esto sea algo real, el creyente debe seguir sin desviarse del camino de la salvación, venciendo todas las influencias negativas que pueda ejercer este mundo. Pues si cede a alguna de estas influencias, puede quedarse atrapado en ellas y desviarse del camino que le lleva a su morada eterna. Las personas que abandonen el camino de la salvación por los placeres de este mundo, quedan en una situación peor que antes de haber conocido a Cristo, pues al enredarse nuevamente en los placeres de este mundo, rechazan voluntariamente el único camino que le libera de la condenación eterna, el único camino que le da salvación. Así como el hombre que se hunde en arenas movedizas y que se niega a agarrarse de la soga que se le lanzó, la persona que se aparta de Cristo pone a un lado su única escapatoria de salvación.

Si una persona nunca ha conocido el camino de la verdad del evangelio que le da salvación, no se le puede condenar por no seguirlo; pero, si una persona después de haberlo conocido y transitado por ese camino por algún tiempo, toma la decisión de abandonarlo, y vuelve a los caminos de su vieja naturaleza sin Cristo, peca deliberadamente contra la luz del evangelio. Ha esta persona mejor le hubiera sido no haber conocido nunca la verdad del evangelio, porque el conocimiento del evangelio, se convierte en su propia condenación. Como seguidores de Cristo, nunca debemos olvidarnos de la responsabilidad que conlleva el evangelio de nuestro Señor, pues si lo hacemos, corremos el peligro de abandonarlo, lo cual sería algo trágico para nuestras aspiraciones de vivir en el reino de los cielos.
Apr 10, 202403:54
APOYEMOS A NUESTROS LÍDERES

APOYEMOS A NUESTROS LÍDERES

APOYEMOS A NUESTROS LÍDERES

Estar al frente de un ministerio o de una congregación cristiana, no es una tarea fácil, se requiere de mucho esfuerzo, valentía, paciencia y sabiduría. Pero después de estar muchos años al frente liderando la obra, las fuerzas de los siervos de Dios pueden decaer, debido a que se enfrentan a diversos obstáculos en su vida ministerial que tratan de impedir que sigan adelante con su llamado. En esos momentos es cuando, necesitan un apoyo, una mano que les ayude a sostenerse firmes en su llamado para que sigan adelante liderando la obra encomendada por el Señor. Aarón y Jur fueron dos hombres que apoyaron a Moisés, cuando vieron que la fuerza del siervo de Dios empezó a agotarse: “Cuando a Moisés se le cansaron los brazos, tomaron una piedra y se la pusieron debajo para que se sentara en ella; luego Aarón y Jur le sostuvieron los brazos, uno el izquierdo y otro el derecho, y así Moisés pudo mantenerlos firmes hasta la puesta del sol.” Éxodo 17:12 NVI.

El ejército hebreo combatía contra las fuerzas de Amalec. Mientras esa batalla se daba, el líder del pueblo elegido de Dios, observaba cuidadosamente la batalla desde de una cumbre de un collado. Moisés como, el líder del ejército hebreo, no solo observaba la batalla, sino que cumplía una tarea fundamental delegada por Dios para ayudar a su pueblo a obtener la victoria sobre sus enemigos. Su tarea fue tener sus manos levantadas al cielo mientras dure la batalla, por eso cuando sus manos estaban en lo alto, el ejército hebreo, hacía retroceder al ejército de Amalec; pero cuando Moisés bajaba sus manos, el ejército enemigo hacia retroceder a Israel. Moisés no podía sostener sus brazos siempre alzados, pues después de varias horas de sostenerlas, sus fuerzas flaqueaban. Ante el agotamiento de las fuerzas de su líder, Aarón y Jur se pararon junto a Moisés y le ayudaron a sostener sus brazos en alto para asegurar la victoria en contra de Amalec.

Los líderes cristianos al igual que Moisés, se cansan y fatigan después de estar años liderando la obra, superando los diversos obstáculos y adversidades que se puedan presentar en el ministerio. Nosotros como también llamados a ser siervos de Dios, y miembros del cuerpo de Cristo, no debemos quedarnos con los brazos cruzados contemplando como nuestros líderes dan todos sus esfuerzos para que la obra avance. Debemos involucrarnos en la obra antes de que nuestros líderes se cansen, o se quemen por completo por dar todo su esfuerzo. Debemos acercarnos a ellos para brindarles todo nuestro apoyo en la obra, y así facilitar en algo las cargas que puedan estar llevando al frente del ministerio. La obra no es de los que están liderando, sino de nuestro Señor, por eso debemos involucrarnos para llevarlo adelante.
Apr 09, 202403:54
TENEMOS VIDA ETERNA

TENEMOS VIDA ETERNA

TENEMOS VIDA ETERNA

Para un condenado a muerte, recibir la noticia de que existe una posibilidad de que se escape de su condena, sería maravillosa, y con todo su ser anhelaría saber cuál es esa posibilidad de escape. Toda persona sin excepción está bajo condenación a causa de sus pecados, y está sentenciado a un castigo eterno. Esta sentencia no se hará efectiva en este mundo, sino que será efectiva una vez que Jesucristo empiece a gobernar sobre toda la creación por la eternidad. Pero hay una maravillosa noticia para todos los que están bajo esta sentencia. Esta noticia es que existe una posibilidad de escape a esta sentencia, la cual la dio a conocer Jesucristo en una de sus enseñanzas a todos sus seguidores: “Les digo la verdad, todos los que escuchan mi mensaje y creen en Dios, quien me envió, tienen vida eterna. Nunca serán condenados por sus pecados, pues ya han pasado de la muerte a la vida". Juan 5:24.

La sentencia por los pecados es la muerte, pero no la muerte física, sino la muerte espiritual, que es la separación de Dios. Toda persona debido a sus pecados está sentenciado a la muerte espiritual, pero Dios en su amor y misericordia, proveyó a la humanidad la posibilidad de que pueda escaparse de esa condenación, y esa posibilidad es el evangelio de Cristo. Toda persona que anhele escaparse de su sentencia, tendrá que escuchar atentamente el mensaje del evangelio, recibirlo y creerlo de todo corazón. Creer el evangelio es aceptar que Jesucristo es el Unigénito Hijo de Dios, enviado al mundo para liberar a toda la humanidad de la condenación eterna. Una vez que crea en el mensaje del evangelio, tendrá que arrepentirse y confesar sus pecados, y aceptar a Jesucristo como su Señor y Salvador, una vez que lo haga, sus pecados serán borrados por completo y por ende su sentencia de muerte espiritual desvanecerá y será reemplazada por vida eterna en la morada de Dios Padre.

Toda persona que alcance el perdón de sus pecados ya no será condenada ahora ni lo será jamás en el futuro. Porque al creer en el evangelio y recibir a Jesucristo como su Señor y Salvador, queda libre de todo juicio presente y futuro, debido a que Cristo ya ha pagado la pena por sus pecados pasados, presentes y futuros en la cruz del Calvario. En su Justicia, Dios no exigirá dos veces la paga de una pena que ya fue consumada. Cristo con su muerte en el madero ha pagado como nuestro Sustituto, y esto es suficiente. Él ha consumado la obra, y no se puede añadir nada más. El cristiano jamás será castigado por sus pecados, pues al confiar en Cristo ha pasado de su muerte espiritual a otra vida espiritual, en la cual el Espíritu Santo de Dios ha pasado a morar en el interior del creyente dándole a poseer la vida eterna.
Apr 08, 202403:54
BAUTISMO EN AGUA

BAUTISMO EN AGUA

BAUTISMO EN AGUA

En las iglesias protestantes, un gran número de sus miembros no han dado su paso de fe al bautismo, argumentando que no es necesario para alcanzar la salvación. Otros no han dado este paso, pues piensan que al bautizarse tendrán que comprometerse más con la obra de Dios. Mientras que otros sienten que todavía no están preparados para llevar una vida de santidad en conformidad a la voluntad de Dios, y por eso no han dado su paso al bautismo. En la presencia del Unigénito Hijo de Dios, ningún pretexto que pueda presentar el cristiano para no bautizarse, son valederos, ya que el bautismo es una ordenanza para todos los que reciben Su mensaje de salvación: “El que crea y sea bautizado será salvo. Pero el que se niegue a creer, será condenado.” Marcos 16:16 NTV.

No es el agua del bautismo lo que salva al creyente, sino la gracia de Dios aceptada por la fe en Cristo Jesus. Esta claro que el bautismo no salva, pero es una manifestación externa de la fe interna del corazón del redimido, es decir, el bautismo, es el fruto propio de la fe. Aunque el bautismo no es esencial para alcanzar la salvación, es indispensable como expresión de obediencia a Aquel que entregó Su preciosa vida por amor a toda la humanidad. Además, el bautismo en agua lava los pecados del creyente, de la misma manera, es por el bautismo que el creyente es sepultado juntamente con Cristo para muerte de su vieja naturaleza, y resucitado juntamente con Él en su nueva naturaleza para vivir eternamente.

Para dar este paso del bautismo, la persona primero debe creer y aceptar a Jesucristo como su Señor y Salvador, pero si no cree, no puede ser bautizado por ende será condenado. El no ser bautizado no es lo que condena al hombre, lo que le condena es su pecado, y no aceptar la posibilidad de que sus pecados sean perdonados por Jesucristo. Por eso si la persona no cree que Jesús es el Hijo de Dios, morirá en sus pecados. La fe es el primer paso en el plan de salvación, después de oír el evangelio predicado, el siguiente paso es confesar a Jesucristo como su Señor y Salvador, y el bautismo es el fruto de esa fe y confesión a Cristo. Pero si no cree en Jesucristo, es claro que no va a obedecer los demás pasos o condiciones de la salvación.

La voluntad de Dios es que todos los que hemos confiado en Su amado Hijo como nuestro Señor y Salvador, nos identifiquen públicamente con Él en las aguas del bautismo de los creyentes. Por eso todos los que hemos confiado en Jesucristo como nuestro Señor y Salvador, si todavía no estamos bautizados, no debemos seguir posponiendo nuestro bautismo. Pues mediante el bautismo nos identificamos con Él en Su muerte y resurrección y nos comprometemos públicamente a caminar con Él en nuestra nueva vida.
Apr 05, 202403:54
LIBRES DE TODA ESTIGMATIZACIÓN

LIBRES DE TODA ESTIGMATIZACIÓN

LIBRES DE TODA ESTIGMATIZACIÓN

Uno de los pilares fundamentales para el desarrollo de la familia en la sociedad, es el rol de la madre. Porque la madre al tener un especial y estrecho vínculo con sus hijos, pueden tener una mayor influencia en sus vidas para encaminarlos a llevar una vida recta y justa, con valores de ética y moral intachables, no solo en presencia de los hombres sino también en presencia de Dios. Ante este importante rol de la madre para la sociedad y la iglesia, el apóstol Pablo escribe. “Pero la mujer se salvará si cumple sus deberes como madre, y si con buen juicio se mantiene en la fe, el amor y la santidad.” 1 Timoteo 2:15 DHH.

Al leer este pasaje de la escritura de manera literal, se puede llegar a malas interpretaciones que posiblemente diferirán al verdadero mensaje de la Escritura. El apóstol Pablo no defiende aquí que la salvación eterna de las mujeres, es por cumplir sus deberes como madres, o por embarazarse y tener hijos, porque estas interpretaciones contradicen la enseñanza plena del Nuevo Testamento sobre la salvación solo por gracia por medio de la fe, la cual es mantenida por la eternidad. El apóstol tampoco habla de la salvación del alma de la mujer de la condenación eterna, sino de la salvación de la condenación de los hombres. Pues muchos hombres, entre ellos algunos cristianos, siguen culpando a la mujer de ser la causante de introducir el pecado y la ira de Dios en sus vidas.

Ante esta condenación por parte de los hombres, el apóstol Pablo afirma que las mujeres serán liberadas de esta estigmatización, al levantar una generación de hijos que lleven una vida en conformidad a la palabra de Dios. Ya que si las nuevas generaciones caminan en la voluntad de Dios, libres de toda maldad y pecado, ya no tendrán razones para culpar a las mujeres, por ende, serán liberadas de toda estigmatización por parte de los hombres. El apóstol también añade que para que esto sea totalmente real, la mujer deberá tener un buen juicio, mantenerse firme en su fe, amor y santidad.

Estas palabras del apóstol Pablo son en términos generales, por lo cual no significa que sea una regla general para todas las mujeres. Ya que habrá muchas mujeres que no tengan el privilegio de ser madres y educar a un hijo en amor y obediencia a la palabra de Dios, ya sea por su infertilidad o porque no llegaron a casarse. Las mujeres que no tuvieron el privilegio de ser madres, también serán liberadas de la estigmatización que las condenan, gracias a las mujeres que si tuvieron ese enorme privilegio de ser madres, e inculcaron a sus hijos en los caminos del Señor. Además, las mujeres que no llegaron a tener hijos, ni a casarse, serán libres de cualquier condena por parte de los hombres, al llevar una vida ejemplar de obediencia, santidad y sumisión a Dios, mostrando amor y generosidad hacia su prójimo.
Apr 04, 202403:54
UN TIEMPO DE DESCANSO

UN TIEMPO DE DESCANSO

UN TIEMPO DE DESCANSO

Después de una larga jornada de trabajo físico o mental, la fuerza, la energía y la agilidad mental de las personas decae, y necesitan ser recuperadas para seguir adelante con sus actividades siguientes. La única forma de recuperar la fuerza, la energía y la agilidad mental desgastada, es tomándose un tiempo de descanso merecido. La fatiga y el agotamiento, no solo se dan por el trabajo secular sino también por el trabajo espiritual. Los creyentes que dedican su tiempo al estudio de las Sagradas Escrituras, a la enseñanza, a compartir el evangelio y al servicio ministerial, también se cansan y se fatigan, por lo cual necesitan tomarse un tiempo merecido de descanso. Esto lo sabía Cristo Jesús con claridad, por eso una vez que sus discípulos volvieron de su misión, les dirigió para que tomaran un tiempo de descanso de su ministerio: “Entonces Jesús les dijo: Vayamos solos a un lugar tranquilo para descansar un rato. Lo dijo porque había tanta gente que iba y venía que Jesús y sus apóstoles no tenían tiempo ni para comer. Así que salieron en la barca a un lugar tranquilo, donde pudieran estar a solas.” Marcos 6:31-32 NTV.

En el servicio ministerial para Jesucristo, no todo tiene que ser trabajo, también tiene que haber tiempo para descansar de todas las actividades ministeriales. Porque al estar constantemente desarrollando un ministerio en la iglesia o recorriendo las calles compartiendo el evangelio de Cristo, la fuerza y la energía del cuerpo se agotan, y tampoco se puede olvidar del agotamiento que sufre la mente, pues para llevar adelante algún ministerio, hay que pensar minuciosamente en las estrategias a utilizarse para ser eficientes, así como también al estudiar la Palabra de Dios. Estas actividades pueden agotar la mente, por lo cual también necesita un tiempo de descanso o relajamiento, despejado de todas las actividades ministeriales a un lado.

Jesucristo sabe que el descanso es una necesidad del ser humano y por eso ha creado este mandato, que fue dado por Dios mismo desde el comienzo de la creación. Se requiere hacer un equilibrio sano en todo lo que se hace. Por eso una vez que Él y sus discípulos habían tenido una jornada larga de sanidad, expulsión de demonios, predicación y exposición del evangelio, tomó la decisión de llevarlos a un lugar tranquilo donde ellos pudieran descansar tranquilamente, y renovar sus fuerzas para los próximos viajes misioneros. Al igual que Jesucristo y sus discípulos, tomaron un merecido descanso de sus labores ministeriales, todos los que desarrollamos un ministerio cristiano, también tenemos que tomarnos un descanso periódicamente, pues si no lo hacemos, corremos el peligro de quemarnos y dejar definitivamente nuestro servicio a nuestro amado Señor.
Apr 03, 202403:54
PARA NO LAMENTARNOS

PARA NO LAMENTARNOS

PARA NO LAMENTARNOS

Afrontar la muerte de un familiar no es fácil para nadie, y más para los padres cuando fallece uno de sus hijos. Cuando un hijo fallece, los padres amorosos quedan destrozados y lloran amargamente con el profundo deseo de haber fallecido ellos en lugar de sus hijos, pues sienten que sus hijos deberían vivir más tiempo que ellos y ser quienes los sepulten cuando fallezcan. Este profundo deseo sintió el rey David cuando falleció uno de sus hijos: “Al oír esto, el rey se estremeció; y mientras subía al cuarto que está encima de la puerta, lloraba y decía: «¡Ay, Absalón, hijo mío! ¡Hijo mío, Absalón, hijo mío! ¡Ojalá hubiera muerto yo en tu lugar! ¡Ay, Absalón, hijo mío, hijo mío!” 2 Samuel 18:33 NVI.

La muerte es algo que debemos afrontar todas las personas en algún momento de nuestra vida. Esta desafortunada situación, la tenemos que afrontar como parte de la consecuencia de nuestros pecados, pues la paga del pecado es la muerte. Para los hombres hay dos únicas maneras de cómo se puede afrontar la muerte. Una de las maneras es morir sin haber recibido a Cristo como Señor y Salvador. Esta manera de morir es la más trágica, pues tras la partida física de este mundo, el alma del hombre jamás encontrará la paz, en su lugar, sufrirá por toda la eternidad. Y la otra manera de morir es teniendo a Jesucristo como su Señor y Salvador. Todo aquel que muere en Cristo, deja por completo todos los sufrimientos de este mundo y pasa a la eternidad a disfrutar de una completa paz y armonía en la compañía de Dios Padre.

Los gemidos profundos del rey David por la muerte de su hijo Absalón, sin duda reflejan el dolor que muchos creyentes experimentan cuando muere algún pariente o amigo inconverso, por quienes quizás habían estado orando por muchos años para que se arrepientan de sus pecados y reciban a Cristo en sus corazones. Los creyentes lloran ,pues saben que si sus familiares o amigos murieron sin Cristo, a ellos les espera una eternidad de sufrimiento. En contraste si algún familiar o amigo muere en Cristo, el dolor existe en el corazón del creyente, pero ese dolor, no es tan profundo, pues tienen la seguridad de que ellos pasaron a la presencia del Señor, liberándose por completo de todos los males de este mundo.

Es una realidad que no podemos hacer nada para prevenir la muerte de nuestros familiares o amigos, lo único que podemos hacer por ellos si todavía no han recibido a Jesucristo como el Salvador de sus vidas, es ayudarles a que den este paso de fe y no tengan que sufrir por toda la eternidad. Debemos aprovechar el tiempo compartiéndoles el mensaje de salvación antes de que les llegue el tiempo de su partida de este mundo, pues si mueren sin Cristo, de nada servirá que lloremos amargamente por ellos.
Apr 02, 202403:54
RECONCILIÉMONOS

RECONCILIÉMONOS

RECONCILIÉMONOS

Hay situaciones adversas o conflictos que marca un distanciamiento entre padres e hijos, entre hermanos, o entre amigos. Cuando se suscita este distanciamiento, hay veces que ninguna de las partes, dominadas por su orgullo, se predisponen para dar su brazo a torcer y dar el primer paso para buscar restaurar las relaciones rotas. Por este orgullo, muchas veces pierden la oportunidad de disfrutar nuevamente de la amistad, de la compañía y momentos maravillosos junto a sus familiares o amigos. Incluso por su orgullo, pueden llegar a morir sin haber restaurado la relación, y cuando eso sucede, generalmente viene el lamento y el remordimiento por no haber dado ese paso para buscar restaurar las relaciones rotas. Por eso antes de lamentarse, siempre será mejor dar el primer paso para buscar el perdón y la reconciliación. Este fue el caso del hijo pródigo: “Por fin comprendió lo tonto que había sido, y pensó: … Volveré a mi casa, y apenas llegue, le diré a mi padre que me he portado muy mal con Dios y con él.” Lucas 15:17-18 TLA.

El hijo prodigo había pedido su herencia a su padre, y con esa herencia salió a explorar el mundo. Pero en poco tiempo malgastó toda su herencia y quedó sin nada, razón por la cual buscó un trabajo, aunque como salario le dieran un plato de comida. Un hombre lo empleó y lo mandó a cuidar cerdos en su finca. Al momento que se puso a trabajar le dio tanta hambre que deseó comer la comida de los cerdos. El hijo pródigo al caer tan bajo, volvió en sí, y pensó en lo tonto que se había comportado al pedir su herencia a su padre y malgastarla. Con la mente lúcida, tomó la decisión de volver a la casa de su padre, pedirle perdón y tratar de restaurar la relación que había roto.

Solo cuando tocamos fondo, nos damos cuenta de lo tonto que nos comportamos a veces. Posiblemente no hayamos roto una relación familiar pidiendo y malgastando una herencia familiar como el hijo pródigo, pero sí puede que hayamos roto una relación con nuestro mal comportamiento, con nuestra rebeldía, o con nuestra diferencia de opiniones. Si por alguno de estos casos o por algún otro estamos distanciados de nuestros familiares o amigos. No esperemos a que algo malo nos pase o les pase a ellos para dar el primer paso para restaurar las relaciones rotas. Ahora que estamos bien o están bien ellos, es el momento oportuno para humillarnos y buscar solucionar algún impase que hayamos tenido con nuestros padres, hermanos o amigos. Es momento de reconciliarnos antes de que sea demasiado tarde, pues no sabemos hasta cuando estemos en este mundo o estén ellos. Recordemos que Jesucristo dio el primer paso para reconciliarnos con Dios. Para esta reconciliación, nuestro amoroso Señor se humilló y entregó su preciosa vida en la cruz del calvario.
Apr 01, 202403:54
MISIÓN CUMPLIDA

MISIÓN CUMPLIDA

MISIÓN CUMPLIDA

Al terminar una ardua y larga jornada de trabajo, o al terminar un proyecto en el cual han invertido mucho tiempo y esfuerzos, las personas se sienten alegres y aliviadas de haber culminado satisfactoriamente, pues saben que les espera un tiempo merecido de descanso. Jesucristo durante su vida terrenal, cumplió exitosamente con cada una de las tareas que le fueron designadas por su Padre eterno, por eso antes de dar su último aliento de vida, y con las últimas fuerzas que le quedaban, exclamó a gran voz que lo había cumplido todo: “Al probar Jesús el vinagre, dijo: Todo se ha cumplido. Luego inclinó la cabeza y entregó el espíritu.” Juan 19:30 NVI.

Antes de que Jesucristo entregara su vida en sacrificio por los pecados de toda la humanidad, el perdón de sus pecados a los hombres, era otorgado por un sistema complicado de sacrificios. En este sistema, por cada pecado del hombre, un animal debía ser sacrificado como sustituto, ya que la paga del pecado es la muerte. El animal con su muerte, pagaba el pecado del hombre, y le daba la posibilidad de que su pecado le sea perdonado y purificado para que pueda presentarse delante de Dios sin mancha alguna. Pero en este sistema había un gran problema, pues las personas pecaban constantemente, de modo que eran necesarios sacrificios frecuentes de muchos animales. Si este sistema sacrificial seguía, los animales corrían el peligro de ser exterminados.

Jesucristo con su llegada a este mundo, cambió el sistema sacrificial del antiguo testamento, ofreciéndose como el sacrificio perfecto y final por el pecado de toda la humanidad. Por eso antes de dar su último aliento, exclamó que todo estaba cumplido. Jesucristo vino a este mundo a cumplir con el plan de salvación de su Padre Celestial, vino a pagar la deuda total de los pecados de la humanidad. Es cierto que al momento de exclamar que todo lo había cumplido, todavía no había muerto, pero Su muerte era cuestión de minutos, ya que el Señor estaba dando su último aliento de vida en la cruz, por eso su sepultura y ascensión al cielo eran tan ciertas como si ya las hubiese cumplido. Así, Jesucristo podía anunciar que se había abierto el camino por el que los pecadores podían ser salvados.

Jesucristo con su muerte en la cruz, dio por terminado el complejo sistema sacrificial del antiguo Pacto, porque Él cargó con todos los pecados de la humanidad. por eso todos los que creen en la muerte y resurrección de Jesucristo pueden vivir por la eternidad con Dios y escapar de la muerte que lleva consigo el pecado. Ahora bajo el nuevo y perfecto Pacto, podemos acercarnos con total libertad a Dios Padre por nuestra fe en su Unigénito Hijo Cristo Jesús, quien entregó su preciosa vida por amor a nosotros.
Mar 29, 202403:54
UN GRAN PREMIO EN EL CIELO

UN GRAN PREMIO EN EL CIELO

UN GRAN PREMIO EN EL CIELO

Dentro de los diez mandamientos dados por el eterno Creador a su pueblo, existen algunos mandamientos que son fáciles de obedecer y practicar si se los lee literalmente. A la mayoría se le hace fácil no quitar la vida a su prójimo, o calumniarle, injuriarle, robarle, y mentirle. También se les hace fácil no deshonrar a sus padres, ni rendir adoración a imágenes ni a ídolos creados por manos humanas. Cumplir estos mandamientos son realmente importantes, pero no son los únicos que se deben cumplir para heredar el reino de los cielos. Esto el Señor lo hizo saber a una persona adinerada que anhelaba entrar al reino de los cielos tras su partida de este mundo. “El hombre le dijo: Maestro, todos esos mandamientos los he obedecido desde que era niño. Jesús lo miró con amor y le dijo: Sólo te falta hacer una cosa. Ve y vende todo lo que tienes, y reparte ese dinero entre los pobres. Así, Dios te dará un gran premio en el cielo. Después de eso, ven y conviértete en uno de mis seguidores.” Marcos 10:20-21 NTV.

Al igual que muchas personas de la actualidad, el hombre que se acercó a Jesucristo pensó que podía heredar el reino de los cielos con base del principio de hacer conforme a lo que se encontraba escrito en la ley de Moisés, que le decía lo que debía hacer. Ante esto, Jesucristo le citó cinco mandamientos, que tratan primordialmente de su relación con su prójimo. Estos cinco mandamientos en resumen le decían que "Debería amar a su prójimo como a sí mismo". El hombre profesó haberlos guardado desde su juventud. Ante la respuesta afirmativa del hombre, Jesucristo le desafío a ir más allá del sentido literal de los cinco mandamientos que le había citado anteriormente. Le desafió a deshacerse de todas sus pertenencias, vendiéndolas y luego compartir todo el dinero recaudado con las personas más necesitadas. Y tras deshacerse de todas sus riquezas, que se adhiriera a su movimiento como uno de sus discípulos.

Para heredar el reino de los cielos no es suficiente con que se cumpla con los mandamientos de manera literal, es necesario ir más allá. Toda persona puede decir que ama a su prójimo, pero si no comparte de lo que tiene con su prójimo que no tiene, ese amor profesado queda en la nada. Jesucristo nos pide que si realmente anhelamos entrar en su reino, compartamos lo que tenemos con las personas necesitadas, y no solo eso, sino que también mantengamos una estrecha relación con Él, convirtiéndonos en uno de sus discípulos. Heredar el reino de los cielos demanda sacrificios, pero hay una promesa de un gran premio para todos los que estén dispuestos a hacer estos sacrificios. Este premio no será material, sino un premio espiritual, que será mucho mayor que los sacrificios que podamos hacer por Cristo.
Mar 28, 202403:54
LOS OJOS DAN LUZ AL CUERPO

LOS OJOS DAN LUZ AL CUERPO

LOS OJOS DAN LUZ AL CUERPO

En una casa que no tiene ventanas, o si sus ventanas permanecen siempre cubiertas con una gruesa cortina, su interior permanecerá a oscuras pese a que afuera pueda estar brillando radiantemente el sol. Para que la luz del sol entre en su interior, todas las cortinas deben ser abiertas, caso contrario todos los rincones de la casa permanecerán a obscuras para siempre. Algo similar sucede con las personas, la luz del evangelio de Cristo brilla intensamente, pero si las personas tienen cerrados sus ojos a esta luz, el evangelio no brillará en su interior, más bien, la obscuridad reinará en todo el ser de la persona, porque el ojo es la lampara del cuerpo que dispersa la obscuridad de su interior, tal como lo recalca Jesucristo: "Tu ojo es una lámpara que da luz a tu cuerpo. Cuando tu ojo es bueno, todo tu cuerpo está lleno de luz pero, cuando tu ojo es malo, tu cuerpo está lleno de oscuridad". Lucas 11:34 NTV.

Los ojos permiten que la luz penetre en el cuerpo; pero si los ojos no están funcionando correctamente, el cuerpo permanece en una absoluta obscuridad. Los ojos no solo permiten que la luz física penetre en el cuerpo sino también la luz espiritual. La luz espiritual es el evangelio de Cristo Jesús. Un gran número de personas caminan por la vida como si sus ojos no pudieran ver bien, pero no a la luz física, sino a la luz espiritual. Por eso viven sumergidos en una densa oscuridad que los lleva a la condenación eterna. Los malos deseos del corazón y la mente, hacen que los ojos no sean sensibles a la luz de la presencia de Cristo en sus vidas, por eso siguen viviendo bajo el control y el dominio de los deseos perversos de su carne. Cuando las personas logran ver a Jesús con los ojos de la fe, la luz del evangelio penetra en su interior y se ve reflejada en sus acciones, ya no para satisfacer a los deseos de su carne, sino para satisfacer a la voluntad de su Señor y Salvador.

Pese a que hayamos abierto los ojos a la luz del evangelio, podemos seguir viviendo en una oscuridad espiritual, si no permitimos que el evangelio penetre a todos los rincones de nuestro ser. Esto se evidencia cuando no estamos caminando en conformidad a la voluntad de nuestro Señor, pues no hemos abandonado definitivamente el pecado, tampoco estamos dedicando nuestro tiempo para estudiar su Palabra, menos para servirle con los dones y talentos que hemos recibido. Para evitar seguir viviendo en una obscuridad espiritual, debemos cambiar radicalmente y permitir que la luz del evangelio penetre todo nuestro ser, y esto solo lo lograremos si mantenemos una estrecha relación con Jesucristo. Además, esta relación hará que existan cambios en nuestro comportamiento y servicio, también producirá el fruto espiritual que el Señor desea que tengamos todos sus seguidores.
Mar 27, 202403:54
DEBEMOS EXAMINAR TODO

DEBEMOS EXAMINAR TODO

DEBEMOS EXAMINAR TODO

Cada día que pasa, surgen nuevos maestros de las Sagradas Escrituras. Algunos de estos maestros enseñan las escrituras con temor y temblor a Dios, tratando de que sus enseñanzas sean lo más fehacientemente posibles a la verdad del evangelio. Pero también hay otros maestros que no tienen ninguna clase de reverencia a Dios, por lo cual enseñan un evangelio distorsionado, adaptado a sus propios intereses, por lo cual se apartan de la verdad. En primera instancia, será difícil distinguir a los verdaderos maestros de los falsos maestros, porque los dos utilizan la Biblia como instrumento para sus enseñanzas, por eso los creyentes antes de aceptar alguna de esas enseñanzas como inspiradas por el Espíritu Santo, deben poner a prueba, tal como lo recomienda el apóstol Pablo: "Sino pongan a prueba todo lo que se dice. Retengan lo que es bueno". 1 Tesalonicenses 5:21 NTV.

No todos los que recorren las calles compartiendo el evangelio de Cristo, son verdaderos siervos de Dios, por eso antes de aceptar alguna de sus enseñanzas como verdaderas, debemos examinar minuciosamente lo enseñado o predicado. La norma para examinar toda predicación y enseñanza es las Sagradas Escrituras. Tras ese examen minucioso, toda enseñanza que esté en conformidad a las Escrituras, la debemos recibir de todo corazón y aplicarla en nuestra vida cristiana. En cambio, todo lo que no esté de acuerdo a las Escrituras, lo debemos descartar y desechar de nuestra vida. Aparte de la Biblia, hay otra manera como la iglesia de Cristo puede examinar la veracidad de las enseñanzas y prédicas de los maestros. Esta evaluación se puede realizar por el don de discernimiento otorgado por el Espíritu Santo a uno o varios miembros de nuestras congregaciones. Por medio del poder del Espíritu Santo, los hermanos que tengan este don pueden discernir si las enseñanzas o prédicas son realizadas bajo la inspiración del Espíritu Santo.

Sin una evaluación previa, no debemos descartar o aceptar las enseñanzas o predicas de los maestros, pues podemos cometer un grave error, aceptando una mentira o descartando una verdad. Para no caer en este error, debemos ser diligentes estudiando las Sagradas Escrituras, ya que al conocer la Palabra de Dios, estaremos totalmente preparados para evaluar lo que nos enseñen o prediquen. Esta evaluación, no solo debemos realizarla con las enseñanzas o prédicas de la Palabra de Dios, sino también en todos los aspectos de nuestra vida, ya que también existen personas tratando de engañarnos con mentiras como si fuesen verdades. Hay personas que inventan chismes y rumores de su prójimo tratando de desacreditarlos, por eso antes de creerlos, debemos examinarlos. Si evaluamos con cuidado lo que la gente dice, aceptaremos lo verdadero y rechazaremos lo falso.
Mar 26, 202403:54
UN CORRECTO EQUILIBRIO

UN CORRECTO EQUILIBRIO

UN CORRECTO EQUILIBRIO

Para los seguidores de Jesucristo, existen dos cosas muy importantes en su vida cristiana. Siendo estas: Su servicio a Dios y a su prójimo con los dones y talentos que han recibido por medio del Espíritu Santo, y su vida de comunión con su Señor y Salvador por medio del estudio de su Palabra y su adoración constante. De estas dos cosas, hay una que es más importante que la otra y esto lo descubrió María, tal como lo recalcó Jesucristo a Marta, hermana de María: " Hay una sola cosa por la que vale la pena preocuparse. María la ha descubierto, y nadie se la quitará" . Lucas 10:42 NTV.

Nuestro amado Señor valora y aprecia todo nuestro servicio en su cuerpo, así como nuestro servicio a nuestro prójimo fuera de Su cuerpo. Pero valora más nuestra comunión con Él. Nuestro Maestro quiere que nos sentemos a Sus pies y aprendamos Su voluntad por medio del estudio de Su Palabra. Una vez que comprendamos su entera voluntad, aprenderemos a tener dominio de nuestras acciones, así como de nuestras palabras y nuestros pensamientos. Una vez que tengamos una estrecha comunión con nuestro Señor, tendremos serenidad, paz y bondad, en nuestro servicio a nuestro prójimo dentro y fuera de nuestras congregaciones.

Jesucristo recalcó la elección de María, pues ella había escogido estar a los pies de su Maestro, escuchando atentamente cada una de sus enseñanzas, en tanto que Marta antes de conocer la voluntad de su Maestro, había escogido el servicio por encima de entrar en una íntima relación con su Maestro. En ocasiones al igual que Marta, caemos en un error cuando ponemos nuestro servicio por encima de nuestra relación con nuestro Señor. Valoramos más servir que estudiar su Palabra. Si nos dedicamos a servir sin darnos tiempo para alimentarnos de la Palabra de Dios, nuestro servicio puede quedar manchado por el orgullo y la autosuficiencia. Alimentarnos de la Palabra por medio del estudio y las prédicas, nos ayudará a no ser autosuficientes, sino dependientes de Dios en nuestro servicio.

También sería un error si solo nos alimentamos de la Palabra de Dios y no tomamos tiempo para servir con los dones y talentos que hemos recibido. Por eso si queremos ser siervos diligentes, debemos tener un correcto equilibrio entre estudiar las Escrituras y servir en el cuerpo de Cristo. La una representa el estilo contemplativo del carácter cristiano, y la otra el activo. Una iglesia llena de Marías tal vez sería un mal tan grande como una iglesia llena de Martas. Por eso un correcto equilibrio hará que la iglesia marche de la mejor manera. Solo una iglesia que se capacita y aplica lo aprendido, caminará en armonía y conforme a la voluntad del Señor.
Mar 25, 202403:54
LOS SECRETOS DEL DIOS TODOPODEROSO

LOS SECRETOS DEL DIOS TODOPODEROSO

LOS SECRETOS DEL DIOS TODOPODEROSO

Conocer los misterios de la creación del mundo, su funcionamiento y los conocimientos que tiene el que lo creó, es imposible para los seres mortales debido a que los hombres tenemos una mente limitada, y los secretos, así como los conocimientos del Creador del universo son ilimitados. Pero pese a esta realidad, algunos hombres con los pocos conocimientos que han logrado adquirir acerca de los fenómenos que se suscitan en el mundo, creen que ya han logrado revelar los diferentes misterios y conocimientos que tiene Dios. A los hombres insensatos que piensan de esta manera, Zofar, uno de los amigos de Job, les tiene este mensaje: "¿Crees que puedes llegar a conocer los secretos del Dios todopoderoso? ¡Nunca podrás llegar a conocerlos! ¡Son más altos que los cielos, más profundos que el sepulcro, más extensos que la tierra y más anchos que la mar!" Job 11:7-9 TLA.

El Creador del universo es tan grande, tan majestuoso, poderoso y asombroso que solamente podemos ver sus atributos divinos de manera borrosa, como si los estuviéramos viendo a través de un espejo empapado. Los diferentes atributos que tiene Dios son infinitos, y nuestra mente es finita, razón por la cual nunca podremos llegar a conocerle plenamente. Nuestro amoroso Dios es insondable en su vida y perfecciones. Por su inmensidad llena todo el orbe, desde la altura de los cielos a lo profundo del Seol, o región tenebrosa de los muertos. Su conocimiento, Su sabiduría, y así como Sus otros atributos divinos, sobrepasan a la tierra, al mar y al infinito mismo. Por todo esto, por más que pasemos nuestra vida tratando de develar la esencia secreta de Dios y sus profundos misterios, jamás lo lograremos, porque toda la creación le está sometida: el cielo, la región de los difuntos, la tierra y el mar, absolutamente todo está bajo su control y dominio.

Como jamás podremos develar los secretos y misterios de nuestro Creador y Su creación, solo nos queda hablar extensamente por toda la eternidad acerca de las maravillas de Su persona, Su divinidad y Sus atributos divinos. Lo poco que se nos ha revelado, o el poco conocimiento que tengamos acerca de nuestro amoroso Padre eterno, debe ser más que suficiente para incentivarnos a darle honra, gloria y loor por toda la eternidad. Agradecerle de todo corazón, por tener el control de todos los fenómenos que se suscitan en el universo, así como por tener el control de nuestras vidas. Pues bajo el control de Dios, podemos tener la certeza de que todo lo que venga a nuestras vidas, siempre van a ser agradables y perfectas. Como perfecto es nuestro amoroso Padre Celestial, también todo lo que hace es perfecto, y la muestra de Su perfección, es el mundo en el cual vivimos.
Mar 22, 202403:54
DIOS ACTÚA SEGÚN SU VOLUNTAD

DIOS ACTÚA SEGÚN SU VOLUNTAD

DIOS ACTÚA SEGÚN SU VOLUNTAD

En este mundo ninguna persona, sea millonaria, líder, monarca o gobernante, puede actuar según su voluntad, ya que todos sin excepción están sujetos a las leyes humanas, y todo aquel que transgreda alguna de estas leyes, tendrá que asumir las consecuencias de sus acciones. Es verdad que la historia humana narra que algunos millonarios, líderes, monarcas y gobernantes han hecho lo que han querido, y han transgredido las leyes humanas una y otra vez, y han muerto sin recibir un justo castigo por sus acciones perversas. Estos hombres malvados habrán escapado de la justicia humana, pero no escaparán de la justicia Divina. Ellos a su debido tiempo, recibirán el castigo merecido por cada una de sus acciones perversas. En contraste a los hombres, Dios es eternamente soberano y no tiene que rendir cuentas de sus acciones a nadie, y nadie está en capacidad de pedirle cuentas a Dios de sus acciones. Esta verdad fue declarada por el rey del imperio Babilonio, Nabucodonosor: “Ante él nada son los habitantes de la tierra. Él actúa según su voluntad, tanto en el cielo como en la tierra. No hay nadie que pueda oponerse a su poder ni preguntarle por qué actúa como actúa.” Daniel 4:35 DHH.

Dios es eternamente soberano, es decir, es el Gobernante supremo del universo, y en calidad de eso puede actuar según su voluntad. Pese a su libertad para hacer lo que le plazca, Dios no hace nada indebido, pues a Él le place siempre hacer lo correcto, justo y necesario, no para Él, sino para toda la humanidad y Su creación. Por esta correcta forma en que Dios actúa, nadie está en capacidad de reprocharle, ni de tacharle de injusto, y las personas que osan hacerlo, es porque no comprenden la correcta soberanía de Dios. Muchas personas al no comprender la soberanía de Dios, lo tachan de injusto, déspota y autoritario. En algún momento Dios permite que algunas cosas malas sucedan a las personas y a su creación, no porque Él no quiere intervenir, sino porque no puede ir en contra de las leyes establecidas por Él antes de la creación del mundo.

Pese a que algunas veces no nos agrade, los planes de Dios son perfectos para nuestra vida y para toda la creación, y si no fueran perfectos, nosotros no lo sabríamos porque no tenemos la sabiduría que tiene Dios, ni tampoco tenemos Su omnisciencia como para saber lo que le conviene a este mundo o a nuestras vidas. Si no tenemos la sabiduría de Dios, ni Su conocimiento, ni Su poder: ¿Cómo podemos reprochar sus acciones, u oponernos a ellos?. En vez de estar en contra de las acciones de Dios, deberíamos alegrarnos y sentirnos seguros de que Él está llevando las riendas de este mundo con su entera sabiduría, conocimiento y su poder, y que no hará nada indebido que pueda afectar sus planes divinos.
Mar 21, 202403:54
POR SU FE, EL JUSTO TIENE VIDA

POR SU FE, EL JUSTO TIENE VIDA

POR SU FE, EL JUSTO TIENE VIDA

El desconocimiento de las Sagradas Escrituras, lleva a muchas personas a creer que pueden alcanzar el reino de los cielos por sus propios medios, como siendo bondadosos con sus semejantes, y sin hacerles ninguna clase de maldad. Las buenas acciones, así como la generosidad y el buen comportamiento, jamás podrán hacer que las personas sean declaradas justas en la presencia de Dios Padre. Porque ninguna acción que haga el hombre, le podrá borrar sus pecados, y una persona que no le hayan sido borrados sus pecados, no puede ser declarado justo, razón por la cual jamás podrá entrar al reino de los cielos, y vivir por la eternidad junto a todos los que han alcanzado la justificación a sus pecados, no por las buenas acciones que hayan hecho, sino por su fe en el Unigénito Hijo de Dios. La fe en Cristo es la única manera en que las personas pueden alcanzar la justificación a sus pecados, este hecho importante lo recalca el apóstol Pablo: “Queda claro, entonces, que nadie puede hacerse justo ante Dios por tratar de cumplir la ley, ya que las Escrituras dicen: Es por medio de la fe que el justo tiene vida.” Gálatas 3:11 NTV.

En su recorrido ministerial por las diferentes ciudades, el apóstol Pablo se encontró con muchos falsos maestros que tergiversaban las enseñanzas de las Sagradas Escrituras. Este grupo de maestros enseñaban que además de aceptar el sacrificio realizado por Jesucristo, debían cumplir la ley de Moisés conjuntamente con los ritos y las ceremonias del Antiguo Testamento para alcanzar verdaderamente la justificación a sus pecados y la vida eterna. Ante estas enseñanzas erróneas, el apóstol Pablo pone en claro que la justificación no se alcanza por cumplir las leyes del Antiguo Testamento, ni tampoco por tener un buen comportamiento delante de los hombres, ni por realizar buenas acciones en favor de sus semejantes, sino solamente por su fe en el Unigénito Hijo de Dios.

El plan de salvación de Dios no se basa en las acciones humanas, sino en la fe. La fe es lo que Dios busca en el corazón de los hombres y la Ley con sus exigencias de actuar no tiene nada que ver con la fe. Por eso, toda persona que anhele alcanzar la justificación y el perdón de sus pecados, no tiene que cumplir más la ley del Antiguo Testamento, ni tampoco sus rituales religiosos, lo único que tiene que hacer es aceptar en su corazón el sacrificio realizado por Jesucristo en la cruz del calvario. El Señor con su muerte y resurrección, hizo posible que el hombre pecador pueda hallar la justificación a sus pecados, y ser declarado justo en la presencia de Dios Padre. Por eso, si anhelamos alcanzar el reino de los cielos, es momento de dejar de confiar en nuestras buenas acciones y poner nuestra fe en Cristo Jesús.
Mar 20, 202403:54
GRANDE ES LA FIDELIDAD DE DIOS

GRANDE ES LA FIDELIDAD DE DIOS

GRANDE ES LA FIDELIDAD DE DIOS

Seguramente en algún momento de nuestra vida, hemos sido víctimas de alguna traición por parte de nuestros familiares, amigos o compañeros de trabajo o estudios. O posiblemente nosotros mismo hayamos sido los que traicionamos a las personas que confiaban en nosotros. Debido a nuestra naturaleza perversa llena de maldad y pecado, es difícil mantenernos fieles a las personas que nos aman y ponen su entera confianza en nosotros. Pero en contraste a todos los seres humanos, el eterno Creador es digno de confianza, pues Él siempre permanece fiel, aunque pase miles y miles de años. Esta maravillosa cualidad de Dios, fue experimentada por el profeta Jeremías a lo largo de su vida, y lo dejó registrado para todas las generaciones del mundo en su libro de Lamentaciones: "El gran amor del SEÑOR nunca se acaba, y su compasión jamás se agota. Cada mañana se renuevan sus bondades; ¡muy grande es su fidelidad!" Lamentaciones 3:22-23 NVI.

Por experiencia personal, el profeta Jeremías conocía la fidelidad de Dios, por eso tenía plena confianza en Él, y en cada una de sus promesas que había hecho para su amado pueblo Israel. Por esta fidelidad, Jeremías tenía la certeza de que Dios no daría la espalda a su pueblo pese a que lo merecían, sino que cumpliría a su debido tiempo las promesas de restauración a la ciudad de Jerusalén, y que también la bendeciría en gran manera. Es un hecho real de que Dios es fiel y verdadero. Nunca puede mentir ni engañar. No puede cambiar Su Palabra. Es absolutamente digno de confianza. Ninguna de Sus promesas puede fallar. Este conocimiento acerca de la fidelidad de Dios debería inundar nuestra alma de confianza en Él, e impulsarnos para estar más que convencidos de que Su Palabra no puede fallar. Y que, a su debido tiempo, cumplirá cada una de sus promesas hechas para nuestra vida pese a que no lo merezcamos, pues nosotros constantemente le estamos fallando, y no podemos permanecer fiel a Él, como Él a nosotros.

Como Dios es fiel, Él desea que todos sus hijos lo seamos también. Él quiere que seamos fieles y verdaderos en todos los aspectos de nuestra vida. Dios quiere que seamos leales a nuestra promesa. Quiere que seamos dignos de confianza, cumpliendo con nuestras responsabilidades adquiridas voluntariamente o por alguna designación. Sobre todo, de entre todas las personas del mundo, los cristianos deben ser fieles a sus votos matrimoniales. También fieles en los compromisos de la asamblea, en el trabajo, en el hogar y en todo su círculo social. Todos los seguidores de Cristo debemos mostrar un testimonio fiel y verdadero en medio de este mundo donde la infidelidad, la traición y los deseos de venganza reinan en el corazón de los hombres inconversos.
Mar 19, 202403:54
DIOS NOS HACE JUSTOS

DIOS NOS HACE JUSTOS

DIOS NOS HACE JUSTOS

Las personas que son condenadas por sus delitos, a una larga vida en prisión o a su ejecución, seguramente en su interior anhelarían que alguien se presentará delante del juez que los condenó, con una orden judicial que justificará todos sus delitos y los absolviera de la condenación. Posiblemente por más que un condenado desee con todo su ser esta absolución, no se llegue a dar, porque no hay una ley que esté por encima de un juicio ya juzgado y condenado. A esas personas solo les queda pagar la condena establecida. En esta vida terrenal, no hay una Ley que pueda absolver a todos los condenados a muerte, pero para la vida espiritual sí lo hay, y es la Buena Noticia revelada por Dios a toda la humanidad. Esta maravillosa noticia nos da a conocer el apóstol Pablo: “Esa Buena Noticia nos revela cómo Dios nos hace justos ante sus ojos, lo cual se logra del principio al fin por medio de la fe. Como dicen las Escrituras: Es por medio de la fe que el justo tiene vida.” Romanos 1:17 TLA.

Todas las personas desde que nacen cargan sobre sus hombros una severa condenación. Esta condenación no es física, sino espiritual. Esta condenación es el resultado de la introducción del pecado a la vida de los hombres. Por ende, todo hombre es pecador y está condenado a una eternidad de sufrimiento. En medio de esta tragedia global, hay una maravillosa noticia, y esta noticia es que todos los condenados pueden ser liberados de su condenación, y no solo eso, sino que pueden ser declarados totalmente justos y dignos para vivir eternamente en el reino de los cielos. Esta maravillosa noticia, es el evangelio que Dios reveló a toda la humanidad hace más de dos mil años. El evangelio les puede dar la salvación a todos los que creen porque es Dios quien da la justificación que todos necesitan. Jesucristo mediante su vida perfecta y su sacrificio en el madero, pagó por todas las faltas cometidas por toda la humanidad, y así hizo posible esta justificación inmerecida del hombre pecador.

En la actualidad, la Buena Noticia de salvación está disponible para todas las personas que se encuentran en las tinieblas del pecado. Dios en su profundo amor y misericordia, por medio del Evangelio hace una invitación a los pecadores a que acepten la justificación a sus pecados, aceptando en su corazón el Sacrificio realizado por su amado Hijo en la cruz del calvario. Todos los que acepten esta invitación por medio de la fe en los méritos de Cristo Jesús, Dios perdona todos sus pecados y los mira como si fueran justos y santos. Dios declara al pecador inocente de todas sus faltas, y retira de sus hombros la terrible carga que los conducía a la condenación eterna. Ahora que son justificados de todos sus pecados, las personas pueden acceder a la presencia de Dios para vivir eternamente en su Presencia.
Mar 18, 202403:54
NO APRISIONE EL EVANGELIO

NO APRISIONE EL EVANGELIO

NO APRISIONE EL EVANGELIO

Dentro de la iglesia cristiana, muchos de sus miembros no cumplen con la gran comisión delegada por Jesucristo antes de volver al reino de su amado Padre Celestial. Estos creyentes pese a conocer la verdad del evangelio que rescata de la condenación eterna al pecador, no lo comparten y dejan que sus familiares, amigos, compañeros y personas que están a su alrededor sigan en sus vidas de pecado que los conducen a la condenación eterna. Algunos creyentes no se dan cuenta de que retener la verdad del evangelio es pecado y que la ira de Dios puede caer sobre ellos por retener esta verdad. Este hecho nos da a conocer el apóstol Pablo: “Pues Dios muestra su ira castigando desde el cielo a toda la gente mala e injusta, que con su injusticia mantiene prisionera la verdad.” Romanos 1:18 DHH.

Esta advertencia que hace el apóstol Pablo no es solo para las personas que evitan que el evangelio de Cristo se proclame con libertad, o para las personas que tuercen el evangelio y lo reemplazan con otras enseñanzas heréticas. Esta advertencia es también para los creyentes que no comparten el evangelio, porque al no compartir el evangelio que da salvación y vida eterna, la mantienen aprisionada, y no le dan libertad para que cumpla el propósito de rescatar a multitud de personas de la condenación eterna. Aprisionar la verdad del evangelio es un pecado que Dios no tolera, por eso no pasará por alto ni condonará una rebelión tan deliberada de los creyentes. Dios quiere quitar el pecado y restaurar al pecador, con ese propósito reveló la verdad del evangelio, y su amado Hijo Cristo Jesús se sacrificó para que esta verdad sea proclamada a toda criatura en todo el mundo. Todo aquel que retiene esta verdad para sí, se rebela contra la voluntad de Dios, razón por la cual la ira de Dios estará sobre todos aquellos que aprisionen la verdad del evangelio.

Dios es amoroso, pero revela su ira sobre todas las personas que mantengan aprisionado la verdad del evangelio de su amado Hijo. La ira de Dios no solo será sobre las personas inconversas, sino también sobre los creyentes que no compartan el evangelio que han recibido. Todo creyente que no quiera tener parte de esta ira santa, tiene que empezar a compartir el evangelio que transformó su vida, con todas las personas que todavía viven en la obscuridad de las tinieblas, para que el evangelio de Cristo pueda convencerlos de dejar sus vidas de pecado y entregar sus vidas a Cristo Jesús. Nuestra tarea como hijos de Dios, es proclamar el evangelio de nuestro amado Señor a todas las personas del mundo, para que ellos puedan arrepentirse de sus pecados y aceptar el precioso regalo de la salvación que Jesucristo ofrece gratuitamente. Seamos obedientes a este mandato antes de que la ira de Dios caiga sobre nosotros.
Mar 15, 202403:54
LA BONDAD DE DIOS

LA BONDAD DE DIOS

LA BONDAD DE DIOS

Amar a los agresores, sin duda es difícil para la mayoría de personas, incluyendo entre ellas a los seguidores de Cristo. Pues es difícil mostrar misericordia y expresar amor por quienes constantemente nos lastiman y ofenden con sus palabras, acciones y actitudes. Posiblemente para nosotros sea imposible amar y mostrar misericordia por esa clase de personas, pero para Dios no lo es, ya que Él constantemente está derramando su profundo amor y misericordia sobre las personas que lo lastiman y lo ofenden con sus rebeliones. Esta acción bondadosa de Dios en favor de los rebeldes y pecadores, nos da a conocer el apóstol Pablo: “Pero Dios es tan misericordioso y nos amó con un amor tan grande, que nos dio vida juntamente con Cristo cuando todavía estábamos muertos a causa de nuestros pecados. Por la bondad de Dios han recibido ustedes la salvación.” Efesios 2:4-5 DHH.

La misericordia es aquella compasión y bondad que Dios manifiesta a los que son culpables de trasgredir sus mandamientos, razón por la cual no derrama el justo castigo pese a que se lo merezcan. Dios en vez de castigar a los trasgresores de sus mandamientos, derrama su profundo amor en sus vidas y los perdona de toda culpa, y como si eso no fuera poco, también les da la posibilidad de que puedan vivir eternamente en el reino de los cielos. Todo esto fue posible gracias al sacrificio de Su amado Hijo en la cruz del calvario. Jesucristo destruyó en la cruz la paga del pecado y su poder sobre la vida de las personas que aceptan su sacrificio.

Antes de aceptar a Jesucristo en nuestro corazón, éramos esclavos de nuestra naturaleza pecaminosa, y muertos espiritualmente, pero al aceptar Su sacrificio, fuimos vivificados y resucitados juntamente con Él; y sentados con Él en Su trono de gloria. Cuando Jesucristo fue vivificado, resucitado y sentado en los lugares celestiales, también lo fuimos nosotros. Todos los beneficios de Su obra sacrificial y redentora los gozamos nosotros en el presente y lo seguiremos disfrutando en el futuro por nuestro vínculo con Él. Desde el momento que aceptamos a Jesucristo como nuestro Señor y Salvador, nos hacemos unos con Él.

Pese a que nosotros éramos enemigos de Dios, Él nos amó profundamente y extendió su misericordia para no darnos lo que nos merecíamos como pecadores, pero en vez de eso nos extendió su gracia, dándonos algo que no nos merecíamos. Gracias a su inmensa bondad, Dios nos dio la salvación y la posibilidad de vivir eternamente en su reino celestial conjuntamente con su amado Hijo Cristo Jesús. Mientras esperamos nuestra vida eterna, tenemos libertad para vivir ya no en la esclavitud del pecado, sino en la libertad de llevar una vida de total obediencia a la voluntad de nuestro amoroso Padre Celestial
Mar 14, 202403:54
EL SUFRIMIENTO ES PASAJERO

EL SUFRIMIENTO ES PASAJERO

EL SUFRIMIENTO ES PASAJERO

Para fortalecer nuestro cuerpo es necesario pasar por una serie de entrenamiento físico, caso contrario, las distintas partes de nuestro cuerpo jamás se fortalecerán, sino que se mantendrán débiles. De la misma forma que es necesario fortalecer nuestro cuerpo físico, también lo es el fortalecimiento de nuestro espíritu, para no ceder fácilmente a las tentaciones de este mundo, y así mantenernos firmes en nuestra fe en el Hijo de Dios. Este fortalecimiento espiritual no lo podemos hacer por nosotros mismos, sino que está a cargo de Dios. Nuestro Padre eterno mediante las pruebas y situaciones adversas que envía a nuestras vidas fortalece nuestro espíritu. Esto nos da a conocer el apóstol Pedro: “Pero después de que ustedes hayan sufrido por un poco de tiempo, Dios hará que todo vuelva a estar bien y que ustedes nunca dejen de confiar en él; les dará fuerzas para que no se desanimen, y hará que siempre estén seguros de lo que creen. Recuerden que Dios nos ha elegido por medio de Jesucristo, para que formemos parte de su maravilloso reino.” 1 Pedro 5:10 TLA.

Al inicio, el entrenamiento o fortalecimiento de nuestro cuerpo físico es doloroso, así también lo es el fortalecimiento de nuestro espíritu. Las pruebas y situaciones adversas por las cuales tenemos que atravesar como seguidores de Cristo no es nada agradable. Algunas situaciones adversas nos ocasionan profundo sufrimiento y dolor, pero todo es necesario para que nuestro espíritu se pueda fortalecer cada vez más y así llegar a una adecuada madurez espiritual. Todo creyente que no pase por pruebas y situaciones adversas, jamás crecerá en su vida espiritual, sino que se mantendrá como un niño fluctuante, débil y escuálido, fácil para ceder a las tentaciones de este mundo. Toda esta preparación espiritual o pruebas por las cuales tenemos que atravesar en nuestra vida cristiana, es momentánea en comparación a nuestra eternidad en el reino de los cielos.

Todas las pruebas y situaciones adversas que llegan a nuestras vidas están bajo el control de Dios, y Él en su amor y misericordia no nos enviara una prueba que no podamos soportar o sobrellevar. Por eso ante cualquier prueba o situación adversa, podemos mantenernos tranquilos, confiando en que nuestro amoroso Padre celestial nos ayudará, y nos dará la fortaleza necesaria para salir victoriosos. Además, estas pruebas pasajeras nos ayudarán a permanecer firmes en nuestra fe, y no desfallecer fácilmente ante las adversidades enviadas por el maligno. Tengamos presente que Dios nos llamó a su gloria eterna, por eso, tras vencer todas estas pruebas y situaciones adversas, podemos tener la seguridad de que estaremos para siempre con nuestro amado Salvador, y seremos como Él para siempre.
Mar 13, 202403:54
DIOS NOS AMO PRIMERO

DIOS NOS AMO PRIMERO

DIOS NOS AMO PRIMERO

Cuando una persona quiere entablar una relación de amistad con su vecino, con su compañero de estudio o trabajo, o con su prójimo, no espera que ellos den el primer paso para que esa amistad se haga realidad, sino que la persona interesada es quien siempre da el primer paso y busca las maneras de cómo iniciar esa relación de amistad. Algo similar se dio en el amor de Dios por toda la humanidad. Dios por su profundo amor a toda la humanidad pecadora, dio el primer paso para amarlo y restaurar su condición pecaminosa. Este acto maravilloso de amor realizado por el eterno Creador, nos da a conocer el apóstol Juan en su primera carta 4:10. “En esto consiste el amor verdadero: no en que nosotros hayamos amado a Dios, sino en que él nos amó a nosotros y envió a su Hijo como sacrificio para quitar nuestros pecados.” NTV.

Dios es absolutamente bueno y amoroso con toda la humanidad, pero Su bondad y Su amor no lo convierte en una persona de moralidad indiferente. Dios no tolera ni excusa el pecado como si no se hubiera cometido, por eso no puede pasar por alto el pecado de la humanidad, razón por la cual nada pecaminoso ni perverso puede existir en su presencia. Cuando una persona trasgrede los mandamientos de Dios, se vuelve indigno de estar en su presencia, pues su relación con Dios queda rota a causa de sus pecados. La única manera de restaurar esta relación es por medio del sacrificio y este sacrificio fue realizado por el Unigénito hijo de Dios en el madero. Dios por su profundo amor a la humanidad pecadora, entregó a Su amado Hijo como expresión de su amor no merecido por lo que el hombre hubiera hecho. Este amor no fue el resultado de algún amor del hombre, sino del profundo amor que Dios tenía para con toda la humanidad cuando eran aún pecadores. Dios envió a su Hijo a este mundo con el propósito de remediar el estado perdido del hombre. Lo hizo porque le amó profundamente.

El hombre para restaurar su relación con Dios, debe pasar por una purificación, y esta se da lugar cuando el hombre acepta el sacrificio que Cristo Jesús realizó en la cruz del calvario. Jesucristo al dar su vida en el madero, se convirtió en nuestro sacrificio literal de manera semejante al que estaba en el Lugar santísimo, donde el sumo sacerdote derramaba la sangre del sacrificio en el día de la Expiación. Cristo hizo esto una vez y para siempre porque derramó su sangre en lugar y para beneficio de otros y así satisfizo las demandas de la justicia santa de Dios y su ira contra el pecado. Todos los que aceptamos a Jesucristo como nuestro Señor y Salvador, no tendremos que sufrir el castigo merecido por nuestros pecados, porque hemos sido absueltos gracias a la preciosa sangre que Cristo Jesús derramó en el madero.
Mar 12, 202403:55
LLAMADO AL ARREPENTIMIENTO

LLAMADO AL ARREPENTIMIENTO

LLAMADO AL ARREPENTIMIENTO

El mundo no es consciente de que lleva una vida pecaminosa, pues les parece normal disfrutar de los placeres , y llevar una vida desenfrenada de inmoralidad sexual, razón por la cual sienten que no tienen nada por que mostrar arrepentimiento delante de Dios. Pese a que los hombres piensen que disfrutar de los placeres de este mundo es algo normal, delante de Dios no lo es, pues los placeres de este mundo rompen Sus leyes, decretos y mandamientos prescritos en su bendita Palabra. Todas las personas que vivan satisfaciendo a sus deseos carnales, están lejos de la presencia de Dios y destituidos de su gloria, pero si se arrepienten del estilo de vida que llevan, pueden alcanzar el perdón de Dios, tal como lo resalta el profeta Malaquías: "En cambio ustedes, desde los días de sus antepasados, siempre han desobedecido mis mandamientos. Pero si ustedes se arrepienten y vuelven a mí, yo también me volveré a ustedes. Yo soy el Dios todopoderoso, y les aseguro que así lo haré. Ustedes me preguntan: “¿Y de qué tenemos que arrepentirnos?”. Malaquías 3:7. NTV.

Llevar una vida desenfrenada, lejos de la voluntad de Dios, ha sido una constante en todas las generaciones humanas desde que el pecado ingresó a este mundo. El pueblo elegido de Dios no fue ajeno a este estilo de vida. Los hebreos a lo largo de la historia, le desobedecieron e incluso se burlaron de sus leyes, decretos y mandamientos; pero Dios en su inmenso amor y misericordia por su pueblo, siempre ha estado dispuesto a aceptarlos, si mostraban un sincero arrepentimiento. Pero el pueblo hebreo no sentía que llevaba una vida pecaminosa, razón por la cual no tenían de que arrepentirse delante de Dios. Al igual que el pueblo hebreo, en la actualidad, muchas personas le dan la espalda al perdón y a la restauración que ofrece Dios, pues el ser humano no quiere reconocer que ha pecado y necesita el perdón para escaparse de la condenación eterna. Pese a que la humanidad piense que no necesita el perdón de Dios, lo necesita, si no quiere ser condenado en el final de los tiempos, puesto que todo aquel que no busque arrepentimiento, será condenado a una eternidad de sufrimiento en el lago de fuego conjuntamente con el maligno y todos sus secuaces.

Al igual que en el pasado, en el presente, Dios sigue haciendo un llamado a toda la humanidad para que se arrepienta de sus pecados y vuelva a sus brazos amorosos, reconociendo que ha pecado y necesita su perdón para alcanzar la salvación y la vida eterna. Si todavía no hemos atendido a este llamado, no esperemos más, Dios es paciente, pero su paciencia tiene un límite, y cuando llegue ese límite, ya no habrá tiempo para arrepentirnos, Dios descargará su ira sobre nosotros y nos condenará a una eternidad de sufrimiento en el lago de fuego.
Mar 11, 202403:55
ALABANZA INCESANTE A DIOS

ALABANZA INCESANTE A DIOS

ALABANZA INCESANTE A DIOS

El hombre y todas las cosas existentes en este extenso universo, indudablemente son obras de las manos de un Ser Divino todopoderoso, santo y eterno. Este ser Divino fue Dios. Él es el Creador de todo lo existente, y lo creó para que le rindan adoración por toda la eternidad. La corona de su creación, en múltiples etapas de su vida en este mundo, no cumple con este propósito divino, pues constantemente el hombre deja de alabar a Dios, incluso algunos nunca llegan a alabarle, ni a rendirle culto y adoración. En contraste al hombre, el resto de la creación no interrumpe su alabanza a su Creador, pues incesantemente de noche y de día expresan su alabanza al único Dios verdadero, el Único que es digno de recibir alabanza gloria y loor por toda la eternidad. Una muestra de esta alabanza incesante al único Dios verdadero, se encuentra registrada en el último libro de las Sagradas Escrituras: “Cada uno de estos seres vivientes tenía seis alas, y ojos por todos lados, y no dejaban de cantar de día y de noche: ¡Santo, santo, santo es el Señor, Dios todopoderoso, que siempre ha vivido, que vive, y pronto vendrá!” Apocalipsis 4:8 TLA.

Los cuatro seres vivientes son también obra de las manos poderosas de Dios, por eso le rinden alabanza a su Creador sin descansar. Le alaban por Su santidad. Dios es un ser santo, pues en lo que respecta a Sus pensamientos, hechos, motivos y en todo otro aspecto, Él es perfecto espiritual y moralmente. Dios es absolutamente libre de pecado y mancha alguna. Le alaban por Su omnipotencia. Dios es un ser todopoderoso, y la muestra de su poder infinito es la creación, por eso ningún ser creado puede igualar a su poder. Su poder es ilimitado y no hay nada que Él no pueda hacer. Y por último, los seres vivientes expresan su alabanza a Dios por Su eternidad. Los imperios surgen y desaparecen; aun los cielos y la tierra perecerán; pero Dios es eterno, siempre existió y siempre existirá, Sus años no se acabarán. Él es siempre el Mismo ayer, hoy y siempre, y pronto vendrá a reinar sobre toda su creación.

Es un hecho evidente que los seres humanos jamás podremos alabar incesantemente a nuestro Creador como si lo hace el resto de su creación y los Seres Vivientes que permanentemente están en su presencia, pero eso no debe ser una excusa para no alabarlo. Dios nos creó con el propósito de que le alabemos por la eternidad, por eso debemos cumplir este propósito mientras tengamos la oportunidad de hacerlo. Le debemos alabar con nuestras acciones, con nuestros pensamientos y con nuestras palabras. Todo nuestro ser debe alabar y glorificar a Dios por Su santidad, Su poder infinito y Su eternidad. El Señor pronto vendrá a gobernar este mundo, y debe encontrarnos alabando y glorificando su santo nombre.
Mar 08, 202403:55
EL ÚNICO SABIO DIOS

EL ÚNICO SABIO DIOS

EL ÚNICO SABIO DIOS

En los diferentes niveles de enseñanza y sistemas educativos de las naciones del mundo, se enseña que a lo largo de la historia humana, han surgido hombres con conocimientos extraordinarios que han aportado para el desarrollo de las diferentes ramas de las ciencias humanas, así como para los avances de la tecnología. Gracias a sus aportes, los nombres de estos hombres han quedado registrados en las páginas de diferentes obras científicas y literarias, en las cuales, se les considera como sabios. En esta larga lista de hombres ilustres que son considerados como sabios por la sociedad humana, no se encuentra el nombre del único Dios verdadero, el Único que realmente tiene el conocimiento absoluto de todo lo que se suscita en este extenso universo. Un hombre por más que adquiera conocimiento, jamás podrá asimilar al conocimiento que posee Dios, por eso, ningún hombre debe ser considerado sabio, porque el único sabio que existe en todo el universo es Dios, y solo Él es digno de toda gloria, tal como lo resalta el apóstol Pablo: “Toda la gloria sea para el único sabio Dios eternamente por medio de Jesucristo. Amén.” Romanos 16:27 NTV.

La sabiduría es más que un mero conocimiento de las diferentes ciencias humanas, o el conocimiento de la generación y funcionamiento de los diferentes fenómenos físicos, químicos y biológicos. La sabiduría es la capacidad de usar esos conocimientos adecuadamente. Pero la sabiduría de Dios va más allá, pues no solo se refiere a Su conocimiento y su aplicación, sino también a Su perfecta visión, inerrante discernimiento y decisiones infalibles. Dios con el conocimiento absoluto de todo, diseñó y creo perfectamente el universo, el cuerpo humano, así como a las plantas y animales, por eso las obras de Su mano proclaman Su sabiduría. A pesar de que la humanidad no reconozca la sabiduría de Dios, Su sabiduría es real y se encuentra registrada como un hilo que corre a través de toda la Sagrada Escritura. Pese a que la humanidad no lo quiera admitir, de la Biblia nace las diferentes ramas de las ciencias humanas existentes en la actualidad.

Dios por medio de su perfecta sabiduría, diseñó un plan para redimir a la humanidad pecadora, y rescatarlo de la condenación eterna. Ese plan de salvación fue ejecutado perfectamente por Su amado Hijo Cristo Jesús, Quien voluntariamente entregó su vida en la cruz del calvario como precio justo por los pecados de toda la humanidad. Gracias al plan divino hemos alcanzado la salvación, y la posibilidad de vivir eternamente en el reino de los cielos. Debemos tener presente que a través del Padre fue que el plan de salvación llegó a revelarse por completo, por eso Él merece todo el mérito, nuestra eterna alabanza y adoración en Cristo Jesús.
Mar 07, 202403:55
EL REINADO DEL SEÑOR

EL REINADO DEL SEÑOR

EL REINADO DEL SEÑOR

El reinado de Jesucristo sobre este mundo, dio su inicio cuando en la cruz del calvario entregó Su vida y venció definitivamente al poder de la muerte y al pecado, que mantenían esclavizados a toda la humanidad. Pero este reinado no está totalmente visible, ya que muchas personas pese a la libertad que el Señor les ofrece gratuitamente, no la quieren recibir, pues prefieren permanecer bajo la esclavitud del pecado que los dirige a la condenación eterna. Pese a la negativa actual de muchos hombres al reinado de Jesucristo en sus corazones, llegará un día cuando el reinado del Unigénito Hijo de Dios sea eminente y no podrá resistirlo.

Cuando llegue el día determinado por Dios Padre, el reinado de su amado Hijo Cristo Jesús no solo será en el corazón de todos sus seguidores, ni solo en el ámbito espiritual, sino sobre toda la creación existente, tanto física como espiritual. En aquel día maravilloso, multitudes alabarán al Señor Dios Todopoderoso. Este futuro reinado eminente de Jesucristo sobre todo lo existente, fue revelado al apóstol Juan, quien a su vez lo dejó por escrito para que toda la humanidad lo conociera y en especial los seguidores de Cristo, y así no perdieran su fe en los tiempos de aflicciones, sino que se mantuvieran firmes en su esperanza del reinado eminente de su Señor y Salvador: “Entonces volví a oír algo que parecía el grito de una inmensa multitud o el rugido de enormes olas del mar o el estruendo de un potente trueno, que decían: ¡Alabado sea el SEÑOR! Pues el Señor nuestro Dios, el Todopoderoso, reina.” Apocalipsis 19:6 NTV.

El poder de Jesucristo es ilimitado, no hay nada que Él no pueda hacer. El Unigénito Hijo de Dios es Todopoderoso, pero pese a Su poder ilimitado, no actúa inmediatamente para poner fin a la maldad de los hombres, ya que es paciente y espera que toda la humanidad pueda arrepentirse de sus pecados, y entregar sus vidas a Él. Pero la paciencia del Señor no permanecerá para siempre, pues llegará un día que su paciencia terminará, y utilizará todo Su poder para eliminar la maldad de este mundo. Tras su victoria sobre los hombres perversos y pecadores, reinará físicamente desde el trono de David. En ese día glorioso, multitud de redimidos que fueron asesinados por su fe en el Unigénito Hijo de Dios, elevarán sus voces por todo lo alto, y alabarán el santo nombre del Señor, por gobernar con poder y autoridad sobre toda la creación. Teniendo la certeza de que el reinado de nuestro Señor es eminente, mantengámonos alabando y glorificando su Santo nombre hasta que llegue ese maravilloso día de Su reinado.
Mar 06, 202403:55
¿ESCONDERSE DE DIOS?

¿ESCONDERSE DE DIOS?

¿ESCONDERSE DE DIOS?

Cuando los niños hacen alguna travesura en casa, tratan de buscar un escondite para esconderse de sus padres, y así no recibir la reprenda por esas travesuras hechas. Posiblemente los niños tendrán éxito al esconderse, pero no podrán permanecer en ese escondite para siempre, tarde o temprano tendrán que salir y enfrentarse a sus padres. Esconderse de un enemigo o de cualquier persona es posible para los hombres, ya que pueden encontrar escondites escapándose a los rincones más alejados del planeta, y así nunca ser hallados por sus enemigos, o por personas con las cuales no quieren fraternizar. El hombre puede esconderse de otro hombre, pero jamás podrá esconderse de la presencia de Dios. Este hecho real nos afirma el profeta Jeremías: “¿Podrá el hombre hallar un escondite donde yo no pueda encontrarlo? afirma el SEÑOR. ¿Acaso no soy yo el que llena los cielos y la tierra? afirma el SEÑOR.” Jeremías 23:24 NTV.

Las personas malvadas o pecadoras que piensen que pueden esconderse de la presencia de Dios para no recibir las consecuencias de sus acciones perversas, están en un grave error, ya que Dios es un ser omnipresente. La omnipresencia es uno de los atributos divinos propios de Dios, este atributo divino quiere dar a entender que Dios está presente en todo lugar y al mismo tiempo. Razón por la cual, no hay ni un pequeño rincón en el amplio universo donde no esté Dios presente. Debido a este atributo divino, el hombre por más que vaya a los rincones más alejados del planeta, incluso a otros planetas del sistema solar, jamás podrá encontrar ni un pequeño escondite donde ocultarse de Dios.

La omnipresencia de Dios es algo realmente terrible para las personas malvadas y pecadoras, pero algo muy reconfortante para las personas que caminan en conformidad a la voluntad de Dios. Todos los que hemos aceptado a Jesucristo como nuestro Señor y Salvador, podemos encontrar un gran consuelo al saber que nuestro Dios es un ser omnipresente. Gracias a este atributo Divino, podemos tener la certeza de que Dios está siempre cerca de nosotros, y nunca aparta su mirada de nuestra vida, para brindarnos Su oportuno socorro cuando nos sobrevenga alguna situación adversa. Sin duda, es maravilloso saber que nuestro amado Dios siempre está cerca de nosotros, y esto mismo nos tiene que mover para llevar una vida de santidad en conformidad a su voluntad, apartándonos definitivamente de los placeres de este mundo y los deseos perversos de nuestra naturaleza carnal. Pero si seguimos cediendo a los impulsos de nuestra carnalidad, podemos tener la certeza de que jamás nos escaparemos de Dios, y recibiremos el castigo merecido por nuestras acciones perversas.
Mar 05, 202403:55
VERDADEROS HIJOS DE DIOS

VERDADEROS HIJOS DE DIOS

VERDADEROS HIJOS DE DIOS

Una forma de identificar que un niño es hijo de una determinada persona es por medio de los rasgos físicos que presentan los individuos. Rasgos como el color o la forma de los ojos, del pelo, la nariz, la sonrisa, y gestos que presentan los niños, serán casi idénticos a los rasgos físicos de sus progenitores. Por eso al comparar estos rasgos físicos se puede determinar que un niño es hijo o no de una persona en específico. Tal como existe una manera de identificar que un niño le pertenece a una persona, también se puede identificar que una persona es un verdadero hijo de Dios. Y esta manera de identificarlos es a través de su vida y testimonio delante de los hombres. Un verdadero hijo de Dios, reflejará la vida y testimonio de Jesucristo, el Unigénito Hijo de Dios. Esta manera de identificar a los hijos de Dios, nos da a conocer el apóstol Juan en su primera carta: “Ya que sabemos que Cristo es justo, también sabemos que todos los que hacen lo que es justo son hijos de Dios.” 1 Juan 2:29 NTV.

La prueba visible de que una persona es un verdadero hijo de Dios, es su conducta recta e intachable. Muchas personas hacen cosas buenas, pero no tienen su fe puesta en Jesucristo. Otros afirman que tienen fe pero rara vez producen buenas obras en favor de su prójimo. Ninguno de estos dos grupos, pueden considerarse que son verdaderos hijos de Dios, ya que la fe y las buenas obras de justicia en favor de su prójimo son virtudes propias de un verdadero hijo de Dios. La verdadera fe en el Unigénito Hijo de Dios siempre produce buenas obras de Justicia. Todas las personas que afirman que tienen fe y viven constantemente practicando la justicia sin duda serán verdaderos hijos de Dios. Es claro que las buenas obras de justicia no producen salvación, pero son necesarias para probar que la verdadera fe está en realidad presente en la vida de las personas.

Aunque nuestra relación con Dios, nuestra fe y nuestro perdón son invisibles, nuestras buenas obras de justicia en favor de nuestro prójimo son muy visibles, al igual que nuestra obediencia a Dios, razón por la cual podemos tener la certeza de que somos verdaderos hijos de Dios. Jesucristo el Unigénito hijo de Dios, al vivir en este mundo reflejó este estilo de vida. Él llevó una vida de comunión con su Padre por medio de la oración y el estudio de las Sagradas Escrituras, al igual mantuvo una vida recta, justa e intachable, siempre obrando en favor de todas las personas más necesitadas. Si todavía no estamos reflejando el estilo de vida de nuestro Señor y Salvador Jesucristo, es momento de que empecemos a reflejar, pues si no lo reflejamos, no alcanzaremos la salvación ni la vida eterna en el reino de los cielos. Debemos mantener una vida justa, siempre arraigados a las manos de nuestro amado Señor.
Mar 04, 202403:55
UNA CONCIENCIA LIMPIA

UNA CONCIENCIA LIMPIA

UNA CONCIENCIA LIMPIA

En esta sociedad plagada por la corrupción, para una persona que quiera mantener su conducta intachable es difícil, ya que constantemente tiene que enfrentarse a la presión de esta sociedad. Pues la sociedad quiere que todas las personas se sujeten a este sistema implantado de corrupción. Todo aquel que ceda a estas presiones, quedará atrapado en este sistema perverso, y su conciencia delante de los hombres no podrá estar en paz y menos aún en la presencia de Dios. El apóstol Pablo no cedió a las presiones de la sociedad de su tiempo, sino que siempre trató de mantener su conciencia limpia. Y esto nos da a conocer el doctor Lucas en su libro, Los Hechos de los Apóstoles: "Por esto, siempre trato de mantener una conciencia limpia delante de Dios y de toda la gente". Hechos 24:16 NTV.

Al igual que en los tiempos del apóstol Pablo, la sociedad actual, sigue presionando a todas las personas, incluyendo a los cristianos para que se introduzcan en el sistema de la deshonestidad y la corrupción. Por ejemplo: Los médicos son presionados o tentados por medio de sobornos para que firmen declaraciones médicas falsas. Al igual, algunos jueces son presionados por la misma sociedad para que fallen en favor de casos que en ocasiones están en oposición a las leyes de la nación. Los catedráticos son presionados por los padres de familia o por las autoridades de las instituciones educativas para que promuevan a los años superiores a estudiantes que no han cumplido con las calificaciones requeridas para hacerlo. Los propietarios de las empresas, ordenan a sus contadores para que maquillen los números de la empresa, minimizando los ingresos, exagerando los gastos, y así no pagar altos impuestos al estado. Y así se puede encontrar un sinfín de situaciones en las cuales la misma sociedad presiona para que todos se alineen al sistema deshonesto y corrupto del mundo. La mayoría de personas incluida entre ellas los cristianos, ceden a estas presiones, pues si no lo hacen, corren el peligro de ser apartados o despedidos de sus puestos de trabajo.

Los seguidores de Cristo que se alineen al sistema deshonesto y corrupto del mundo, jamás podrá tener su conciencia tranquila, ya que la voz del Espíritu Santo que mora en su interior, constantemente les exhortará para que abandonen el sistema impulsado por el mundo y se alineen al sistema demandado por Dios para sus hijos. Al sistema de la honestidad, rectitud y justicia, los cuales reflejan al sistema del reino de los cielos. Si anhela tener una conciencia limpia delante de los hombres y delante de Dios, no ceda a las presiones de esta sociedad, en su lugar, manténgase firme en la voluntad de Dios, pese a que corra peligro de ser apartado de la sociedad o despedido de su puesto de trabajo.
Mar 01, 202403:55
LA DEPRESIÓN

LA DEPRESIÓN

LA DEPRESIÓN

Al igual que la mayoría de hombres, los siervos del Señor a menudo sufren depresiones severas, debido a que las situaciones trágicas que se suscitan a su alrededor y en su vida misma todavía les afectan en gran manera. Porque ninguna persona al momento de su conversión a Cristo fue inmunizada para que no sienta decepción, ansiedad, dolor, angustia o sufrimiento ante las persecuciones por servir a Dios, ante la injusticia de los hombres, las necesidades cotidianas, la traición por parte de los amigos, las enfermedades o muerte de los familiares y seres queridos, etc. Algunos creyentes padecerán depresiones más severas que otros, incluso algunos tendrán el deseo de no seguir existiendo más en este mundo, tal como fue el deseo del profeta Elías cuando le alcanzó una depresión severa en su vida. “Y caminó todo un día por el desierto. Llegó adonde había un arbusto, y se sentó a su sombra con ganas de morirse. ¡Estoy harto, SEÑOR! protestó. Quítame la vida, pues no soy mejor que mis antepasados.” 1 Reyes 19:4 NVI.

La presencia de depresión en la vida de los siervos de Dios no indica necesariamente que tengan falta de fe en su Señor y Salvador, o que no tengan una adecuada madurez espiritual, ya que en cualquier momento, la depresión puede llegar a la vida del creyente, y nadie esta exento de padecerla en algún momento. Además, a lo largo de las Sagradas Escrituras, no se puede encontrar un pasaje donde Dios prometa eximir a sus hijos de sentir toda esta clase de sentimientos ante la realidad que se suscita a su alrededor. Dios no quita los sentimientos a sus hijos, pero sí promete que les va a ayudar a sobrellevarlos, dándoles consuelo y toda la fortaleza que necesitan. Además, el Señor promete que si le entregan todas las cargas a Él les puede dar paz y descanso.

Cuando la depresión llega a nuestra vida, por lo general sentimos como si Dios nos ha abandonado, aun cuando sabemos muy bien que Él nunca lo hace. Este sentimiento tiene el poder de nublar nuestro buen juicio, así como de hacernos sentir sin esperanza y completamente derrotados. Una depresión como esta puede tener diferentes causas, razón por la cual debemos buscarla para poder eliminarla de nuestra vida, ya que si no lo hacemos de manera inmediata puede ocasionarnos más daño, incluso a llevarnos a querer terminar con nuestra vida tal como fue el deseo del profeta Elías. Para no llegar hasta ese punto, cuando sintamos que la depresión nos está atacando, identifiquemos la causa de nuestra depresión y en oración pidamos a Dios que nos ayude a eliminarla desde la raíz. Además, pidamos a nuestro amado Señor que nos de la fortaleza necesaria para seguir adelante en el camino de la salvación y la vida eterna, venciendo todos los obstáculos que puedan causarnos depresión.
Feb 29, 202403:55
NO OCULTEMOS NUESTRA FE

NO OCULTEMOS NUESTRA FE

NO OCULTEMOS NUESTRA FE

Pese a que la libertad de culto esté amparada bajo la ley constitucional de la mayoría de países del mundo, esta libertad no es dada en su totalidad, ya que todavía existen restricciones para que el evangelio de Cristo sea predicado abiertamente en las calles, parques e instituciones educativas. Esto se debe a que existe un gran número de personas que no están de acuerdo con la libertad de culto y la predicación de la palabra de Dios. Muchas de estas personas tienen poderío económico, con lo cual en ocasiones llegan a influenciar sobre la legislación y los tribunales de justicia. Incluso algunos se encuentran ocupando puestos de poder en los congresos o asambleas legislativas de las naciones, lo cual les hace más fácil crear leyes que beneficien sus creencias, y derogar las leyes que estén en su contra.

En esta sociedad donde la libertad para compartir el evangelio de Cristo no es dada en su totalidad, el creyente es llamado por su Señor a hacerlo. Pero no todos los creyentes están dispuestos a cumplir con este mandato, debido a múltiples factores, siendo el más constante de todos ellos, el temor de ser rechazado. Muchos creyentes, y en especial los niños, adolescentes y jóvenes tienen miedo de que sus compañeros y amigos inconversos los rechacen, o se burlen por ser un seguidor de Cristo, por eso ocultan su fe y no comparten el evangelio. A todos los que ocultan su creencia religiosa, el Señor les da estas palabras de advertencia: “Si alguien se avergüenza de mí y de mi mensaje en estos días de adulterio y de pecado, el Hijo del Hombre se avergonzará de esa persona cuando regrese en la gloria de su Padre con sus santos ángeles.” Marcos 8:38 NTV.

Toda persona que oculta su fe en Cristo, o no lo declara abiertamente delante de los hombres, demuestra que siente vergüenza de ser uno de sus seguidores y prefiere mantener la amistad con las personas inconversas. Toda persona que no declare abiertamente su fe y comparta el evangelio de Cristo, no es digno de ser llamado cristiano, porque el creyente está para dar a conocer a su Señor a todo el mundo pecador. Todos aquellos que sientan vergüenza de cumplir con esta tarrea, no tendrán un final feliz, ya que todas estas personas recibirán su justa retribución cuando Jesucristo regrese en gloria con sus santos ángeles. En aquel día, el Señor declarará a su Padre no conocer a todas las personas que ocultaron su fe, por asegurar una hermosa existencia terrenal, libre de burlas y rechazos de los hombres perversos y pecadores. Todas estas palabras de advertencia de nuestro Señor, deben movernos a dejar a un lado nuestro miedo y vergüenza, para empezar a compartir el evangelio a todas las personas, sin importar lo que ellos puedan pensar de nosotros.
Feb 28, 202403:54
DIOS ESTÁ CON SUS HIJOS

DIOS ESTÁ CON SUS HIJOS

DIOS ESTÁ CON SUS HIJOS

En la actualidad, casi en la mayoría de países del mundo, la esclavitud ha sido erradicada en su totalidad. Pero si esta esclavitud persistiera en los tiempos presentes, seguramente las personas que estarían bajo esta esclavitud, no pensarían que Dios esta con ellos, pues el sentir del hombre es: ¿Si Dios existe, porque permite la esclavitud?. La respuesta para esta pregunta es algo compleja de responder, pero se puede tener la certeza de que Dios nunca abandona a las personas aun cuando ellas puedan estar en medio de la esclavitud, y la evidencia de esto, lo encontramos en la vida de José, un joven hebreo: “El SEÑOR estaba con José, por eso tenía éxito en todo mientras servía en la casa de su amo egipcio.” Génesis 39:2 NTV.

José fue uno de los doce hijos de Jacob. Este joven fue vendido como esclavo por sus hermanos a los mercaderes ismaelitas, quienes a su vez lo vendieron en el mercado de esclavos de Egipto a Potifar, un oficial de alto rango. Potifar era un hombre extremadamente rico ya que era un miembro del gabinete y capitán de la guardia del faraón, rey de Egipto. Las familias ricas como la de Potifar, se construían casas de dos o tres pisos con jardines y terrazas hermosas. A su alrededor había floreros de alabastro, pinturas, hermosos tapetes y sillas talladas a mano. La cena se servía en platos de oro e iluminaban sus cuartos con candelabros de oro. José como esclavo, llego a servir a toda la casa de Potifar. Pero pese a esta esclavitud, Dios permaneció junto a José, razón por la cual tuvo éxito en su servicio a su amo egipcio.

Solo Dios puede dar éxito al hombre en todo lo que haga o emprenda, aunque sea una tarea pequeña, la prueba de esto tenemos en la vida de José, pues pese a su servicio como esclavo, Dios estuvo junto a él, y le ayudó absolutamente en todas sus tareas para que sean hechas con excelencia. Gracias a esa ayuda Divina, José tuvo éxito en su servicio y encontró agrado ante los ojos de su amo, razón por la cual le puso al frente de toda su casa, ya no como esclavo, sino como mayordomo. Esta es la certeza que podemos tener todos los que hemos recibido a Cristo en nuestro corazón: Que Dios Padre nunca abandona y que permanecerá cerca de nosotros para ayudarnos a tener éxito en todo lo que emprendamos o hagamos. En el presente, en la mayoría de países del mundo, no estamos en una esclavitud tal como se percibía unos siglos atrás, pero si nos encontramos al servicio de nuestros empleadores. Algunos de ellos serán buenos jefes y otros malvados, pero podemos tener la seguridad de que Dios está junto a nosotros para ayudarnos a tener éxito en nuestros trabajos, y así hallar agrado a los ojos de nuestros empleadores terrenales.
Feb 27, 202403:54
DIOS SATISFACE A SUS HIJOS

DIOS SATISFACE A SUS HIJOS

DIOS SATISFACE A SUS HIJOS

Cuando las necesidades tocan a nuestra puerta, a menudo viene a nuestra mente ideas de seguir los pasos de las personas inconversas, pues superficialmente vemos que les va bien en todo lo que hacen, y no padecen necesidades como nosotros. ¿Pero será que en realidad las personas inconversas no tienen ninguna clase de necesidades? ¿Será que sus vidas están totalmente satisfechas? En cuanto a estas incógnitas, el rey Salomón nos da la siguiente respuesta: “El SEÑOR no dejará que el justo pase hambre, pero se niega a satisfacer los antojos del perverso”. Proverbios 10:3 NTV.

En nuestra percepción, podremos observar que algunos inconversos tienen más de lo necesario, y no padecen ninguna clase de necesidad. Pero en las palabras del sabio Salomón podemos ver que eso no es así, ya que a pesar de que puedan tener todas las riquezas del mundo, no tienen una satisfacción total, por eso siempre están deseando tener más y más riquezas. La satisfacción total o verdadera no se encuentra en las riquezas ni en los bienes materiales como muchos lo pensamos, la satisfacción verdadera se encuentra en Dios, y Él no dará esa satisfacción a las personas inconversas, porque rechazan el sacrificio de su amado Hijo Cristo Jesús.

Además, Salomón nos da a conocer una regla general, y esta regla se basa en la fidelidad de Dios con todos sus hijos, por eso, a pesar de que en algún momento los recursos económicos escaseen en nuestros hogares, Él no dejará que pasemos hambre ni frío , pues Dios en su amor, bondad y generosidad derramará de sus bendiciones en nuestras vidas, y satisfará todas nuestras necesidades. Gracias a esta fidelidad de Dios podemos tener la certeza de que siempre todos los que confiemos en el Señor, tendremos un techo donde descansar, una ropa para abrigarnos del frío y suficiente comida para saciar nuestra hambre presente.

Tengamos esto siempre en nuestro corazón, Dios rechaza el corazón ambicioso, por eso las personas que anhelen riquezas, nunca tendrán suficiente; igualmente, las personas que vivan para satisfacer los deseos de su carne con los placeres de este mundo, nunca encontrarán una satisfacción perdurable, pues una vida sin Cristo siempre estará vacía y no podrá ser llenada con los placeres que ofrece el mundo ni con todas las riquezas existentes en el universo. Al tener presente esta realidad, no debemos agobiarnos cuando nos sobrevenga la peor crisis económica. En su lugar, debemos permanecer firmes en los caminos de la verdad y la justicia que nos llevan a la salvación eterna. Teniendo la certeza de que Dios en su amor y fidelidad siempre satisfará todas nuestras necesidades presentes y futuras, sin importar cuales fuesen estas.
Feb 26, 202403:54
ENSEÑANZAS ESPIRITUALES

ENSEÑANZAS ESPIRITUALES

ENSEÑANZAS ESPIRITUALES

A través de los tiempos, un sinnúmero de personas inconversas han tratado de estudiar el contenido de las Sagradas Escrituras, y en su percepción, han encontrado un sinfín de errores, razón por la cual han desechado el contenido de la Biblia como un libro inspirado por un ser divino, pues ellos concluyen que los seres divinos no pueden cometer errores. En algo si están correctas las personas inconversas, es verdad que un ser divino no comete errores, pero en lo que no están correctos, son en los aparentes errores que han encontrado en las Escrituras, pues todo el contenido Bíblico no tiene errores, ni tampoco se contradicen sus pasajes entre sí.

La Biblia es cien por ciento inerrante, lo único que pasa es que las personas inconversas no pueden comprender el contenido Bíblico, ya que su contenido es espiritual, razón por la cual las personas que no tengan al Espíritu Santo en su interior, no podrán comprender las enseñanzas de las Sagradas Escrituras tal como lo afirma el apóstol Pablo: “Los que no tienen el Espíritu de Dios no aceptan las enseñanzas espirituales, pues las consideran una tontería. Y tampoco pueden entenderlas, porque no tienen el Espíritu de Dios.” 1 Corintios 2:14 TLA.

Los que no han aceptado a Jesucristo como su Señor y Salvador no pueden comprender el contenido de las Escrituras, pues al no tener a Cristo, tampoco tienen al Espíritu Santo, Quien es la tercera persona de la Divinidad que puede iluminar al hombre para que puedan comprender la voluntad de Dios. No sólo son divinas las Escrituras en su revelación y en su inspiración, sino que sólo puede ser comprendida por el poder del Espíritu de Dios. Sin su ayuda, el hombre natural o inconverso no capta las cosas que son del Espíritu de Dios, porque para él son tonterías. Las personas que no tienen al Espíritu Santo en su interior, jamás podrán comprender las enseñanzas de la Biblia, porque Sus enseñanzas solo pueden ser discernidas por el Espíritu, pues las enseñanzas de Dios son espirituales y no humanas como muchos inconversos lo creen.

No debemos esperar que la mayoría de las personas inconversas apruebe o aun entienda nuestra decisión de seguir a Cristo. Pues para ellos les parecerá tonto que sigamos a un Ser invisible. Esto se debe a que no pueden comprender lo maravilloso que es caminar en los caminos del Señor, razón por la cual no debemos perder el tiempo tratando de explicarles las razones de nuestra fe inquebrantable en el Hijo de Dios. Los inconversos nunca nos comprenderán pues no tienen al Espíritu Santo en su interior, y sin el Espíritu Santo jamás comprenderán nuestra decisión por las cosas espirituales, por las cosas que nos liberan de la condenación eterna, y nos dan la posibilidad de vivir eternamente en la presencia de Dios Padre.
Feb 23, 202403:54
SOLO JESÚS CONOCE A DIOS PADRE

SOLO JESÚS CONOCE A DIOS PADRE

SOLO JESÚS CONOCE A DIOS PADRE

Dentro de las familias humanas, es un hecho evidente que no todos los padres conocen perfectamente a sus hijos, ni sus hijos conocen perfectamente a sus padres. Esto se debe a que dentro de las familias no existe un vínculo de confianza, razón por la cual los hijos no revelan todas las cosas que les pasa a sus padres, ni los padres revelan las cosas que les pasan a sus hijos, generando de esa manera secretos y barreras entre ellos. A la final, muchos padres mueren sin haber descubierto las cosas que les ocultaron sus hijos. En contraste a la relación de confianza que tienen algunos padres con sus hijos y viceversa, la relación de confianza entre Jesucristo y su Padre eterno siempre ha sido óptima, y esto lo dio a conocer el Señor en una de sus enseñanzas: “Mi Padre me ha entregado todas las cosas. Nadie conoce realmente al Hijo, sino el Padre; y nadie conoce realmente al Padre, sino el Hijo y aquellos a quienes el Hijo quiera darlo a conocer.” Mateo 11:27 DHH.

Jesucristo con su Padre eterno, tienen una estrecha relación de confianza, razón por la cual, no existe ninguna clase de secretos entre ellos. Jesús conoce perfectamente a Su Padre, y su Padre conoce perfectamente a su Hijo Cristo Jesús. A parte de Jesucristo y el Espíritu Santo, nadie más conoce a Dios Padre, ni siquiera los ángeles que están permanentemente en su presencia sirviéndoles y menos aún los hombres. Por eso todo aquel que quiera conocer la voluntad de Dios Padre, primero tiene que conocer a Su hijo. Conocer no es solo saber sobre la existencia del Hijo de Dios. Conocer a Jesús es aceptarlo como el único Señor y Salvador de su vida, es despojarse de la vieja naturaleza pecaminosa y vivir bajo Su voluntad, la cual se encuentra detallada en las Sagradas Escrituras, y específicamente en los Evangelios. Una vez que el hombre conozca a Cristo, estará en capacidad de conocer a Dios Padre, pues el Señor, solo revelará a su Padre a sus siervos más fieles.

En su propia fuerza o intelecto, el hombre jamás podrá conocer a Dios Padre y su voluntad, ya que la fuerza y el intelecto del hombre es finito, y Dios Padre es un ser infinito en todos sus aspectos, razón por la cual, sólo otro ser con la misma esencia infinita y divina es suficientemente grande para comprender a Dios Padre y su voluntad. Jesucristo es el único Ser aparte del Espíritu Santo que comparte esa esencia infinita y divina, razón por la cual tiene la capacidad de comprender a Su Padre y trasmitirla a la humanidad. Ya que Jesucristo al venir a este mundo, tomó la naturaleza humana, precisamente para revelar a Su Padre a toda la humanidad. Todo aquel que quiera conocer a Dios Padre, tendrá que conocer a Su Hijo primero, pues Él es el único que puede revelarlo.
Feb 22, 202403:54
CONTENTOS EN TODA SITUACIÓN

CONTENTOS EN TODA SITUACIÓN

CONTENTOS EN TODA SITUACIÓN

Estar contento con lo que se ha logrado obtener hasta el presente, no es un sentimiento propio que manifiesta la mayoría de los hombres, ya que en su interior siempre está el deseo de tener más y más, razón por la cual nunca podrán estar contentos pese a las riquezas y posesiones que tengan en sus manos. En esto de no manifestar contentamiento con las bendiciones que han logrado obtener de las manos generosas de Dios, también caen algunos seguidores de Cristo, pues sus corazones al igual que de la mayoría de personas inconversas, también están dominados por el deseo de amontonar riquezas y posesiones. Un hombre que aprendió a manifestar su entero contentamiento con las bendiciones recibidas de las manos generosas de Dios, fue el apóstol Pablo, y esto lo dio a conocer en su carta a los hermanos de la iglesia en la ciudad de Filipos: “No que haya pasado necesidad alguna vez, porque he aprendido a estar contento con lo que tengo.” Filipenses 4:11. NTV.

El apóstol Pablo durante su ministerio, había aprendido a tener contentamiento con lo que Dios ponía en sus manos en ese instante, así tuviera en abundancia o padeciera necesidad. El siervo de Cristo había llegado a comprender que el verdadero contentamiento no se encontraba en la acumulación de las riquezas y posesiones materiales, sino que se encontraba en la fe en el poder de Cristo para satisfacer cada una de las necesidades momentáneas del hombre. Con esta comprensión de la fe en el poder de Cristo, el apóstol Pablo manifestaba su entero contentamiento fuese cual fuese su situación económica presente, pues tenía la plena seguridad de que Dios supliría cualquiera de sus necesidades emergentes.

Pese a caminar en los caminos del Señor por un largo tiempo, es difícil mantenernos contentos con lo que Dios pone en nuestras manos, pues en nuestro corazón permanece el deseo de acumular riquezas materiales, y nos hace sentir que solo alcanzando esas riquezas tendremos un verdadero contentamiento. Posiblemente las riquezas materiales nos ayuden a tener una estabilidad económica y llevar una vida confortable, pero es algo seguro, las riquezas jamás nos darán un verdadero contentamiento, pues el verdadero contentamiento se encuentra en el poder de Cristo para fortalecernos y así sobrellevar de la mejor manera todas nuestras situaciones, sean en abundancia o en escasez. La fe en el poder de Cristo nos ayudará a llevar nuestra cabeza siempre erguida con un estómago vacío o lleno, una mirada recta con un bolsillo vacío o lleno, un corazón feliz con un salario no pagado o pagado. Solo apoyándonos en las promesas de Dios y en el poder de Cristo, podremos mantenernos contentos en toda situación de nuestra vida.
Feb 21, 202403:54
REFLEJEMOS LA GLORIA DEL SEÑOR

REFLEJEMOS LA GLORIA DEL SEÑOR

REFLEJEMOS LA GLORIA DEL SEÑOR

Al estar vendado los ojos, es difícil para las personas poder ver lo que se encuentra a su alredor, incluso si las vendas no son tan gruesas, por eso, para que puedan ver con claridad y distinguir todas las cosas, es necesario que se quiten las vendas de sus ojos. Toda persona antes de tener ese encuentro personal con Cristo, camina por el mundo como si tuviese una venda puesta, pues no puede ver ni percibir las cosas divinas, ni menos ver la gloria del Señor. Estas vendas son sus pecados. El pecado distorsiona todo entendimiento de las personas, por eso no pueden ver las cosas espirituales pese a que se encuentran al frente. Pero una vez que las personas aceptan a Cristo, sus vendas son quitadas y poco a poco pueden empezar a ver y percibir las cosas espirituales del reino de los cielos. Esta realidad la da a conocer el apóstol Pablo: “Así que, todos nosotros, a quienes nos ha sido quitado el velo, podemos ver y reflejar la gloria del Señor. Y el Señor, quien es el Espíritu, nos hace más y más parecidos a él a medida que somos transformados a su gloriosa imagen.” 2 Corintios 3:18 NTV.

Una vez que la persona acepta a Jesucristo en su corazón, las vendas que nublaban su entendimiento de las cosas divinas son quitadas, razón por la cual, poco a poco puede empezar a ver y percibir la gloria que irradia de la presencia del Señor, y no solo eso, sino que también gracias a la acción del Espíritu Santo, la persona redimida también empieza a reflejar la gloria del Señor en su vida. Esta transformación no es de manera inmediata, sino que es un proceso continuo y progresivo, el cual terminará cuando el redimido por fin llegue a la presencia de Dios Padre. Cuando el creyente esté en la presencia de Dios, tendrá la misma imagen gloriosa de Jesucristo, pues estará libre de todo pecado y compartirá la santidad de su Señor y Salvador. Para llegar a este nivel de santidad, cada creyente debe crecer en su conocimiento íntimo de la voluntad de Cristo, mientras más lo conozca, más se revela Él en la vida de cada uno de ellos en la misma imagen.

El pecado extiende un velo entre el Señor y nuestro rostro, pero este se desvanece cuando confesamos y abandonamos el pecado. Sin el pecado que estorbe nuestro entendimiento, podemos ver en la Palabra de Dios la perfecta gloria del Señor ; es decir, Su excelencia moral y santidad. Por eso, a medida que contemplemos la gloria y la majestad de nuestro Señor sin ninguna clase de velo o venda que estorbe nuestro entendimiento, seremos transformados todo el tiempo en la semejanza a nuestro amado Redentor. La meta máxima de cada creyente debe ser la de asemejarnos a Cristo, y si nos enfocamos de manera continua por lograr esa meta, el Espíritu Santo con su poder nos transformará cada vez más a la imagen y semejanza de nuestro Señor.
Feb 20, 202404:03
GLORIFICAR A DIOS EN TODO MOMENTO

GLORIFICAR A DIOS EN TODO MOMENTO

GLORIFICAR A DIOS EN TODO MOMENTO

Cuando las cosas marchan bien en nuestras vidas, se nos hace fácil seguir en los caminos del Señor. Se nos hace fácil asistir regularmente a la iglesia para exaltar y glorificar el santo nombre de Dios. Se nos hace fácil entregar nuestros diezmos y ofrendas para que la obra de Dios siga adelante. Pero ¿Qué pasaría si las cosas empiezan a complicarse? ¿Qué pasaría si los problemas y las enfermedades viniesen a nuestras vidas? ¿Será que mantendremos nuestra fidelidad a Dios, lo exaltaremos y seguiremos aportando para Su obra?.

Es común afligirnos cuando los problemas invaden nuestra vida, pues algunos problemas parecen imposibles de sobrellevar, y menos encontrar una solución inmediata. Cuando la aflicción y las dudas nos invaden, perdemos toda nuestra confianza en el poder de Dios para socorrernos y darnos la victoria sobre nuestras aflicciones. Al perder nuestra confianza en el poder de Dios, algunos tenemos la osadía de echarle la culpa a Dios, de ser el causante de todas nuestras aflicciones, por tal razón, pronto tomamos la errónea decisión de apartarnos del camino de la salvación, y volver al mundo de donde el Señor nos rescató.

Esta forma de proceder no es correcta de un verdadero seguidor de Cristo, ya que no debemos mostrar nuestra confianza a Dios solo en los momentos en los cuales tenemos paz y todo lo que nosotros necesitamos gracias a las dádivas de nuestro amoroso Padre Celestial. Nuestra confianza en Dios debe ser en todo momento, incluso en momentos de aflicciones y necesidades. Un ejemplo de esta confianza y fidelidad a Dios en momentos de aflicciones fue Job. Un hombre que perdió absolutamente todo de la noche a la mañana. Job perdió su fortuna, sus hijos y su salud, pero pese a eso mantuvo su fidelidad y confianza en Dios tal como nos narra en su libro. Ante la propuesta de que reprochara a Dios, Job respondió: “… No digas tonterías. Si aceptamos todo lo bueno que Dios nos da, también debemos aceptar lo malo.”. Job 2:10.

Job nos enseña a mantener nuestra fidelidad a Dios aun en medio de las aflicciones, por eso, aunque no comprendamos por qué debemos pasar por diferentes situaciones, debemos reconocer que la soberanía de Dios es perfecta para cada uno de nosotros. Todo lo que nos envía Dios a nuestra vida, sean bendiciones o pruebas son para moldear nuestro carácter y ayudarnos a alcanzar la madurez cristiana, además todo está bajo su control, y no nos enviará pruebas más difíciles de lo que podamos soportar. Tener estos pensamientos y aplicarlos en nuestras vidas, no será fácil, pero debemos tratar de hacerlo. Debemos glorificar y exaltar el santo nombre de nuestro amado Señor aún en medio de nuestras tribulaciones
Feb 19, 202403:54
ENSEÑANZAS SUJETAS A LA BIBLIA

ENSEÑANZAS SUJETAS A LA BIBLIA

ENSEÑANZAS SUJETAS A LA BIBLIA

En la actualidad, existen un sinfín de sectas religiosas que enseñan las Sagradas Escrituras de manera distorsionada. Estos grupos religiosos dominados por sus ambiciones y deseos perversos, sin ninguna clase de temor a Dios, sacan de contexto diversos pasajes Bíblicos para enseñar doctrinas erróneas que afiancen sus ocultos deseos y creencias. Estas enseñanzas distorsionadas de las Escrituras, no son nada nuevas, ya que eran practicadas abiertamente por los líderes religiosos del pueblo hebreo en los tiempos de Jesucristo, razón por la cual, el Señor les reprendió con severidad: ¡Qué mal les va a ir! Se supone que ustedes deben enseñar al pueblo a obedecer a Dios, pero ni ustedes mismos lo hacen. Enseñan que se puede no cumplir una promesa, si se jura sólo por el templo; pero que se debe cumplir esa promesa, si se jura por el oro del templo. Mateo 23:16 TLA.

A lo largo de los tiempos de la religión judía, los escribas y sacerdotes del pueblo hebreo habían edificado un falso sistema de razonamiento religioso para evadir el pago de las promesas o juramentos. Por ejemplo, ellos enseñaban al pueblo que si uno juraba por el templo, no se estaba obligado a cumplir dicho juramento, pero que si se juraba por el oro del templo, entonces estaban obligados a cumplir dicho juramento, ya que si rompían el juramento, debían sujetarse a penalidades decretadas por la ley judía. De esta manera, ellos valoraban el oro por encima de Dios, pasando por alto que el templo era la morada terrenal del Dios viviente en medio de su pueblo. Los escribas y sacerdotes estaban más interesados en lo material que en lo espiritual, por eso valoraban los juramentos sobre el oro antes que los juramentos realizados por el templo de Jerusalén. Ante estas enseñanzas erróneas de los escribas y sacerdotes, el Señor dejó en claro que jurar por el templo, equivale a hacer un juramento en el nombre del Dios viviente.

El Señor está en contra de las enseñanzas distorsionadas de las Escrituras, por eso hizo esta severa advertencia a los líderes religiosos judíos, y por ende a todos los que osen en seguir enseñando las Escrituras de manera distorsionada. Todos los que no atiendan a estas advertencias, recibirán la ira del Señor de los Ejércitos Celestiales en el final de los tiempos. Los maestros de las Escrituras están llamados no solo a enseñar al pueblo a obedecer a Dios, sino que ellos tienen que mostrar esta obediencia primero, ya que son un ejemplo para todo el pueblo. Por eso, si somos maestros de las Sagradas Escrituras, antes de enseñar a otros, primero debemos mostrar nuestra obediencia a Dios, porque el testimonio de nuestra obediencia, será nuestro mejor aliado para enseñar al pueblo sin temor a murmuraciones. Además, debemos enseñar las Escrituras sin ninguna clase de distorsiones.
Feb 16, 202403:54
REPRENSIÓN A SOLAS

REPRENSIÓN A SOLAS

REPRENSIÓN A SOLAS

Ante una ofensa o agravio , el hombre pierde fácilmente sus estribos o dominio propio, y actúa de forma agresiva contra su agresor, pagándole con la misma moneda todo el agravio realizado. En esto de perder los estribos ante las agresiones, también caemos con frecuencia los seguidores de Cristo, pues en esos momentos de dolor o ira, perdemos total dominio de nuestras palabras y acciones, y terminamos por ofender o lastimar a las personas que nos agredieron, sin importar que ellos sean nuestros hermanos en la fe. Esta forma de actuar de un seguidor de Cristo ante una ofensa o agresión no es correcta, y esto nos da a conocer nuestro Señor y Salvador: “Si uno de mis seguidores te hace algo malo, habla con él a solas para que reconozca su falta. Si te hace caso, lo habrás ganado de nuevo.” Mateo 18:15 TLA.

El anhelo de Jesucristo es que todos sus seguidores tengamos total dominio de nuestras palabras y acciones en todo momento y en toda situación, más aún cuando alguno de nuestros hermanos nos ofenda o nos lastime con sus palabras y acciones. Nuestro Señor nos pide que en todo momento guardemos la compostura, o dominio de todo nuestro ser para no actuar impulsivamente bajo el dominio del dolor o la ira. Nos pide que no les guardemos rencor, y si es que hay que reprenderles por sus acciones, que no lo hagamos en presencia de los incrédulos o extraños; más bien que los llevemos a un lugar donde podamos estar a solas con ellos, y les mostremos sus faltas. Si tras la amonestación a solas reconocen sus faltas y piden perdón, habremos ganado a nuestro hermano. Nuestro Señor nos pide que actuemos de esta manera, pero el problema es que no actuamos así, pues en muchas ocasiones nos dejamos dominar del rencor, el dolor y la ira, y tratamos de vengarnos de ellos.

Si nos consideramos seguidores de Cristo, debemos escuchar cada una de sus enseñanzas y aplicarlas a nuestro diario vivir, caso contrario, nuestra profesión de fe en Él será vana. Por eso, si en algún momento somos víctimas de algún hermano de nuestra congregación, debemos mantener el control de nuestras palabras y acciones para no tomar represalias contra ellos. Debemos ser pacientes y esperar el momento oportuno para hablar con ellos a solas, y así nadie se entere del impase que se haya generado. Si ellos nos escuchan a buena hora, caso contrario ellos tendrán que rendir cuentas al Señor de sus acciones perversas. Además, no es bueno que los conflictos entre creyentes se ventilen al aire libre, y menos aún en presencia de personas inconversas. Siempre debemos procurar mostrar un buen testimonio ante ellos, para que no tengan de que murmurar contra la fe que profesamos, y menos aún contra nuestro amado Señor.
Feb 15, 202403:54
LO QUE FÁCIL VIENE, FÁCIL SE VA

LO QUE FÁCIL VIENE, FÁCIL SE VA

LO QUE FÁCIL VIENE, FÁCIL SE VA

Al navegar por las diferentes redes sociales, es común encontrarse con anuncios publicitarios, ofertando negocios piramidales con tazas de ganancias exorbitantes en tan poco tiempo. O encontrarse con anuncios de lotería y juegos como el bingo, con una llamativa promesa de que esta vez serán los próximos ganadores. O con otras formas de apuestas más singulares: como la ruleta, la apuesta de cartas, de deportes, carreras de caballos, pelea de perros, etc. O también encontrarse en las bandejas de entrada, con correos electrónicos anunciando que son ganadores de premios millonarios, y que para poder reclamarlo, solo tienen que hacer pequeños depósitos de dinero para cubrir los gastos de trámites burocráticos. Y así, podemos encontrarnos con diferentes maneras con que nos seducen para que accedamos a estos beneficios de obtener riquezas en tan poco tiempo, y sin ninguna clase de esfuerzos. Todo esto nos parecerá tan bueno, pero los sabios escritores de los Proverbios nos dicen: "La riqueza lograda de la noche a la mañana pronto desaparece; pero la que es fruto del arduo trabajo, aumenta con el tiempo." Proverbios 13:11 NTV.

Sin duda, es un anhelo de la mayoría de nosotros tener riquezas, pero no todos estamos dispuestos a esperar ni sufrir por ellas. Con esa ambición, tratamos de tomar todos los atajos posibles para hacerlos realidad, lo antes posible. Por eso en ocasiones nos enredamos en estos anuncios poco confiables que nos ofrecen multiplicar nuestro dinero en tan poco tiempo y sin ninguna clase de esfuerzo. Posiblemente al invertir en estas empresas logremos multiplicar nuestro dinero, pero las ganancias obtenidas no crecerán, sino que se irán tal como vinieron. Pues cuando la riqueza se adquiere de prisa, con facilidad, sin esfuerzo, suele disiparse con la misma rapidez y facilidad de las manos del poseedor.

En tanto que la riqueza adquirida con el trabajo de cada día, con el esfuerzo de cada hora, y el sudor de la gota gorda, jamás se disipa a la ligera; además, como esa riqueza fue conseguida por medios justos, el Señor en su fidelidad recompensa todo el esfuerzo realizado por el hombre. Por eso, el pequeño ahorro que haga cada día el hombre honesto y trabajador, tendrá la bendición de Dios y hará crecer sin cesar su riqueza a lo largo del tiempo. Con esta certeza de la fidelidad de Dios a la honestidad y al trabajo arduo, trabajemos de una manera honrada, sin ambicionar en obtener riquezas a la ligera, ya que esas riquezas no contarán con la bendición de Dios y por eso se esfumarán rápidamente. Además, la práctica de apostar no debe tener espacio en nuestra vida, ya que no goza de buena reputación, pues los soldados romanos echaron suertes para apropiarse de la túnica de nuestro Señor.
Feb 14, 202403:54
MANTENGÁMONOS SIEMPRE UNIDOS

MANTENGÁMONOS SIEMPRE UNIDOS

MANTENGÁMONOS SIEMPRE UNIDOS

En este mundo individualista, es difícil que los hombres se pongan de acuerdo y busquen la unidad, o el bienestar común de toda la población. Pues cada uno desea cumplir sus propios deseos y satisfacer primero todas sus necesidades, antes que preocuparse por satisfacer las necesidades de su prójimo. Este deseo egoísta, impide toda búsqueda de unidad y fraternidad entre los seres humanos , haciendo nula la voluntad de Jesucristo para todos los hombres. La voluntad del Señor es que toda la humanidad se mantenga unida, velando los unos por las necesidades de los otros, y en especial este deseo es para todos Sus seguidores. Unas horas antes de ser arrestado por la guardia romana y los líderes religiosos del pueblo hebreo, Jesucristo pidió profundamente a su Padre para que mantenga siempre unidos a sus discípulos tras su partida de este mundo. Y esta fue su oración: “Te pido que se mantengan unidos entre ellos, y que así como tú y yo estamos unidos, también ellos se mantengan unidos a nosotros. Así la gente de este mundo creerá que tú me enviaste.” Juan 17:21 TLA.

Jesucristo sabía que tras su partida de este mundo, vendrían tiempos realmente difíciles para sus discípulos, los cuales, les harían dudar de permanecer juntos en unidad y armonía, buscando siempre el bienestar común de la pequeña comunidad a la cual pertenecían. También el Señor sabía que el maligno iba a hacer todo lo posible para destruir esa unidad de sus discípulos, sembrando en sus corazones, deseos de superioridad e individualismo. Conociendo todos estos peligros que sobrevendrían sobre sus discípulos, el Señor oró fervientemente a Su Padre para que les ayude a vencer todos estos posibles obstáculos, y les mantenga unidos en amor tal como Él se había mantenido unido en el amor a su Padre. Además, el Señor anhelaba que sus discípulos formen un poderoso testimonio de la realidad del amor de Dios y esto solo lo podrían lograr si se mantenían unidos.

El anhelo de Jesucristo no solo era para sus discípulos de ese tiempo, sino también para todas las generaciones de creyentes. Jesucristo anhela que todos los creyentes del mundo nos mantengamos unidos en su amor, tal como Él se mantuvo unido al amor de su Padre. Porque si estamos unidos en el amor de Jesucristo, también estaremos unidos en el amor de Dios Padre, y el enemigo no podrá hacer nada para destruir esta unidad que tenemos entre creyentes. Además, nuestra unidad que irradia el amor de Cristo, será un gran testimonio para las personas inconversas, y no solo eso, sino que podremos dejar toda rivalidad a un lado para trabajar conjuntamente en la predicación del evangelio de nuestros Señor, y así alcanzar a todas las naciones del mundo.
Feb 13, 202403:54
ENTREGUE SUS CARGAS A CRISTO

ENTREGUE SUS CARGAS A CRISTO

ENTREGUE SUS CARGAS A CRISTO

Al dar un breve vistazo a nuestro alrededor, y mirar fijamente el rostro de las personas, podemos percibir que algunas de ellas llevan consigo un profundo sentimiento de angustia, dolor y amargura. Posiblemente estos sentimientos se deban a las duras y terribles situaciones por las cuales han tenido que atravesar a lo largo de sus vidas. Situaciones como la pérdida de seres queridos, terribles y graves enfermedades, el desempleo, las necesidades, la traición del cónyuge, el divorcio, etc. El acumulo de la angustia, dolor y amargura pueden llegar a volverse una carga muy pesada de llevar. En ocasiones el peso de estas cargas es tan agobiante que no permiten que las personas avancen y sigan adelante con sus vidas.

Estas cargas pesadas y agobiantes, no solo las llevan las personas inconversas, sino también un gran número de seguidores de Cristo alrededor del mundo. Estos creyentes todavía siguen atados a sus vidas pasadas, o a las situaciones presentes que no les permite encontrar la paz y descanso en los amorosos regazos de Dios Padre. Por eso, a todas las personas que andan llevando estas cargas pesadas, el apóstol Mateo les trasmite estas palabras de esperanza dadas por Jesucristo a todos sus seguidores, Jesús dijo: Vengan a mí todos ustedes que están cansados y agobiados, y yo les daré descanso. Mateo 11:28 NVI.

Las cargas de los hombres no solo es su angustia, dolor o amargura, sino también sus preocupaciones, ansiedades y afanes que tienen en la vida. Cuando se reúnen todos estos sentimientos, impiden que los hombres avancen con normalidad. En ocasiones, todos estos sentimientos negativos pueden llegar a causar una severa depresión en las personas, lo cual los puede llevar a tomar muy malas decisiones para sus vidas. Por eso antes de que estas cargas se acumulen, las personas pueden acudir confiadamente al Señor para dejar todas sus cargas en sus manos y encontrar descanso, no solo para su cuerpo físico, sino también para su alma. Justamente el Señor hace este llamado a todas las personas, para que puedan encontrar descanso en Él.

El descanso que Jesucristo promete es la paz con Dios y consigo mismo. Una vez que las personas encuentren paz con Dios, serán libres de todos los sentimientos que lo agobian. Sentimientos como la angustia, dolor, amargura, preocupaciones, ansiedades o afanes; ya no tendrán dominio de su ser, sino que estarán bajo el dominio del amor de Dios. Cuando el amor de Dios tiene total dominio de la vida del hombre, nada le podrá robar la paz y la tranquilidad de su alma. Por eso si en estos momentos tenemos alguna carga que nos esté robando la paz y tranquilidad, podemos acudir confiadamente al Señor para dejarle todo en sus manos.
Feb 12, 202403:54
CONFIEMOS SOLO EN DIOS

CONFIEMOS SOLO EN DIOS

CONFIEMOS SOLO EN DIOS

Al momento que sus vidas corren peligro, los hombres por lo general buscan lugares donde refugiarse para escapar del peligro, o acuden a otros hombres para que resguarden sus vidas, pues creen que bajo el cuidado y la protección de ellos van a estar seguros de toda asechanza enemiga. Posiblemente al acudir a otros hombres, podrán encontrar una protección, pero esa protección será momentánea, ya que los hombres, aunque tengan fuerza y poder, son seres mortales, razón por la cual tarde o temprano cederán a los ataques de otros hombres y serán destruidos conjuntamente con los que hayan buscado resguardo y protección en ellos. El profeta Isaías conociendo el poder limitado que tienen los hombres, exhortó a los líderes del pueblo hebreo y a sus compatriotas para que no buscaran resguardo y protección en los ejércitos humanos. El profeta les dijo: “Dejen de confiar en el hombre, que bien poco es lo que vale. La vida del hombre no es más que un suspiro.” Isaías 2:22 DHH.

Las invasiones y los ataques a otras naciones eran comunes en el periodo del Antiguo Testamento. En cierta ocasión, el pueblo hebreo al sentirse amenazado por los ejércitos invasores, inmediatamente buscó la ayuda del ejército egipcio para luchar en contra de sus agresores, en vez de buscar la ayuda del único Dios verdadero, mostrando de esa manera que confiaban más en la fuerza y el poder de otros hombres antes que confiar en el poder ilimitado de Dios. Los creyentes pese a que profesamos nuestra fe y confianza en Dios, no reflejamos esa confianza cuando nuestras vidas corren peligro, y al igual que el pueblo hebreo, en vez de acudir directamente a Dios, acudimos a otros hombres un poco más fuertes que nosotros para que resguarden nuestras vidas, mostrando de esa manera que confiamos más en hombres que pueden ser destruidos en un abrir y cerrar de ojos, antes que en el poder ilimitado de Dios.

La exhortación que hizo el profeta Isaías a su pueblo en el pasado, lo hace también a nosotros en el presente. El profeta nos exhorta a que dejemos de confiar en otros hombres similares a nosotros y empecemos a confiar plenamente en el poder ilimitado de Dios. Esta exhortación no significa que debemos dejar de confiar totalmente en los hombres, lo que significa es que no debemos confiar más en ellos que en Dios. La fuente de nuestra fe y confianza debe ser Jehová, ya que Él es el único que da la fuerza, inteligencia y sabiduría a los hombres. Gracias a Dios un médico puede ayudarnos a sanar alguna enfermedad, gracias a Dios un policía puede protegernos de la delincuencia, gracias a Dios los profesores nos pueden instruir en los conocimientos de las ciencias humanas, etc. Por todo esto y mucho más, toda nuestra fe y confianza deben estar puestas en Dios.
Feb 09, 202403:54