¿Pensaste alguna vez cómo te afectan los juicios ajenos? ¿Y tus juicios a los demás? En nuestra vida cotidiana, en las conversaciones que mantenemos con otras personas, estamos constantemente intercambiando juicios. Entregar y recibir juicios críticos no es fácil, requiere de estar preparadas. En general, si recibimos un juicio que consideramos “positivo”, nos sentimos bien, admiradas, halagadas, pero si recibimos uno que consideramos “negativo”, nos ponemos a la defensiva, o podemos sentirnos avergonzadas u ofendidas.
Lejos de callar un juicio crítico, lo importante es saber transmitirlo, porque al callar, el juicio no desaparece, sino que se manifiesta de otra forma, en general perjudicial para los vínculos y los equipos.
En este episodio, comparto algunas competencias que podes empezar a practicar para el intercambio de juicios que te van a servir tanto en el ámbito personal como en el laboral.