Ricardo Claure Peñaloza PODCAST

«A través de este mensaje podrás alimentarte y recibir más del Dios de la Biblia, de Jesús de Nazareth; desde su Trono, en su inmensa Majestad, semejante Dignidad a la cual el Señor nos permite entrar en su Santísimo Lugar.

Poder levantar las manos y que Él nos pueda levantar como a niños chiquitos, insignificantes ante su Grandeza; podernos sentar en su regazo y amarlo y adorarlo, y apoyar nuestras mejillas en su costado, mojando sus vestiduras con nuestras lágrimas de amor; amarlo y mirarlo a los ojos, expresándole amor y adoración. Estar de pie, frente a Él, y verlo en su verdadera Majestad, en su Dignidad, en su Inmensidad, y poder entender tantas cosas: cómo Él pudo obrar en lo oculto del vientre de nuestra madre y nos hizo, nos dio forma.

Es algo hermoso lo que hemos podido vivir, para luego continuar con este segundo mensaje, que se constituye en un complemento; un mensaje cantado que se dio como continuación de lo que vivimos en la noche de Shabath, en el culto a nuestro Dios de los embriones que miraron sus ojos.

Y no solamente eso, sino algo que está en mi interior y nunca podré olvidar en todos los días de mi vida: sentir que siendo una masa informe, experimentaba un movimiento como de gelatina; y poder entender, mientras predicaba, que era lo que yo sentía siendo embrión, siendo “golem”, mientras Él me hacía y me daba forma. Y al testificar esto, está en mi interior ese movimiento, siendo una masa informe, y lo tengo dentro de mí. Es Él quien en su eternidad me llevó en ese instante a aquellos momentos de gestación en el vientre de mi madre; a quien ayer, al anochecer, pude ir a ver, y tomar sus manos y besarla; besar su frente, besar sus sienes, y expresarle mi amor, mientras lloraba; porque podía entender que ahí estaba la tierra donde el Señor me había hecho, en lo profundo de ella, en su vientre. Y la amaba, y lloraba al verla ya con tantos años que el Señor le ha dado, más de 90 años, y aún el Señor le alarga el número de sus días sobre la tierra, como yo oraba y pedía al Señor desde 1996, en relación a mis padres: “Señor, completa el número de sus días, dales el número de sus días, largura de días”.

La Palabra nos dice que son 80 años en los más robustos, y el Señor le dio a mi papá 90 años y 1 mes; 10 años y 1 mes más, conforme a nuestra forma de medir el tiempo, el calendario gregoriano de uso internacional. Esto es hermoso.

Y cada uno, cada una, mientras puedan hacerlo, mientras tengan a sus papás vivos, y si es posible hoy mismo, vayan y exprésenles amor con todo su corazón. El primer Mandamiento con promesa es honrar al papá y a la mamá, para que en todo te vaya bien, y seas de larga vida sobre la tierra.

Y el término “honrar”, por supuesto que implica el amar; porque cuando se ama se honra. Y eso es lo que tú debes hacer: honrar a tu papá, a tu mamá. Tomar sus manos y darles amor besando sus manos, besando sus sienes, sus mejillas. Como también recuerdo que yo hacía ayer por la tarde, sentado al lado de mi mamá: besaba su frente. Mi mamá ya viejecita, y yo no podía impedir que salgan lágrimas de mis ojos, amándola a ella en la Presencia de mi Dios, de nuestro Dios, reconociendo que Él me había hecho en el vientre de ella, y sentir ese movimiento, que nunca lo olvidaré, como una masa, una gelatina; como cuando se sacude la gelatina. Que es lo que puedo de alguna manera utilizar para expresar lo que sentí, que yo era esa gelatina, esa masa informe. Y mientras yo la besaba a ella y lloraba, estaba eso en mi interior, y me quebrantaba comprender que había estado adentro de ella».

Pr. Ricardo Claure Peñaloza

PARA QUE SU IGLESIA SE PREPARE… PARA TESTIMONIO A TODAS LAS NACIONES

«A través de este mensaje podrás alimentarte y recibir más del Dios de la Biblia, de Jesús de Nazareth; desde su Trono, en su inmensa Majestad, semejante Dignidad a la cual el Señor nos permite entrar en su Santísimo Lugar.

Poder levantar las manos y que Él nos pueda levantar como a niños chiquitos, insignificantes ante su Grandeza; podernos sentar en su regazo y amarlo y adorarlo, y apoyar nuestras mejillas en su costado, mojando sus vestiduras con nuestras lágrimas de amor; amarlo y mirarlo a los ojos, expresándole amor y adoración. Estar de pie, frente a Él, y verlo en su verdadera Majestad, en su Dignidad, en su Inmensidad, y poder entender tantas cosas: cómo Él pudo obrar en lo oculto del vientre de nuestra madre y nos hizo, nos dio forma.

Es algo hermoso lo que hemos podido vivir, para luego continuar con este segundo mensaje, que se constituye en un complemento; un mensaje cantado que se dio como continuación de lo que vivimos en la noche de Shabath, en el culto a nuestro Dios de los embriones que miraron sus ojos.

Y no solamente eso, sino algo que está en mi interior y nunca podré olvidar en todos los días de mi vida: sentir que siendo una masa informe, experimentaba un movimiento como de gelatina; y poder entender, mientras predicaba, que era lo que yo sentía siendo embrión, siendo “golem”, mientras Él me hacía y me daba forma. Y al testificar esto, está en mi interior ese movimiento, siendo una masa informe, y lo tengo dentro de mí. Es Él quien en su eternidad me llevó en ese instante a aquellos momentos de gestación en el vientre de mi madre; a quien ayer, al anochecer, pude ir a ver, y tomar sus manos y besarla; besar su frente, besar sus sienes, y expresarle mi amor, mientras lloraba; porque podía entender que ahí estaba la tierra donde el Señor me había hecho, en lo profundo de ella, en su vientre. Y la amaba, y lloraba al verla ya con tantos años que el Señor le ha dado, más de 90 años, y aún el Señor le alarga el número de sus días sobre la tierra, como yo oraba y pedía al Señor desde 1996, en relación a mis padres: “Señor, completa el número de sus días, dales el número de sus días, largura de días”.

La Palabra nos dice que son 80 años en los más robustos, y el Señor le dio a mi papá 90 años y 1 mes; 10 años y 1 mes más, conforme a nuestra forma de medir el tiempo, el calendario gregoriano de uso internacional. Esto es hermoso.

Y cada uno, cada una, mientras puedan hacerlo, mientras tengan a sus papás vivos, y si es posible hoy mismo, vayan y exprésenles amor con todo su corazón. El primer Mandamiento con promesa es honrar al papá y a la mamá, para que en todo te vaya bien, y seas de larga vida sobre la tierra.

Y el término “honrar”, por supuesto que implica el amar; porque cuando se ama se honra. Y eso es lo que tú debes hacer: honrar a tu papá, a tu mamá. Tomar sus manos y darles amor besando sus manos, besando sus sienes, sus mejillas. Como también recuerdo que yo hacía ayer por la tarde, sentado al lado de mi mamá: besaba su frente. Mi mamá ya viejecita, y yo no podía impedir que salgan lágrimas de mis ojos, amándola a ella en la Presencia de mi Dios, de nuestro Dios, reconociendo que Él me había hecho en el vientre de ella, y sentir ese movimiento, que nunca lo olvidaré, como una masa, una gelatina; como cuando se sacude la gelatina. Que es lo que puedo de alguna manera utilizar para expresar lo que sentí, que yo era esa gelatina, esa masa informe. Y mientras yo la besaba a ella y lloraba, estaba eso en mi interior, y me quebrantaba comprender que había estado adentro de ella».

Pr. Ricardo Claure Peñaloza

PARA QUE SU IGLESIA SE PREPARE… PARA TESTIMONIO A TODAS LAS NACIONES

Escrito está: “Tus manos me hicieron y me formaron; Hazme entender, y aprenderé tus mandamientos”. ‭‭ (Salmos‬ ‭119:73)‬. “Porque Tú formaste mis entrañas; Tú me hiciste en el vientre de mi madre. Te alabaré; porque formidables, maravillosas son tus obras; Estoy maravillado, Y mi alma lo sabe muy bien. No fue encubierto de ti mi cuerpo, Bien que en oculto fui formado, Y entretejido en lo más profundo de la tierra. Mi embrión vieron tus ojos, Y en tu libro estaban escritas todas aquellas cosas Que fueron luego formadas, Sin faltar una de ellas. ¡Cuán preciosos me son, oh Dios, tus pensamientos! ¡Cuán grande es la suma de ellos!”. ‭ (Salmos‬ ‭139:13-17‬).‬‬

Y así se reveló en nuestro interior, en cada sencillo corazón; es nuestro Dios Hacedor de bebés siendo aún una masa informe (sin forma) —un “golem”, un embrión—, desde el mismo instante de la concepción. Un Formador de cada órgano, de cada color de piel, de ojos, de las facciones y de todo lo que tendrán los bebés al nacer; un Tejedor de cada tejido que hay en la carne, en los huesos. Es solamente Él —nuestro Verbo de Dios— quien lo puede hacer con el Poder de su Amor.

Y lo más hermoso fue sentir movimientos en mi cuerpo, en mi masa informe mientras Él me manipulaba, mirándome con sus ojos con fulgor de Dulzura y Amor, llevándome —en su eternidad— a esos instantes en lo oculto del vientre de mi madre. Aún siento en mi propio ser, en mi corazón del alma, teniendo la edad que tengo, la sensación de movimiento en mi masa informe, en esos segundos, en el tiempo en que me permitió sentir esto, haciéndome entender, con completa seguridad, que ese movimiento se daba porque Él me estaba haciendo, formando con sus manos, mientras Él me miraba con sus ojos de llama de Fuego de Amor, dulce Amor, dulce Ternura, contenida en un fulgurar, en un resplandor.

Así Él nos entretejió en lo oculto del vientre de nuestra madre.

Se reveló además como un Dios Diseñador de todo nuestro ser, en espíritu, alma y cuerpo. Y todo este diseño lo escribió previamente en un libro; ¡es un Dios Escritor! Un Dios Escritor del Diseño del hombre, como es, conforme a su imagen y semejanza. “Entonces dijo Dios: Hagamos al hombre a nuestra imagen, conforme a nuestra semejanza”. ‭‭ (Génesis‬ ‭1:26‬ a, b).

Él escribió un libro de Anatomía Humana —el más complejo y completo que debe existir—. Los libros de Anatomía Humana escritos por el hombre son figura y sombra de su Libro más completo, escrito sentado en su Trono. Libro, en el que además está diseñada nuestra alma y nuestro espíritu, que constituyen nuestras regiones celestes, nuestras regiones que no se ven, que son intangibles, que nos hacen parte de su eternidad, al tener cosas eternas: el alma, el corazón del alma, la mente del alma, las emociones del alma, la voluntad del alma, el espíritu, con todas sus funciones: adoración, conciencia, discernimiento espiritual, oración, canción, etc. “... Pues las cosas que se ven son temporales, pero las que no se ven son eternas”. (‭‭2º Corintios‬ ‭4:18‬b)

Él ha puesto eternidad en nuestro corazón del alma: “Yo he visto el trabajo que Dios ha dado a los hijos de los hombres para que se ocupen en él. Todo lo hizo hermoso en su tiempo; y ha puesto eternidad en el corazón de ellos, sin que alcance el hombre a entender la obra que ha hecho Dios desde el principio hasta el fin”. (‭‭Eclesiastés‬ ‭3:10-11)‬‬

En el culto de Shabath pudimos conocer un poco más a nuestro Dios. Y esto como resultado del Nuevo Pacto sellado con su sangre en la cruz. “Éste es el pacto que haré con ellos después de aquellos días, dice el Señor: Pondré mis leyes en sus corazones, Y en sus mentes las escribiré”. (‭‭Hebreos‬ ‭10:16)‬‬.

Que nuestro Dios de los embriones bendiga mucho sus vidas.

Pr. Ricardo Claure Peñaloza, 4 de agosto de 2018, 07:58 a. m. - BOT (Bolivian Time).

PARA QUE SU IGLESIA SE PREPARE... PARA TESTIMONIO A LAS NACIONES

“Este mensaje es para ti, que estás en medio de la aflicción, en medio del dolor; sea en tu alma, en tu corazón o en tu cuerpo. Es para ti, que sientes vacío en tu vida y falta de paz. Es para ti, que al despertar cada mañana, sientes soledad, más vacío y sequedad.

Y es en medio de tu dificultad, en medio de tu soledad, mientras avanzas por ese camino pedregoso, por ese camino sinuoso hacia la Patria Celestial, viviendo y experimentando circunstancias adversas y problemas, que debes buscar la Presencia de tu Padre Celestial, de tu Padre Bueno, de tu Dios Inmensamente Grande; porque en su Inmensidad Él no te dejará solo.

Tu confianza debe estar puesta en Él; y debes buscar su rostro día a día, adorándole y expresándole tu amor en medio de tu aflicción.

Es necesario que en medio de ese desconsuelo, sintiendo sed en tu interior, busques la Presencia del Verbo de Dios, de tu Creador, de Jesús de Nazareth, entres a su Santísimo Lugar, hables con Él, y empieces a beber y beber de esas Aguas de Vida que corren de debajo de su Trono, que salen de Él, del Cordero Inmolado. Siendo barro en sus manos, empápate de Él, de un Dios lleno de Fidelidad, un Dios Alfarero, un Dios que te dará de beber Aguas llenas de Vida. Y así te ha de perfeccionar, y todo tu ser: espíritu, alma y cuerpo llegará a la perfección del hombre celestial. Ahora nosotros estamos en lo terrenal, pero seremos revestidos de la inmortalidad, de lo perfecto. Y por eso es necesario buscarlo a Él en todo momento y para siempre, y estar en la Presencia de nuestro Dios, teniendo su Palabra en nuestra vida, en los cielos, de los cuales somos ciudadanos por la fe.

Y es donde buscamos a nuestro Dios, en los cielos, en Sion, dejando lo terrenal y buscando lo celestial, para poder salir de la aflicción, para poder salir de las circunstancias adversas; inclusive cuando nos están rodeando para destruirnos, debemos permanecer firmes, yendo adelante, considerando los testimonios de Él revelados en nuestras vidas, recordando que somos testigos de Él.

La Palabra nos anuncia que más adelante vendrá un tiempo de aflicción, de llanto, de lamento, y el mundo se alegrará; pero aunque nosotros estemos tristes, esa tristeza se convertirá en Gozo. Serán los últimos dolores de parto; porque cuando hayamos sido perfeccionados para llegar a la plenitud de Jesús en nuestras vidas, ya no nos acordaremos de la angustia, por el Gozo que tendremos de haber sido perfeccionados y revestidos de su Gloria en cuerpo inmortal.

Y esa debe ser nuestra esperanza: que a pesar de la tristeza y la aflicción, vamos a volver a ver a nuestro Creador, a nuestro Redentor. Lo que nos impide es nuestra carne y sangre; porque carne y sangre no puede heredar el Reino de Dios. Por eso, estando nosotros en este estado terrenal no podemos estar en el Reino de Dios en plenitud, en perfección; pero sabemos que vamos a ser transformados, y esto terrenal ha de ser transformado en celestial; y en cuerpo celestial lleno de la Gloria del Dios de Israel, vamos a volver a ver a nuestro Dios, y seremos revestidos de ese Amor infinito que sobrepasa todo entendimiento.

No podemos despreciar algo tan grande.

No permitas que la aflicción te sumerja en depresión, en soledad, en tristeza, en desolación; sube a la Presencia de nuestro Dios, Él te dará de beber de su Espíritu Santo, y te levantarás, en el nombre de Jesús de Nazareth”.

Pr. Ricardo Claure Peñaloza

PARA QUE SU IGLESIA SE PREPARE… PARA TESTIMONIO A LAS NACIONES

“Este mensaje es para ti, que estás en medio de la aflicción, en medio del dolor; sea en tu alma, en tu corazón o en tu cuerpo. Es para ti, que sientes vacío en tu vida y falta de paz. Es para ti, que al despertar cada mañana, sientes soledad, más vacío y sequedad.

Y es en medio de tu dificultad, en medio de tu soledad, mientras avanzas por ese camino pedregoso, por ese camino sinuoso hacia la Patria Celestial, viviendo y experimentando circunstancias adversas y problemas, que debes buscar la Presencia de tu Padre Celestial, de tu Padre Bueno, de tu Dios Inmensamente Grande; porque en su Inmensidad Él no te dejará solo.

Tu confianza debe estar puesta en Él; y debes buscar su rostro día a día, adorándole y expresándole tu amor en medio de tu aflicción.

Es necesario que en medio de ese desconsuelo, sintiendo sed en tu interior, busques la Presencia del Verbo de Dios, de tu Creador, de Jesús de Nazareth, entres a su Santísimo Lugar, hables con Él, y empieces a beber y beber de esas Aguas de Vida que corren de debajo de su Trono, que salen de Él, del Cordero Inmolado. Siendo barro en sus manos, empápate de Él, de un Dios lleno de Fidelidad, un Dios Alfarero, un Dios que te dará de beber Aguas llenas de Vida. Y así te ha de perfeccionar, y todo tu ser: espíritu, alma y cuerpo llegará a la perfección del hombre celestial. Ahora nosotros estamos en lo terrenal, pero seremos revestidos de la inmortalidad, de lo perfecto. Y por eso es necesario buscarlo a Él en todo momento y para siempre, y estar en la Presencia de nuestro Dios, teniendo su Palabra en nuestra vida, en los cielos, de los cuales somos ciudadanos por la fe.

Y es donde buscamos a nuestro Dios, en los cielos, en Sion, dejando lo terrenal y buscando lo celestial, para poder salir de la aflicción, para poder salir de las circunstancias adversas; inclusive cuando nos están rodeando para destruirnos, debemos permanecer firmes, yendo adelante, considerando los testimonios de Él revelados en nuestras vidas, recordando que somos testigos de Él.

La Palabra nos anuncia que más adelante vendrá un tiempo de aflicción, de llanto, de lamento, y el mundo se alegrará; pero aunque nosotros estemos tristes, esa tristeza se convertirá en Gozo. Serán los últimos dolores de parto; porque cuando hayamos sido perfeccionados para llegar a la plenitud de Jesús en nuestras vidas, ya no nos acordaremos de la angustia, por el Gozo que tendremos de haber sido perfeccionados y revestidos de su Gloria en cuerpo inmortal.

Y esa debe ser nuestra esperanza: que a pesar de la tristeza y la aflicción, vamos a volver a ver a nuestro Creador, a nuestro Redentor. Lo que nos impide es nuestra carne y sangre; porque carne y sangre no puede heredar el Reino de Dios. Por eso, estando nosotros en este estado terrenal no podemos estar en el Reino de Dios en plenitud, en perfección; pero sabemos que vamos a ser transformados, y esto terrenal ha de ser transformado en celestial; y en cuerpo celestial lleno de la Gloria del Dios de Israel, vamos a volver a ver a nuestro Dios, y seremos revestidos de ese Amor infinito que sobrepasa todo entendimiento.

No podemos despreciar algo tan grande.

No permitas que la aflicción te sumerja en depresión, en soledad, en tristeza, en desolación; sube a la Presencia de nuestro Dios, Él te dará de beber de su Espíritu Santo, y te levantarás, en el nombre de Jesús de Nazareth”.

Pr. Ricardo Claure Peñaloza

PARA QUE SU IGLESIA SE PREPARE… PARA TESTIMONIO A LAS NACIONES

“Este es un mensaje dirigido a la iglesia del Señor Jesús, a fin de que alcance mayor profundidad en su vida espiritual.

A través de esta Palabra, el Señor, el Dios de Israel, traerá Luz a tu vida, sobre todo si tu alma está abatida por enfermedades o por problemas en tu hogar: con el esposo, con la esposa o con los hijos, o por situaciones adversas y difíciles que inclusive no datan de ahora, sino de hace mucho tiempo atrás, y que no pudiste superar ni vencer.

Si tu alma está decaída por la tristeza que sientes, por la desesperanza y desilusión que hay en tu vida, y te sientes abatido hasta el polvo, sin poderte levantar, sin poder dar pasos hacia la Patria Celestial; te sientes en el piso, tumbado, sin fuerzas para seguir adelante, esta Palabra es para ti.

Si te sucede que quieres evitar hasta pensar, pero vienen a oleadas pensamientos y recuerdos que provocan abatimiento, tristeza, depresión, soledad, desesperación, amargura, desilusión y ansiedad.

Si tú descubres que estás en el polvo, que hay carne que no has podido dar muerte en la cruz del Calvario, y esa es la razón por la cual tú sientes todo ese abatimiento y dolor; el Dios de Israel quiere que se sepas que hay esperanza para ti, Palabra de Vida que te levantará.

¿Te ocurrió en tu infancia?, ¿en tu niñez?, ¿en tu adolescencia? Quizá algo grave que te pasó marcó tu vida, y determinó un cambio en tu alma y en tu carácter, y por ende trajo abatimiento, aflicción, tormenta, llanto y gemidos de dolor en tu soledad. Mas el Señor quiere librarte de todo eso; Él es tu Libertador.

A través de este Mensaje, el Señor Jesús traerá Vida a tu alma. Tú necesitas de esta Palabra para recibir Fuerza y poder escudriñar tu corazón.

El Dios Altísimo quiere que seas un libro viviente y que esta Palabra se haga Vida en tu vida, y que ella vaya guiándote y mostrándote el camino por el cual debes andar.

Ha llegado el tiempo para ti; debes levantarte y sacudirte el polvo. Ese polvo se constituye en toda la carne espiritual que trajo mortandad a tu alma, que debes entregar en confesión y con corazón sincero al Señor Jesús; y debes vencer con el Poder de la Fuerza del Señor a toda hueste de maldad, a toda fuerza espiritual que todo este tiempo ha herido tu corazón. El Dios Altísimo te vivificará, te libertará y te sustentará. Él te dará el Poder de su Fuerza para que te pongas de pie y avances hacia la meta, hacia la Patria Celestial. Es un Dios Real, un Dios Vivo que está presto para socorrerte.

Corre con Él y en su Presencia a la meta final, estar en la Jerusalem Celestial”.

Pr. Ricardo Claure Peñaloza

PARA QUE SU IGLESIA SE PREPARE… PARA TESTIMONIO A LAS NACIONES

“Este es un mensaje dirigido a la iglesia del Señor Jesús, a fin de que alcance mayor profundidad en su vida espiritual.

A través de esta Palabra, el Señor, el Dios de Israel, traerá Luz a tu vida, sobre todo si tu alma está abatida por enfermedades o por problemas en tu hogar: con el esposo, con la esposa o con los hijos, o por situaciones adversas y difíciles que inclusive no datan de ahora, sino de hace mucho tiempo atrás, y que no pudiste superar ni vencer.

Si tu alma está decaída por la tristeza que sientes, por la desesperanza y desilusión que hay en tu vida, y te sientes abatido hasta el polvo, sin poderte levantar, sin poder dar pasos hacia la Patria Celestial; te sientes en el piso, tumbado, sin fuerzas para seguir adelante, esta Palabra es para ti.

Si te sucede que quieres evitar hasta pensar, pero vienen a oleadas pensamientos y recuerdos que provocan abatimiento, tristeza, depresión, soledad, desesperación, amargura, desilusión y ansiedad.

Si tú descubres que estás en el polvo, que hay carne que no has podido dar muerte en la cruz del Calvario, y esa es la razón por la cual tú sientes todo ese abatimiento y dolor; el Dios de Israel quiere que se sepas que hay esperanza para ti, Palabra de Vida que te levantará.

¿Te ocurrió en tu infancia?, ¿en tu niñez?, ¿en tu adolescencia? Quizá algo grave que te pasó marcó tu vida, y determinó un cambio en tu alma y en tu carácter, y por ende trajo abatimiento, aflicción, tormenta, llanto y gemidos de dolor en tu soledad. Mas el Señor quiere librarte de todo eso; Él es tu Libertador.

A través de este Mensaje, el Señor Jesús traerá Vida a tu alma. Tú necesitas de esta Palabra para recibir Fuerza y poder escudriñar tu corazón.

El Dios Altísimo quiere que seas un libro viviente y que esta Palabra se haga Vida en tu vida, y que ella vaya guiándote y mostrándote el camino por el cual debes andar.

Ha llegado el tiempo para ti; debes levantarte y sacudirte el polvo. Ese polvo se constituye en toda la carne espiritual que trajo mortandad a tu alma, que debes entregar en confesión y con corazón sincero al Señor Jesús; y debes vencer con el Poder de la Fuerza del Señor a toda hueste de maldad, a toda fuerza espiritual que todo este tiempo ha herido tu corazón. El Dios Altísimo te vivificará, te libertará y te sustentará. Él te dará el Poder de su Fuerza para que te pongas de pie y avances hacia la meta, hacia la Patria Celestial. Es un Dios Real, un Dios Vivo que está presto para socorrerte.

Corre con Él y en su Presencia a la meta final, estar en la Jerusalem Celestial”.

Pr. Ricardo Claure Peñaloza

PARA QUE SU IGLESIA SE PREPARE… PARA TESTIMONIO A LAS NACIONES

Un día memorable en el que llenos del Poder de la Fuerza del Señor Jesús pudimos hollar a toda fuerza del enemigo; habiéndolos tomado por sorpresa, eran hollados, retrocedían y huían. Fue un ejercicio militar previo a lo que viviremos con nuestro Dulce Jesús de Belén, en Edom y en el Armagedón.

“La Palabra que recordamos hoy, y que hoy se ha hecho más viva en nuestras vidas: Salmo 18, verso 31 al 50. Porque esto ahora está revelado con mayor profundidad y mayor fuerza, ya que hoy Él nos ha engrandecido. ¿Cuántos se sienten poderosos?, ¿cuántos se sienten fortalecidos en el Poder de su Fuerza?, ¿cuántos ya sienten tener ese cuerpo inmortal?

Sabemos que Él ha sido hecho tanto superior a los ángeles; si los ángeles son poderosos en fuerza y en potencia, y nuestro Amado Jesús es hecho superior a los ángeles en cuerpo Glorificado, y la Escritura nos dice que tendremos un cuerpo semejante al de la Gloria suya, ¿se imaginan lo que seremos? Es su Benignidad que nos ha engrandecido por la obra de la cruz.

¿Quién es como Él? No hay otro. Él es el único Dios Verdadero, el único Dios Todopoderoso, Él es nuestra Roca sobre la cual estamos parados; y así vengan tempestades, venga lo que venga permanecemos firmes, sustentados por Él; porque sabemos que es un Dios Buenito que nos sustenta en medio de guerra y circunstancias adversas por el Poder de su Fuerza.

Él es Jesús de Nazareth, Dios mismo manifestado en carne, en cuerpo mortal. Siendo Dios se hizo hombre, sujeto a peligro de los malignos, de hombres perversos que constantemente querían matarlo, los religiosos de su tiempo.

Mas Él nos promete en su Palabra poder llegar a ser como Él. Por eso tenemos que buscar la perfección para poder lograr ese cuerpo inmortal, tenemos que buscar gloria, honra e inmortalidad.

Este fue un día de adiestramiento, de entrenamiento militar para todos aquellos que creen que son parte del ejército del Dios Altísimo.

El diablo está asechando y hoy de pronto ha huido; no se esperaba un ataque de esta manera, un ataque militar sorpresa en que todo el ejército revestido de Poder ¡HA ESTADO HOLLANDO A LAS FUERZAS DEL MAL!, ¡RECIBIENDO ASÍ ADIESTRAMIENTO, ENTRENAMIENTO MILITAR! ¡Y HOY EL SALMO 18 SE CUMPLIÓ TAMBIÉN DE ESTA FORMA!, para darnos el entendimiento de lo que seremos. Porque nuestros enemigos tienen que estar humillados debajo de nuestros pies. Nuestros enemigos nos tienen que dar la espalda, corriendo, escapándose, mientras nosotros avanzamos y pisoteamos. ¿Se imaginan lo que seremos? Aunque puedan estar corriendo, por detrás los alcanzaremos y los pisaremos. Semejante Poder, tanto superior a los ángeles. Siendo parte del cuerpo de Cristo, esto es lo que seremos”.

Pr. Ricardo Claure Peñaloza

PARA QUE SU IGLESIA SE PREPARE… PARA TESTIMONIO A LAS NACIONES

“A través de esta Palabra te será revelado el Poder de la Fuerza de Jesús de Nazareth en su Santidad.

Es por eso de que debemos fortalecernos en la Santidad de Él. Ser santos en toda nuestra manera de vivir, como Él nos ha ordenado; porque solamente en la santidad tendremos el Poder y la Fuerza para vencer a Satán. Y vamos preparándonos cada día más en el campo celestial para poder ser parte de aquel lagar que nosotros vamos a pisar ¡con la Fuerza de su Poder!, la misma con la que venció a Satán y le pisó la cabeza.

Yo daría mi vida para poder ver esa lucha, y poder ver al dragón como una serpiente miserable, pisoteado; con toda la apariencia que él tiene de querubín, pisoteado; y su cabeza bajo el pie de nuestro Señor, y ese pie con una musculatura que es mayor a la de los ángeles. Debió ser algo maravilloso.

El ángel que el Señor me permitió ver en visión, hace algunos años atrás, tenía semejante musculatura; vestía una túnica blanca, y estando enfrente de mí, al efectuar un movimiento mostró su musculatura impresionante: su cuádriceps era como soga. Fue algo maravilloso. Así el Señor me hacía entender que yo estaba protegido por esos ángeles.

Pero hay alguien que ha sido hecho superior a los ángeles, y es a Él a quien el Dios Vivo está revelando a través de este mensaje, es Jesús de Nazareth quien es superior a los ángeles, y al ser superior a los ángeles, por supuesto que es también superior a los ángeles caídos. ¡POR ESO DEMONIOS CREEN Y TIEMBLAN!, ¡porque el Señor Jesús, al vencerlos muriendo en la cruz, bajó, y al diablo venció a la vista de los ángeles caídos, y la cabeza le pisó!

¡Semejante musculatura que debe tener nuestro Rey Jesús!, ¡musculatura colosal, superior a la de los ángeles! Y con ese pie le pisó la cabeza, mientras debajo de Él el diablo no podía moverse ante semejante Poder. Y como vemos que sucede cuando los demonios se ven vencidos por el Poder y la Fuerza de nuestro Dios en momentos de Liberación, claman, lloran, gimen; el diablo estaba llorando, estaba gimiendo, y sus demonios viendo a su rey derrotado, ¡totalmente abatido!, ¡totalmente vencido!, no sabían qué hacer ante nuestra Majestad, ante nuestro Dios de Verdad hecho superior a los ángeles.

Es hermoso. ¡Semejante Poder que tiene nuestro Dios! Por eso pudo más que los ángeles caídos, pudo más que Satán, y la cabeza le pisó. Semejante musculatura. Daría mi vida por ver esa lucha cuerpo a cuerpo, y a nuestro Amado Jesús Vencedor, ¡Vencedor! ¡Y al lado de Él, nosotros somos más que vencedores, porque Él venció en la cruz con el Poder de su Fuerza! Por eso fue constituido Heredero de todo.

Dios mismo manifestado en carne, siendo Jesús de Nazareth el resplandor de su Gloria, la imagen misma de su sustancia que llena todo el universo con su Presencia, pero revelada y mostrada a los hombres a través de Jesús de Belén, de Nazareth, Jesús Vencedor de Satán, Jesús, quien sustenta todas las cosas con la Palabra de su Poder, porque Él es la Palabra, ¡ÉL ES EL VERBO!, ¡EL VERBO DE PODER!, ¡EL VERBO DE PODER!; ¡VENCIÓ A SATÁN!, ¡LA CABEZA LE PISÓ!

¿Y cómo ha conseguido semejante Poder, semejante Fuerza en Él? Él nos purificó de nuestros pecados en la cruz del Calvario; ¡allí tuvo la victoria sobre Satán! Y es más, dice la Escritura que habiendo logrado la purificación de nuestros pecados por medio de sí mismo, se sentó a la diestra de la Majestad en las alturas celestiales, hecho tanto superior a los ángeles. Ese es el Dios que tenemos, es Jesús de Nazareth.

Y Él no quiere que te pierdas, Él quiere que cada día dejes más lo terrenal para que seas un poquito más lleno del hombre celestial, cada día estés más allí que aquí”.

Pr. Ricardo Claure Peñaloza

PARA QUE SU IGLESIA SE PREPARE… PARA TESTIMONIO A LAS NACIONES

“A través de esta Palabra te será revelado el Poder de la Fuerza de Jesús de Nazareth en su Santidad.

Es por eso de que debemos fortalecernos en la Santidad de Él. Ser santos en toda nuestra manera de vivir, como Él nos ha ordenado; porque solamente en la santidad tendremos el Poder y la Fuerza para vencer a Satán. Y vamos preparándonos cada día más en el campo celestial para poder ser parte de aquel lagar que nosotros vamos a pisar ¡con la Fuerza de su Poder!, la misma con la que venció a Satán y le pisó la cabeza.

Yo daría mi vida para poder ver esa lucha, y poder ver al dragón como una serpiente miserable, pisoteado; con toda la apariencia que él tiene de querubín, pisoteado; y su cabeza bajo el pie de nuestro Señor, y ese pie con una musculatura que es mayor a la de los ángeles. Debió ser algo maravilloso.

El ángel que el Señor me permitió ver en visión, hace algunos años atrás, tenía semejante musculatura; vestía una túnica blanca, y estando enfrente de mí, al efectuar un movimiento mostró su musculatura impresionante: su cuádriceps era como soga. Fue algo maravilloso. Así el Señor me hacía entender que yo estaba protegido por esos ángeles.

Pero hay alguien que ha sido hecho superior a los ángeles, y es a Él a quien el Dios Vivo está revelando a través de este mensaje, es Jesús de Nazareth quien es superior a los ángeles, y al ser superior a los ángeles, por supuesto que es también superior a los ángeles caídos. ¡POR ESO DEMONIOS CREEN Y TIEMBLAN!, ¡porque el Señor Jesús, al vencerlos muriendo en la cruz, bajó, y al diablo venció a la vista de los ángeles caídos, y la cabeza le pisó!

¡Semejante musculatura que debe tener nuestro Rey Jesús!, ¡musculatura colosal, superior a la de los ángeles! Y con ese pie le pisó la cabeza, mientras debajo de Él el diablo no podía moverse ante semejante Poder. Y como vemos que sucede cuando los demonios se ven vencidos por el Poder y la Fuerza de nuestro Dios en momentos de Liberación, claman, lloran, gimen; el diablo estaba llorando, estaba gimiendo, y sus demonios viendo a su rey derrotado, ¡totalmente abatido!, ¡totalmente vencido!, no sabían qué hacer ante nuestra Majestad, ante nuestro Dios de Verdad hecho superior a los ángeles.

Es hermoso. ¡Semejante Poder que tiene nuestro Dios! Por eso pudo más que los ángeles caídos, pudo más que Satán, y la cabeza le pisó. Semejante musculatura. Daría mi vida por ver esa lucha cuerpo a cuerpo, y a nuestro Amado Jesús Vencedor, ¡Vencedor! ¡Y al lado de Él, nosotros somos más que vencedores, porque Él venció en la cruz con el Poder de su Fuerza! Por eso fue constituido Heredero de todo.

Dios mismo manifestado en carne, siendo Jesús de Nazareth el resplandor de su Gloria, la imagen misma de su sustancia que llena todo el universo con su Presencia, pero revelada y mostrada a los hombres a través de Jesús de Belén, de Nazareth, Jesús Vencedor de Satán, Jesús, quien sustenta todas las cosas con la Palabra de su Poder, porque Él es la Palabra, ¡ÉL ES EL VERBO!, ¡EL VERBO DE PODER!, ¡EL VERBO DE PODER!; ¡VENCIÓ A SATÁN!, ¡LA CABEZA LE PISÓ!

¿Y cómo ha conseguido semejante Poder, semejante Fuerza en Él? Él nos purificó de nuestros pecados en la cruz del Calvario; ¡allí tuvo la victoria sobre Satán! Y es más, dice la Escritura que habiendo logrado la purificación de nuestros pecados por medio de sí mismo, se sentó a la diestra de la Majestad en las alturas celestiales, hecho tanto superior a los ángeles. Ese es el Dios que tenemos, es Jesús de Nazareth.

Y Él no quiere que te pierdas, Él quiere que cada día dejes más lo terrenal para que seas un poquito más lleno del hombre celestial, cada día estés más allí que aquí”.

Pr. Ricardo Claure Peñaloza

PARA QUE SU IGLESIA SE PREPARE… PARA TESTIMONIO A LAS NACIONES

“Esta Palabra está dirigida a aquellas personas que no han aceptado verdaderamente a Jesús como Señor y Salvador de sus vidas.

Este mensaje está dirigido a quienes están perdidos en sus pecados y aún no han conocido a Jesús de Nazareth, nuestro Rey.

Hoy te vengo a presentar a un Dios Verdadero, a un Dios Real al cual tú le puedes hablar a través de esta misma Palabra de Amor.

Él está dispuesto a enseñarte, a mostrarte el camino de la Salvación; y ese Camino tiene un Nombre, es Jesús de Nazareth. Es Aquel que siendo Dios vino para morir por nuestros pecados en la cruz del Calvario. Hubiera podido morir de diferente manera, pero no, Él tenía que morir de esa forma, porque es la única en que se podía destruir la fuente del pecado: el corazón del hombre.

Él vino en semejanza de carne de pecado, a causa del pecado, para condenar al pecado en la carne, crucificando la carne. No escatimó en ser Dios, sino que vino en forma de hombre mortal, nacido de una mujer virgen por concepción del Espíritu Santo, y se mantuvo durante treinta y tres años y medio esperando, anhelando con todo su Ser consumar su obra de liberación, su obra de redención.

Y mientras estaba ahí con la carne crucificada Él estaba sufriendo por nuestros pecados. Toda la carga del pecado de la humanidad caía sobre Él. Mientras Él pasaba el tiempo en la cruz, su corazón se iba llenando de sangre; cada vez tenía menos fuerza para poder bombear sangre al resto del cuerpo, experimentando terribles calambres en los brazos, en las piernas. Y mientras sufría esos terribles dolores, nos amaba, lo hacía por Amor, Amor, infinito Amor. No quería que ninguno se pierda, quería que tengamos Vida Eterna aquellos que creyésemos en Él.

Y mientras su corazón se iba llenando de sangre, inflado como un globo, no podía respirar; tenía que soportar el dolor de pararse sobre el clavo, ahí en el lugar donde Satanás, la serpiente antigua, le había herido, herido en el calcañar. Y soportando el dolor entraba una bocanada de aire, y el corazón tenía menos fuerza para bombear sangre al resto del cuerpo, provocándole terribles calambres. Y mientras sucedía esto, Él te amaba, Él nos amaba.

Hasta que llegó el momento de su muerte; ese corazón ya no podía bombear sangre, y se rompió. Y de esa manera consumó el Cordero de Dios —Jesús de Nazareth— el juicio al pecado, destruyendo la fuente del pecado: el corazón del alma del hombre. Y es de esa manera que nos dio la victoria sobre el pecado. Pagó el precio para redimirnos y comprarnos de la esclavitud del esclavizador, Satanás y sus fuerzas espirituales de las tinieblas. Y de esa manera nos trajo libertad. El velo del Templo, que estaba formado por Lugar Santísimo, Lugar Santo y Atrio Exterior, que separaba del Lugar Santo del Lugar Santísimo se rasgó el momento en que el Señor Jesús murió, para poder entrar directamente al Santísimo Lugar, a la misma Presencia de Dios. Se había consumado la redención, el camino directo al Padre.

Lo que tú necesitas es tener más Conocimiento del Dios Vivo; un Dios Perfecto, lleno de Amor, que quiere llenar tu vida con su Presencia, y que tú lo tengas como el único Camino de la Salvación, a quien debes pedir que te dé toda la Fuerza y el Poder para poder guardar su Ley. Para que el Espíritu de Dios obre en ti, guiándote, para que te apartes del reino de las tinieblas, oscuridad y la esclavitud del pecado, y seas parte del reino de la Luz.

Y eso es lo que debe haber en ti: anhelo de conocer más de Él, de conocer más de su Palabra, de sus mandamientos, de lo que Él quiere de tu vida. Y esto solamente lo vas a poder lograr, si tú mueres en la cruz del Calvario cada día, si tú tienes el corazón dispuesto para estar sentado juntamente con Cristo en los lugares celestiales. Solamente así su Gloria iluminará tu interior, y estarás siendo preparado para poder estar en la Jerusalem celestial, habitando en ella en cuerpo inmortal, en cuerpo lleno de Gloria”.

Pr. Ricardo Claure Peñaloza

“Este mensaje revela a un Dios Buenito, al cual podemos acudir y sabemos que nos escuchará.

Esta Palabra es de edificación, exhortación y consuelo para tu vida.

Si recibes esta Palabra en tu corazón, tendrás Vida, Vida del Espíritu, Vida en abundancia; podrás ser más sensible a la voz del Dios Altísimo y recibirás tantos detalles que Él tiene reservados para ti y quiere mostrarte. Mas es necesario que tú busques el Conocimiento de Él; es tu Dios Buenito que sólo quiere hacerte Bien. Te ha comprado por precio en la cruz, y quiere que vivas, que tengas Vida por medio de la Biblia, de la Palabra, que la Biblia se haga realidad en tu vida. Que tú como siervo (a) tengas Vida, que vivas por el Espíritu, que hagas morir todo aquello que es de la carne, que es del primer hombre caído, de Adán; para que tengas Vida y seas parte del postrer Adán; ya no un alma viviente, sino un espíritu vivificante.

Teniendo la Vida del Espíritu, y en la medida que vayas haciendo morir las obras de la carne por el Espíritu, vas a tener Vida, vas a poder amar su Palabra, guardar su Palabra y atesorarla como lo más preciado, buscando llenarte de ella.

Por eso, aquellos que viven, buscan guardar su Palabra como el tesoro más preciado. Y es eso lo que ocurre, los detalles que hemos recibido de Él, del Verbo, la Palabra —porque Cristo es la Palabra, el Verbo es la Palabra, Jesús es la Palabra— han sido revelados en nuestro corazón con tanto Amor, que están guardados, y va a ser muy difícil que olvidemos.

No es lo mismo leer la Biblia y aprenderla de memoria. Es hermoso que de pronto la Palabra se haga Vida en nuestras vidas.

Sabemos por la Palabra que Jesús es Dios Bueno, que es Dios Cantor; pero esta vez ha sido revelado en nuestro interior de una manera hermosa, Y está guardada esa Palabra, esa Verdad en nuestro corazón. Solamente aquellos que viven por el Espíritu y buscan, pueden degustar de la Presencia de nuestro Dios Buenito.

Nuestros ojos han sido abiertos, hemos podido mirar detalles que antes no hubiéramos podido ni siquiera imaginar. La realidad que Dios canta, y trayendo a mi memoria aquella voz hermosa en la calle Salta, en Argentina, en marzo de 1991, donde el Señor con su timbre de voz me habló con voz audible, y me ordenó que volviera a Bolivia, y que ahí se me diría lo que tendría que hacer.

Quedé pasmado de tanto Amor en ese timbre de voz. Me sentía un pecador, pero con tanto Amor Él cubría mis pecados y no me reprochaba, solamente sentía su Amor, fue algo hermoso. Y hoy entender —porque mis ojos fueron abiertos al mundo espiritual—, que escucharlo a Él cantar con ese mismo timbre de voz debe ser algo hermoso, magnánimo, espectacular, magnífico, extraordinario, fuera de todo lo que pudiéramos siquiera imaginar; millones de millones de ángeles haciéndole el coro”.

Pr. Ricardo Claure Peñaloza

PARA QUE SU IGLESIA SE PREPARE… PARA TESTIMONIO A LAS NACIONES

“Este mensaje revela a un Dios Buenito, al cual podemos acudir y sabemos que nos escuchará.

Esta Palabra es de edificación, exhortación y consuelo para tu vida.

Si recibes esta Palabra en tu corazón, tendrás Vida, Vida del Espíritu, Vida en abundancia; podrás ser más sensible a la voz del Dios Altísimo y recibirás tantos detalles que Él tiene reservados para ti y quiere mostrarte. Mas es necesario que tú busques el Conocimiento de Él; es tu Dios Buenito que sólo quiere hacerte Bien. Te ha comprado por precio en la cruz, y quiere que vivas, que tengas Vida por medio de la Biblia, de la Palabra, que la Biblia se haga realidad en tu vida. Que tú como siervo (a) tengas Vida, que vivas por el Espíritu, que hagas morir todo aquello que es de la carne, que es del primer hombre caído, de Adán; para que tengas Vida y seas parte del postrer Adán; ya no un alma viviente, sino un espíritu vivificante.

Teniendo la Vida del Espíritu, y en la medida que vayas haciendo morir las obras de la carne por el Espíritu, vas a tener Vida, vas a poder amar su Palabra, guardar su Palabra y atesorarla como lo más preciado, buscando llenarte de ella.

Por eso, aquellos que viven, buscan guardar su Palabra como el tesoro más preciado. Y es eso lo que ocurre, los detalles que hemos recibido de Él, del Verbo, la Palabra —porque Cristo es la Palabra, el Verbo es la Palabra, Jesús es la Palabra— han sido revelados en nuestro corazón con tanto Amor, que están guardados, y va a ser muy difícil que olvidemos.

No es lo mismo leer la Biblia y aprenderla de memoria. Es hermoso que de pronto la Palabra se haga Vida en nuestras vidas.

Sabemos por la Palabra que Jesús es Dios Bueno, que es Dios Cantor; pero esta vez ha sido revelado en nuestro interior de una manera hermosa, Y está guardada esa Palabra, esa Verdad en nuestro corazón. Solamente aquellos que viven por el Espíritu y buscan, pueden degustar de la Presencia de nuestro Dios Buenito.

Nuestros ojos han sido abiertos, hemos podido mirar detalles que antes no hubiéramos podido ni siquiera imaginar. La realidad que Dios canta, y trayendo a mi memoria aquella voz hermosa en la calle Salta, en Argentina, en marzo de 1991, donde el Señor con su timbre de voz me habló con voz audible, y me ordenó que volviera a Bolivia, y que ahí se me diría lo que tendría que hacer.

Quedé pasmado de tanto Amor en ese timbre de voz. Me sentía un pecador, pero con tanto Amor Él cubría mis pecados y no me reprochaba, solamente sentía su Amor, fue algo hermoso. Y hoy entender —porque mis ojos fueron abiertos al mundo espiritual—, que escucharlo a Él cantar con ese mismo timbre de voz debe ser algo hermoso, magnánimo, espectacular, magnífico, extraordinario, fuera de todo lo que pudiéramos siquiera imaginar; millones de millones de ángeles haciéndole el coro”.

Pr. Ricardo Claure Peñaloza

PARA QUE SU IGLESIA SE PREPARE… PARA TESTIMONIO A LAS NACIONES

“Este mensaje es una enseñanza. Debemos ser iluminados con el Conocimiento de la Gloria del YO SOY EL QUE SOY en el rostro de Jesucristo. El Padre busca verdaderos adoradores, y si no los encuentra su Presencia se esfuma, ¡no está!, ¡se va! Y si su Presencia se esfuma, queda sequedad, la alabanza y la adoración suena como algo hueco, porque no hay corazón de adoradores; tal vez sí algunos, pero se dejan llevar por la mayoría para hacer un número musical. Y estar en plataforma no es hacer números de artistas, sino es adorar al Altísimo; estar en plataforma no es entretener a la gente, y que el pueblo, sin la guía de la Gloria de Dios manifestada en su Presencia, en el Santísimo Lugar, se ponga a aplaudir porque están fuera de la adoración, porque se apartaron por no buscar el Conocimiento de la Gloria de Dios en la faz del Señor Jesús.

Pensé que había cambiado todo, pensé que habían escuchado los mensajes, y entré a este auditorio contento porque había Presencia del Señor. Mas cuando ya me disponía a entrar en su Presencia para adorar en espíritu y en verdad, empezó su buen número, y cortaron todo, y la Presencia del Señor se fue, y hubo sequedad. Claro, es que Él busca verdaderos adoradores en espíritu y en verdad, y si no los encuentra, su Presencia no está. ¿Y qué es lo que deben hacer? Humillarse. No es cuestión de hacer buenos números musicales en plataforma, es cuestión de entrar para adorar al Altísimo Señor. El asunto no es brillar para mostrar que tocan al unísono y muy bonito; porque si es así, hay vacío, porque no hay Presencia del Señor, porque no hay corazón de adoradores.

Por eso, si este mensaje les sirve, iluminen sus corazones con el Conocimiento de la Gloria del YO SOY EL QUE SOY en la faz de Jesucristo; escudriñen en su interior y vean todo aquello que necesitan entregar, para que así puedan fluir, y el Espíritu de Dios no se vaya y entremos en sequedad, sino más bien permanezca; para que así, ustedes como orquesta sinfónica, siendo instrumentos del Altísimo, puedan guiar al pueblo al Lugar Santísimo para adorarlo.

No puede ser que se vayan por delante, como Nimrod, tocando su buen número, y sin dejarme a mí actuar en el Señor, para poder dirigirlos a todos a la Presencia del Señor, en el Espíritu de Dios; a estas vidas que están ávidas de su Presencia. El Señor se va a causa de su “buen número”, Él no se queda.

¿Quieren conocer la Gloria de Dios? Deben buscar en su interior, cada vida, cada uno de ustedes. Organícense, entren en oración y ayuno, y lloren en la Presencia del Señor, busquen Liberación, busquen entregar las obras de la carne en la cruz del Calvario, autolibérense, que el Señor los haga verdaderos adoradores en espíritu y en verdad; porque la situación es grave. ¡Es grave que ahuyenten la Presencia del Señor!”.

Pr. Ricardo Claure Peñaloza

PARA QUE SU IGLESIA SE PREPARE… PARA TESTIMONIO A LAS NACIONES

“Esta Palabra te ensenará a clamar a aquel Dios Vivo que tenemos, Dios Real y Verdadero.

Para clamar es importante no tener un corazón endurecido, sino un corazón sencillo y doblegado al Señor. El clamor implica gemido, lamento, llanto. Y eso es lo que debe haber en el corazón del creyente; porque un corazón que anda endurecido por el pecado, un corazón que anda engrosado puede acabar pidiendo como no conviene.

Si tu corazón está frío por los afanes de la vida, y no sientes la Presencia del Señor, y poco a poco te has ido alejando porque has dejado de congregarte, y en ti ya no habita el Fuego del Amor del Señor Jesús, sino más bien hay un vacío, por supuesto ya no podrás clamar, ni habrá en ti quebrantamiento ni llanto.

Esta Palabra debe ser revelada en tu vida, para que tú descubras qué es lo que te está alejando del Señor, qué es lo que está endureciendo tu corazón, qué es aquello que está vaciando ese Amor del Señor que había llenando tu corazón en tiempo anterior.

Cuando sientas que tu corazón desmaya en medio de la lobreguez, del páramo, del desierto, de la desazón, y sientes que hay en ti hasta rasgos de incredulidad, y estás dejando de crecer en tu vida espiritual, debes comprender que eso sucede por la dureza de tu corazón, porque has dejado pasar mucho tiempo con un corazón que no se ha doblegado al Señor, con pecados que no has querido confesar, no has querido en la cruz clavar; y por tanto estás con el corazón pesado, donde están operando fuerzas del mal que te van a apartar del camino hacia la Patria Celestial, porque no has querido renunciar a tu vida terrenal, amando lo terrenal y poco a poco rechazando lo celestial. Y así has dejado tu Primer Amor, y solamente buscas al Señor cuando estás en dificultad.

El Dios Vivo por su Amor te hace llegar este mensaje para que tú te acerques a Él, lo busques con un corazón dispuesto a clamar; tú no te puedes enfriar, de ninguna manera puedes permitir que tus pies se aparten del camino hacia la Patria celestial, y que de pronto te encuentres caminando ya por camino de incredulidad, dejando a tu Majestad.

¿Cómo lo vas a dejar si Él es tu Dios de Amor y de Verdad? ¿Cómo te vas a apartar de Aquel que murió por ti, dio su Vida para que tú te puedas levantar del pecado, de la oscuridad, de la esclavitud de Satán, habiéndote dado Él la Vida, por su Espíritu, que ha hecho morar en tu vida? Porque Él Vida Eterna te vino a dar, anheló 33 años y medio poder morir por ti en la cruz, para darte Vida y poderte perdonar, consolar, acurrucar, mimar y abrazar.

Es un Dios Real al cual tú desdeñas por tu amor a todo lo terrenal, dejando lo celestial.

Ya no puedes estar en lobreguez, en oscuridad, ya no puedes estar en el calor del desierto, sediento, sin viento, sin nada que te refresque; debes volcar tus ojos al Señor, poner tus ojos en Jesús, el Autor y Consumador de la fe, y por la fe tomar la decisión, y pedirle al Señor en oración, en clamor, poder seguir en el camino hacia la Patria celestial, dejar todo camino terrenal, y pedirle a Él que te lleve a la Roca que es más alta que Tú, esa Roca donde tú debes estar si tú dispones tu corazón para poderte congregar. Y tú lo sabes, esa Roca es una Roca celestial, es Roca eterna, es la Roca de los siglos de los siglos, y tiene un Nombre, es Jesús de Nazareth; y tú solamente tienes que disponer tu corazón, porque Él en un instante te llevará para que puedas estar sobre Él que es la Roca”.

Pr. Ricardo Claure Peñaloza

PARA QUE SU IGLESIA SE PREPARE… PARA TESTIMONIO A LAS NACIONES

“Esta Palabra te ensenará a clamar a aquel Dios Vivo que tenemos, Dios Real y Verdadero.

Para clamar es importante no tener un corazón endurecido, sino un corazón sencillo y doblegado al Señor. El clamor implica gemido, lamento, llanto. Y eso es lo que debe haber en el corazón del creyente; porque un corazón que anda endurecido por el pecado, un corazón que anda engrosado puede acabar pidiendo como no conviene.

Si tu corazón está frío por los afanes de la vida, y no sientes la Presencia del Señor, y poco a poco te has ido alejando porque has dejado de congregarte, y en ti ya no habita el Fuego del Amor del Señor Jesús, sino más bien hay un vacío, por supuesto ya no podrás clamar, ni habrá en ti quebrantamiento ni llanto.

Esta Palabra debe ser revelada en tu vida, para que tú descubras qué es lo que te está alejando del Señor, qué es lo que está endureciendo tu corazón, qué es aquello que está vaciando ese Amor del Señor que había llenando tu corazón en tiempo anterior.

Cuando sientas que tu corazón desmaya en medio de la lobreguez, del páramo, del desierto, de la desazón, y sientes que hay en ti hasta rasgos de incredulidad, y estás dejando de crecer en tu vida espiritual, debes comprender que eso sucede por la dureza de tu corazón, porque has dejado pasar mucho tiempo con un corazón que no se ha doblegado al Señor, con pecados que no has querido confesar, no has querido en la cruz clavar; y por tanto estás con el corazón pesado, donde están operando fuerzas del mal que te van a apartar del camino hacia la Patria Celestial, porque no has querido renunciar a tu vida terrenal, amando lo terrenal y poco a poco rechazando lo celestial. Y así has dejado tu Primer Amor, y solamente buscas al Señor cuando estás en dificultad.

El Dios Vivo por su Amor te hace llegar este mensaje para que tú te acerques a Él, lo busques con un corazón dispuesto a clamar; tú no te puedes enfriar, de ninguna manera puedes permitir que tus pies se aparten del camino hacia la Patria celestial, y que de pronto te encuentres caminando ya por camino de incredulidad, dejando a tu Majestad.

¿Cómo lo vas a dejar si Él es tu Dios de Amor y de Verdad? ¿Cómo te vas a apartar de Aquel que murió por ti, dio su Vida para que tú te puedas levantar del pecado, de la oscuridad, de la esclavitud de Satán, habiéndote dado Él la Vida, por su Espíritu, que ha hecho morar en tu vida? Porque Él Vida Eterna te vino a dar, anheló 33 años y medio poder morir por ti en la cruz, para darte Vida y poderte perdonar, consolar, acurrucar, mimar y abrazar.

Es un Dios Real al cual tú desdeñas por tu amor a todo lo terrenal, dejando lo celestial.

Ya no puedes estar en lobreguez, en oscuridad, ya no puedes estar en el calor del desierto, sediento, sin viento, sin nada que te refresque; debes volcar tus ojos al Señor, poner tus ojos en Jesús, el Autor y Consumador de la fe, y por la fe tomar la decisión, y pedirle al Señor en oración, en clamor, poder seguir en el camino hacia la Patria celestial, dejar todo camino terrenal, y pedirle a Él que te lleve a la Roca que es más alta que Tú, esa Roca donde tú debes estar si tú dispones tu corazón para poderte congregar. Y tú lo sabes, esa Roca es una Roca celestial, es Roca eterna, es la Roca de los siglos de los siglos, y tiene un Nombre, es Jesús de Nazareth; y tú solamente tienes que disponer tu corazón, porque Él en un instante te llevará para que puedas estar sobre Él que es la Roca”.

Pr. Ricardo Claure Peñaloza

PARA QUE SU IGLESIA SE PREPARE… PARA TESTIMONIO A LAS NACIONES

«Esta Palabra está dirigida a aquellas vidas que en este tiempo viven con desconfianza, con quebranto, con inseguridad; vidas que piensan que Dios no las favorece, como que se hubiera olvidado de ellas; vidas que se encuentran en un tiempo de persecución espiritual, física, legal. Un tiempo de quebranto, un tiempo de infamia que muchos en el pueblo del Señor están sufriendo.

Muchas personas se encuentran pasando por esta situación; y están quebrantadas, rotas, heridas, que están sufriendo infamia, que están entre leones rugientes, fuerzas espirituales malignas operantes, que provocan destrucción entre personas que están vomitando llamas por medio de sus palabras, por medio de sus insultos, por medio de sus murmuraciones, por medio de mensajes, por medio de las redes sociales. He ahí hijos de hombres que vomitan llamas incendiadas por el mismo infierno, por las fuerzas espirituales demoniacas del Seol, de las partes inferiores de la tierra, del Hades.

El Señor, a través de esta Palabra, quiere darte armas, quiere darte a conocer sus promesas para que puedas salir adelante —inclusive si ahora eso no está ocurriendo contigo, porque en algún momento te podría suceder—. Y esta Palabra te ayudará, estarás siendo entrenado para la guerra, para que cuando suceda sepas cómo obrar, cómo salir adelante. Porque es un Dios Verdadero, es un Dios Real, su Nombre es Jesús de Belén.

Jesús creció en Nazareth, pero nació en Belén. “Belén”, significa: “casa de pan”; y Él es el Pan de Vida que vino a habitar entre nosotros, ese Pan de Vida que tú puedes comer, que fue quebrado, que fue roto en la cruz del Calvario por nuestros pecados. Y tú tienes que dejar que el Señor Jesús crezca en ti, y tú ser Belén, casa de Pan; que tu corazón sea una casa de Pan donde habite Él, donde crezca Él, donde te alimentes de Él con su Pan de Vida, con este Pan de Vida que Él te quiere dar a través de la Palabra escrita en el Salmo 57, Palabra que quiere fortalecer tu alma, alimentar tu vida, porque estás pasando por tribulación, por quebranto, por infamia, por acoso, por insulto; llamas que vienen de palabras de insultos en el campo espiritual, en el campo legal, o donde estuvieres pasando esta prueba y tribulación.

¿Y qué es lo que tienes que hacer? ¿Huir del Señor, apartarte de Él, enojarte con Él cuando estás pasando por este tipo de situaciones? No, tú debes buscar su Misericordia.

Ya no puedes estar echado con todo el terror entre los leones, sólo viendo a los hijos de los hombres echando llamas en contra de tu vida en la red que han armado para tus pasos, pendiente de sus dientes filosos y agudos, de sus lenguas viperinas que como espadas agudas están buscando destruir; ya no más.

Perdona, bendice, exalta a tu Dios sobre los cielos, exalta a tu Dios sobre toda la tierra, para que ella sea llena de su Gloria; que pronto esté dispuesto tu corazón para poder cantarle, para poder trovar Salmos a nuestro Dios.

Y tienes que estar con el corazón dispuesto desde la mañana a levantarte muy temprano para poder cantarle a nuestro Dios. Él te levantará, Él te sustentará, Él te libertará».

Pr. Ricardo Claure Peñaloza

PARA QUE SU IGLESIA SE PREPARE… PARA TESTIMONIO A LAS NACIONES

“Amado hermano, amada hermana, es necesario que dispongas tu corazón; hay muchas vidas que tú puedes traer al redil. Se producirá una fiesta en el Reino de los cielos por cada alma que se acerque al Señor por tu intervención.

Y ese es el mensaje para ti: que acerques personas a los pies de Jesús; el Señor hará en ellos conforme a su corazón.

Esta hermosa Palabra encierra un mensaje espiritual para que tú te fortalezcas y busques ser santo y perfecto, como nuestro Padre que está en los cielos es Santo y Perfecto.

Este mensaje traerá bendición a tu vida a través del libro de los Salmos; y es más, te dará mayores detalles de la personalidad y la esencia de nuestro Amado Señor Jesús de Nazareth. Te revelará que Él no se agrada de la confianza que tú puedas tener o las instancias del mundo a las cuales tú puedas acudir para poder salir de tus problemas o para poder seguir adelante en la guerra que llevas en tu vida cotidiana. No debes actuar como Israel, que confiaba en los ejércitos —inclusive de Egipto, del mundo—; y se olvidaba de confiar en la Fuerza de su Dios.

Y es lo que tú ahora debes aprender. Porque hay personas que buscan resolver sus problemas a través de influencias, a través de conocidos; pero eso es poner la confianza en fuerzas humanas, cuando en realidad tenemos que orar y clamar por la Fuerza del Señor en nuestras vidas, fortalecernos en el Señor y en el Poder de su Fuerza; no acudir al mundo ni sus habitantes, sino orar y clamar al Dios Todopoderoso; y Él ha de permitirte caer en gracia y cualquier problema solucionar, pero poniendo tu fuerza y tu confianza solamente en Él.

Y sucederá que una vez que seas fortalecido y renovado por el Altísimo, recibirás la Fuerza para descubrir que fuiste creado (a) para ser una nube de salvación para llevar lluvia de bendición sobre las almas secas, áridas, en desierto, en desolación.

Por su Espíritu Santo, el Señor habrá derramado Ríos de Agua Viva en tu interior, y te habrás convertido en una nube llena de esas Aguas de Vida. Al recibir su Palabra de Amor, Él te preparó como nube para que seas instrumento de salvación.

Lo que el Señor quiere es que hagas llover cada día sobre tantas vidas secas y sedientas. Háblales, no calles, dales de comer. La Palabra de Dios no vuelve vacía; tal vez el Señor podrá salvar sus almas; solamente Él lo sabe, y tú podrás verlo. Probablemente te rechazarán; pero dentro de lo que puedas hacer tú, dales de comer. Si nuestro Dios hace salir su sol sobre justos e injustos, ¿cuánto más tú vas a poder irradiar la Luz también sobre justos e injustos? Eso es lo que el Señor quiere de tu vida”.

Pr. Ricardo Claure Peñaloza

PARA QUE SU IGLESIA SE PREPARE… PARA TESTIMONIO TODAS LAS NACIONES

“Amado hermano, amada hermana, es necesario que dispongas tu corazón; hay muchas vidas que tú puedes traer al redil. Se producirá una fiesta en el Reino de los cielos por cada alma que se acerque al Señor por tu intervención.

Y ese es el mensaje para ti: que acerques personas a los pies de Jesús; el Señor hará en ellos conforme a su corazón.

Esta hermosa Palabra encierra un mensaje espiritual para que tú te fortalezcas y busques ser santo y perfecto, como nuestro Padre que está en los cielos es Santo y Perfecto.

Este mensaje traerá bendición a tu vida a través del libro de los Salmos; y es más, te dará mayores detalles de la personalidad y la esencia de nuestro Amado Señor Jesús de Nazareth. Te revelará que Él no se agrada de la confianza que tú puedas tener o las instancias del mundo a las cuales tú puedas acudir para poder salir de tus problemas o para poder seguir adelante en la guerra que llevas en tu vida cotidiana. No debes actuar como Israel, que confiaba en los ejércitos —inclusive de Egipto, del mundo—; y se olvidaba de confiar en la Fuerza de su Dios.

Y es lo que tú ahora debes aprender. Porque hay personas que buscan resolver sus problemas a través de influencias, a través de conocidos; pero eso es poner la confianza en fuerzas humanas, cuando en realidad tenemos que orar y clamar por la Fuerza del Señor en nuestras vidas, fortalecernos en el Señor y en el Poder de su Fuerza; no acudir al mundo ni sus habitantes, sino orar y clamar al Dios Todopoderoso; y Él ha de permitirte caer en gracia y cualquier problema solucionar, pero poniendo tu fuerza y tu confianza solamente en Él.

Y sucederá que una vez que seas fortalecido y renovado por el Altísimo, recibirás la Fuerza para descubrir que fuiste creado (a) para ser una nube de salvación para llevar lluvia de bendición sobre las almas secas, áridas, en desierto, en desolación.

Por su Espíritu Santo, el Señor habrá derramado Ríos de Agua Viva en tu interior, y te habrás convertido en una nube llena de esas Aguas de Vida. Al recibir su Palabra de Amor, Él te preparó como nube para que seas instrumento de salvación.

Lo que el Señor quiere es que hagas llover cada día sobre tantas vidas secas y sedientas. Háblales, no calles, dales de comer. La Palabra de Dios no vuelve vacía; tal vez el Señor podrá salvar sus almas; solamente Él lo sabe, y tú podrás verlo. Probablemente te rechazarán; pero dentro de lo que puedas hacer tú, dales de comer. Si nuestro Dios hace salir su sol sobre justos e injustos, ¿cuánto más tú vas a poder irradiar la Luz también sobre justos e injustos? Eso es lo que el Señor quiere de tu vida”.

Pr. Ricardo Claure Peñaloza

PARA QUE SU IGLESIA SE PREPARE… PARA TESTIMONIO TODAS LAS NACIONES

“El propósito de esta Palabra es que cada uno tenga revelado en su interior el principio de la Sabiduría, que es el Temor de Dios; y que a través de este mensaje conozcas que Él es todo Amor, pero también es Juez Justo.

Vivimos en un tiempo en el cual el amor de muchos se está enfriando. El pueblo del Señor Jesús ha dejado de lado su servicio y se ha olvidado de Dios. Muchos entregaron su vida a Jesucristo para servirle, prometieron hacerlo, pero se olvidaron del servicio, se apartaron de Él, se dejaron absorber por las cosas del mundo, los afanes de esta tierra, las cosas vanas.

Y esas obras muertas han permitido que tu conciencia se manche, y por eso has dejado de servir, ha venido debilidad espiritual a tu vida, ya no hubo fuerza para servir, y te dejaste absorber por el mundo, por las vanidades de este mundo, por los sueños de este mundo, autoengañándote pensando que el Señor Jesús todavía tarda en venir.

Esta Palabra te hará comprender que el corazón del sabio discierne el tiempo y el juicio. Los sabios de corazón discernirán que el Señor hace conocer su enojo por la ausencia de multitudes que han dejado de servirle.

Seguir el camino del Señor, no solamente es salir de Egipto, de la tierra de esclavitud espiritual; el objetivo es cruzar el mar Rojo hacia la tierra prometida, avanzar y llegar a esa tierra, como ocurrió en los días de Moisés. Por esto, es necesario que su iglesia vea lo que el Señor Jesús quiere de cada uno de los que forman parte de Él: llegar a la Jerusalem Celestial, a la ciudad del Dios Vivo.

Y el objetivo de tomar la cruz cada día es también que por amor los hijos de Dios decidan servir al Señor Jesús. El objetivo del derramamiento de su sangre preciosa es de también reclutar hijos que le sirvan; hijos que tengan la conciencia limpia y la purifiquen cada día, para que de esa manera se pueda seguir llevando Luz del Evangelio a los perdidos mediante el servicio.

El Dios de Israel te exhorta a recapacitar y descubras que tu conciencia está manchada por el pecado que hay en tu vida, porque has dejado de usar la sangre de Cristo; y por lo tanto, ya no sientes el anhelo, el deseo de servir a Dios; ahora tienes otros sueños, otros propósitos.

Este es un mensaje de exhortación; mas el Señor también manifestará su Amor a través de él para que utilices su sangre y limpies tu conciencia de todo lo malo que ha salido de tu corazón, para que vengan a ti nuevas Fuerzas del Señor, y te levantes como águila para poder servirle; y así tu nombre sea escrito en el Libro de los que le temen y sirven, el Libro de los que son especial tesoro para el Señor”.

Pr. Ricardo Claure Peñaloza

PARA QUE SU IGLESIA SE PREPARE… PARA TESTIMONIO A LAS NACIONES

«El Dios Vivo nos está enseñando en este tiempo a todos y cada uno de los que somos parte de sus redimidos a levantar nuestra alma. Aunque estemos en prueba, tribulación, sufrimiento, dolor, vicisitudes, cosas difíciles que acontecen en nuestra vida, es necesario levantar el alma. El alma no puede quedarse en depresión, ni sumida en el sufrimiento y el dolor; tú no puedes dejarte vencer por los problemas que acontecen a tu alrededor, tú debes levantar tu alma a Él.

Te olvidas del Señor porque el sufrimiento puede más, el dolor te embargó y te endureció el corazón, te llenó de amargura, rencor, resentimiento, y tantas otras cosas más que te alejan de Él; en vez de humillarte como los humildes de corazón y subir a su Presencia habiendo levantado tu alma a Él. No necesitas otra cosa más que disponer tu vida, y en un instante estarás en su Santísimo Lugar, en esa Morada, en esa Habitación que amamos, que tú amas.

Podrás estar lleno de incertidumbre, duda, falta de fe, y de tantas cosas que acontecen cuando estás en circunstancias adversas; pero no te puedes quedar así, no puedes permitir que el enemigo te mantenga así; porque así viene la derrota. Lo que tú debes hacer es levantar tu alma y subir a Él, a su Trono celestial, a la Presencia del YO SOY EL QUE SOY.

Tienes que saber esperar en Él, esperar en la quietud del Santísimo Lugar, en esa quietud, en esa paz. Cada día que vaya pasando vas a ir conociendo plenamente lo que es la Voluntad del Señor sin atreverte a tomar una decisión así por así, sino esperar en Él; y verás como el Señor va ir guiando tus pasos y va ir ordenando tu vida. No habrá confusión, habrá Luz, habrá Verdad.

El corazón confiado dice: “Él hará, Él me guiará. Esperaré, mi esperanza está en Él, mi Hatikva es Él”.

Los que son guiados por el Espíritu de Dios, estos son llamados “hijos de Dios”. Debes dejar que Él sea el que te guíe, así como cuando no sabes cuando viene el viento, ni sabes de donde viene ni a donde va, así son aquellos que son guiados por el Espíritu de Dios, así son aquellos que han nacido del Espíritu Santo, que no operan en la carne y no toman decisiones infatuadas y sin pensar, sino se detienen en el Santísimo Lugar, en la Paz, en el Reposo, para que el alma se doblegue, se tranquilice, y sepa esperar en aquel Rey de Paz que ha de poder solucionar los problemas más graves que pueda haber a tu alrededor y en tu propia vida.

¿Tú crees que ha de hablarte una voz estentórea y te ha de decir: “Tienes que hacer esto y esto”, y te ha de dar las formulas para que tú sepas como actuar? No, es por el Espíritu que uno escucha y hace. Si tú entras en la Paz del Santísimo Lugar, renunciando a todo aquello que te afecta, que te atormenta, que te hiere, que te lastima, todo lo que hubiere en tu alma, todo ese remolino que causa tanta confusión, y tú le entregas a Él por la obra que Él ha consumado en la cruz, así vas a poder recibir de Él en esa Paz, en esa quietud del Santísimo Lugar su enseñanza; y en esa quietud tu corazón ha de tener Paz, y has de sentir que algo ha sido cambiado en tu interior, sentirás algo sobrenatural.

Porque con su Amor Él nos liberta, su Amor saca todo aquello que está contaminando nuestro corazón, su Presencia arranca todas las fuerzas del mal que pudieran estar operando, porque no pueden resistirla. Mientras vas respirando, mientras vas hablando, esas fuerzas del mal están saliendo, están huyendo; de tal manera que cuando estás terminando la oración sientes tu corazón más liviano. Es porque has estado en su Presencia, solamente Él necesita tocarte, solamente tú necesitas acurrucarte en Él y Él ha de hacer lo demás.

Los humildes de corazón encuentran santidad en el Señor; los mansos heredarán la tierra, los mansos tendrán la Vida Eterna; y los mansos tienen que correr su carrera hacia la Patria celestial, hacia esa Jerusalem amada que Él ha fundado, ha construido para nosotros; y ese es nuestro propósito, poder llegar a ella».

Pr. Ricardo Claure Peñaloza

“Jesús de Nazareth quiere hoy revelarse a tu vida como el Médico que vino por los enfermos y no por los sanos; vino por los injustos. No hay justo ni aun uno, por cuanto todos habíamos pecado y estábamos destituidos de su Gracia y de su Gloria; mas pudimos ser aceptos por medio de la fe en Él, de su obra consumada en la cruz del Calvario, donde se ganó el derecho de ser nuestro Doctor, un Dulce Doctor, un Dulce Médico del corazón, que está presto a sanar toda herida que tienes en el alma.

Él no solamente es tu Creador, sino también es tu Buen Doctor lleno de Amor; el Médico de tu corazón que está roto por la maldad, y el único que puede sanar todo lo que hay en tu interior.

Es tan lleno de Amor y tan Poderoso, que te opera el corazón estando tú acurrucado en su regazo, con tu rostro hundido en sus vestidos de Amor, de Perdón y de Santidad. Y Él, tan Delicado Cirujano Dios de Amor, entra en tu corazón y te hace ver todas esas heridas que están infectadas, sangrando y que te causan dolor. Y te hace entender que debes perdonar y bendecir a quien o quienes te hirieron, dejando lugar al Dios que estableció que la venganza es de Él, que obrará siempre y cuando perdones de corazón. Con un corazón sanado y limpio podrás ver la Justicia de tu Dios Justo; antes, no.

Por eso, deja a Él todo aquello que ha estado trayendo dolor y sufrimiento a tu vida; descansa en Él, y Él hará. Toda causa de tristeza y dolor, Él sanará.

Si ya no puedes sentir su Presencia, si tu corazón se ha endurecido, acércate a Él clamando y contándole con humildad tu miserable condición. No hay nadie como Él en toda la tierra, Él quiere que lo conozcas así, está presto a oír todo lo que pueda salir de ti; y con su sola Presencia obrará en tu corazón, te cuidará y te acurrucará en sus brazos con todo su Amor.

Una persona que tiene problemas en su corazón, si no acude al médico se va a morir, va a descender al sepulcro. Es lo que tú tienes que tomar en cuenta, que puedes morir espiritualmente si no atiendes oportunamente las cosas que hay en tu corazón, que están doblegando tu vida espiritual, que no estás pudiendo perdonar, que no estás pudiendo asimilar, que no las puedes resistir, porque va más la fuerza de tu naturaleza caída; y no puedes vencer, y sientes que tu corazón está herido, destruido, lastimado, lacerado, sangrando, infectado. Pero es en ese momento que tú debes comprender que no hay nadie en la tierra que ha de poder ser médico de tu corazón, solamente Jesús de Nazareth.

Tú eres su paciente y no te debes rendir, cada día debes acudir a tu Dios Médico de Verdad, y verás de qué manera Él ha de obrar, verás sanidad en tu vida, en tu interior, y también a tu alrededor.

Esto es lo que tú tienes que hacer: no te dejes sumir en la soledad, en el dolor, en la tristeza; acude a Él. Si lloras mientras ruegas, clamas, gimes y te lamentas, debes saber que Él está viéndote con toda atención. Estás entre sus brazos, y Él está abrazándote, consolándote, y hasta derramando lágrimas juntamente contigo. Porque no te olvides que es un Dios Compasivo, ese es el Dios que te estoy presentando”.

Pr. Ricardo Claure Peñaloza

PARA QUE SU IGLESIA SE PREPARE… PARA TESTIMONIO A LAS NACIONES

“Jesús de Nazareth quiere hoy revelarse a tu vida como el Médico que vino por los enfermos y no por los sanos; vino por los injustos. No hay justo ni aun uno, por cuanto todos habíamos pecado y estábamos destituidos de su Gracia y de su Gloria; mas pudimos ser aceptos por medio de la fe en Él, de su obra consumada en la cruz del Calvario, donde se ganó el derecho de ser nuestro Doctor, un Dulce Doctor, un Dulce Médico del corazón, que está presto a sanar toda herida que tienes en el alma.

Él no solamente es tu Creador, sino también es tu Buen Doctor lleno de Amor; el Médico de tu corazón que está roto por la maldad, y el único que puede sanar todo lo que hay en tu interior.

Es tan lleno de Amor y tan Poderoso, que te opera el corazón estando tú acurrucado en su regazo, con tu rostro hundido en sus vestidos de Amor, de Perdón y de Santidad. Y Él, tan Delicado Cirujano Dios de Amor, entra en tu corazón y te hace ver todas esas heridas que están infectadas, sangrando y que te causan dolor. Y te hace entender que debes perdonar y bendecir a quien o quienes te hirieron, dejando lugar al Dios que estableció que la venganza es de Él, que obrará siempre y cuando perdones de corazón. Con un corazón sanado y limpio podrás ver la Justicia de tu Dios Justo; antes, no.

Por eso, deja a Él todo aquello que ha estado trayendo dolor y sufrimiento a tu vida; descansa en Él, y Él hará. Toda causa de tristeza y dolor, Él sanará.

Si ya no puedes sentir su Presencia, si tu corazón se ha endurecido, acércate a Él clamando y contándole con humildad tu miserable condición. No hay nadie como Él en toda la tierra, Él quiere que lo conozcas así, está presto a oír todo lo que pueda salir de ti; y con su sola Presencia obrará en tu corazón, te cuidará y te acurrucará en sus brazos con todo su Amor.

Una persona que tiene problemas en su corazón, si no acude al médico se va a morir, va a descender al sepulcro. Es lo que tú tienes que tomar en cuenta, que puedes morir espiritualmente si no atiendes oportunamente las cosas que hay en tu corazón, que están doblegando tu vida espiritual, que no estás pudiendo perdonar, que no estás pudiendo asimilar, que no las puedes resistir, porque va más la fuerza de tu naturaleza caída; y no puedes vencer, y sientes que tu corazón está herido, destruido, lastimado, lacerado, sangrando, infectado. Pero es en ese momento que tú debes comprender que no hay nadie en la tierra que ha de poder ser médico de tu corazón, solamente Jesús de Nazareth.

Tú eres su paciente y no te debes rendir, cada día debes acudir a tu Dios Médico de Verdad, y verás de qué manera Él ha de obrar, verás sanidad en tu vida, en tu interior, y también a tu alrededor.

Esto es lo que tú tienes que hacer: no te dejes sumir en la soledad, en el dolor, en la tristeza; acude a Él. Si lloras mientras ruegas, clamas, gimes y te lamentas, debes saber que Él está viéndote con toda atención. Estás entre sus brazos, y Él está abrazándote, consolándote, y hasta derramando lágrimas juntamente contigo. Porque no te olvides que es un Dios Compasivo, ese es el Dios que te estoy presentando”.

Pr. Ricardo Claure Peñaloza

PARA QUE SU IGLESIA SE PREPARE… PARA TESTIMONIO A LAS NACIONES

“Este mensaje está dirigido a ti que te encuentras en el desierto, y buscas recibir Palabra de nuestro Dios en este día, porque de una u otra manera te sientes en tierra seca, árida, y no encuentras Aguas; porque en la magnitud de la adversidad, de las circunstancias que se han dado, tu alma, el corazón del alma, el corazón terrenal, no quiere, se resiste a aceptar las circunstancias difíciles, adversas, la tristeza, el dolor, el desconsuelo, la decepción, el llanto interno.

Y el Dios Vivo tenía reservada esta Palabra para este nuevo día, para hacerte entender que tú no estás solo, tú tienes un Dios y es un Dios Real; no es el Dios ajeno, no es el Dios que está a tu lado simplemente; es un Dios personal, es un Dios que ama tu vida, es un Dios que te pertenece a ti. Es Dios tuyo, es un Dios al cual puedes acudir cuando estás en la tierra seca, en la tierra árida de la tristeza, de la desolación, de la adversidad, de los conflictos en el lugar donde trabajas, el lugar donde estudias, en la familia, en tu vida personal, conyugal, lo que fuere.

Por eso debes buscarlo, para que tú puedas ver su Poder y su Gloria.

El Poder de su Espíritu Santo radica en el Poder de su Amor, su Gloria, su Resplandor; su Gloria que es Sublime, llena de Amor Infinito. Ese Amor que conocemos; aunque muchos de oídas, otros que lo vieron, otros que lo sintieron y lo vieron simultáneamente, testigos de lo que ocurrió en Palmasola y en Sucre. Cuando en ese recinto penitenciario fueron traídos los más revoltosos, los más peligrosos, los del “bote” —lo más despreciado de la sociedad—; los pusieron en primera fila y sobre ellos el Señor manifestó el Poder de su Amor Infinito, su Gloria Sublime, para poder sacarlos de la tierra seca, árida donde no hay Aguas. Ellos nunca se imaginaron que podrían ver la Presencia de Jesús mismo manifestándose con esos ojos de Amor Infinito. Y ahí el Señor les reveló el Poder de su Amor, ese Amor que cubre multitud de pecados, les dio de beber Aguas de Vida. Y solamente los miraba con Amor, no les reprochaba nada, solamente los amaba, como Él quiere hacer contigo en tu vida.

Él quiere que salgas de la tierra seca, de la aridez, del pecado en el que te encuentras, de la iniquidad, de la barbaridad, de las costumbres de Sodoma; quiere que salgas por Amor, para que tu alma no se pierda en la tierra seca, en la aridez, sino que vengas a las Aguas para que vuelvas a tu primer amor, cuando Él se manifestó en tu vida, y aún más ahora, con un Poder sobrenatural, un Amor Infinito que solamente puede fluir desde su Santuario, desde el Lugar Santísimo donde tú muchas veces has podido sentir su Presencia, y con tus ojos espirituales has podido ver la Grandeza y la Gloria de nuestro Dios, y lo hermoso que es conocer su Misericordia; porque esto es lo que tú también tienes que buscar, no solamente el Poder de su Amor, su Gloria Sublime, sino también en Él está su Misericordia.

A través de esta Palabra el Señor te enseña que tú debes apegarte a Él, acurrucarte en Él; por eso ha revelado esta melodía, este cántico de Amor. Sabiendo que Él es un Dios de tanto Amor, es un Dios de Misericordia que nos permite acercarnos a Él de tal manera que nuestra alma puede estar apegada en Él, acurrucada en Él. En medio de la tierra seca y de la aridez, en medio del alma sedienta, de la carne anhelante que no tiene la fuerza para poder tomar la cruz y vencer; porque el primer Adán se resiste con toda su naturaleza caída para no querer participar de la vida del postrer Adán, del Espíritu vivificante lleno del Poder de su Amor, lleno de su Gloria Sublime, lleno de su Misericordia para con todos aquellos que forman parte de tu problema. Y así de esta manera, poder seguir victorioso, en un camino, que es cierto, es angosto y pedregoso hacia la Patria Celestial, buscando gloria, honra e inmortalidad”.

Pr. Ricardo Claure Peñaloza.

“Hay un Poder sobrenatural de un Dios de verdad, y si tú lo buscas de corazón, en sus brazos Él te ha de acurrucar y te ha de dar la Fuerza para perdonar todo cuanto hayan podido hacer contra ti. La base de su Poder es su AMOR.

Por eso debemos acudir a la única y principal obra de Luz: la muerte del Señor Jesús en la cruz. Es ahí donde tú vas a poder hacer que la carne de pecado que hay en tu corazón muera, y las fuerzas espirituales inmundas dejen de devorarte, lacerarte y destruirte por dentro.

Tú no te puedes dejar vencer por las obras y las fuerzas espirituales de las tinieblas. Tú has nacido para perdonar, humillando tu carne hasta lo sumo, crucificándola en la cruz y bendiciendo en el nombre de Jesús.

Si tú te humillas, las fuerzas espirituales de maldad que habitan en tu carne de pecado, tropezarán y caerán porque no pueden resistir la Presencia del AMOR de Jesús cuando estás acurrucado en Él, mientras te enseña y te revela el perdón. Y en relación a tus enemigos de sangre y carne que han podido mellar tu vida o lo que es parte de ti, ya no quedará nada, solamente AMOR. Y te harás parte de Él, postrer Adán, espíritu vivificante. Esa es la obra de nuestro Dios, cuando estamos acurrucados en Él.

De tal manera que cuando un ejército de demonios acampe contra ti, operando en seres de carne y sangre, haciendo maldad contra ti a tus espaldas, en las tinieblas, en la oscuridad, o de frente —como fuere—, tu corazón del alma estará fortalecido; permanecerás firme, porque no habrá temor de que pronto vuelva ese rencor, resentimiento y venganza, no. Estará su AMOR llenando tu corazón, porque eres parte de la Luz al haber acudido a Él cada día, especialmente en el tiempo de tribulación.

Esto te enseña a permanecer en su Presencia cada día, acurrucado en Él, recibiendo su perfecto AMOR; porque el perfecto AMOR echa fuera el temor. Por eso no temerá tu corazón, y aunque se levante guerra contra ti, estarás confiado, sea externa o internamente; vencerás la guerra que llevas dentro para que el hombre carnal no provoque destrucción, sino recibirás el Poder para que permanezca crucificado, perdonando, amando; así como nuestro Señor Jesús crucificado y muriendo en la cruz nos estaba amando, y contemplaba a su iglesia, su pueblo manchado, arrugado, hediendo por el pecado, y aún así Él nos estaba amando.

Acurrucado en su Presencia podrás entender lo que es la obra de la cruz en tu vida, para poder recibir su AMOR, para que de pronto puedas ver ese cambio en tu corazón. Que donde hubo rabia, indignación, odio, violencia, venganza, resentimiento; ante su sola Presencia, tu corazón pueda ser sanado, y los espíritus malignos huyan. Y así permanezcas confiado, no sobre la arena de la carne, de un corazón carnal, sino parado sobre la Roca, amando aun a quien te haya dañado.

Y así, gracias a su salvación, su sustento y su liberación, ya redimido por Él, podrás estar acurrucado en su regazo, para poder contemplar la Hermosura de su Santidad, y así Conocerás más de Él, de su Templo y su Presencia”.

Pr. Ricardo Claure Peñaloza

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«Es esta la Palabra que el Verbo de Vida ha preparado para ti, para que puedas recordar lo que es Jesús de Nazareth en tu vida. Él es el YO SOY EL QUE SOY, la imagen misma de la sustancia del Dios invisible, del Dios Todopoderoso que ha creado los cielos y la tierra, Aquel que dijo: “Sea la luz”, y fue la luz, para que la luz pueda resplandecer en las tinieblas.

El YO SOY EL QUE SOY debe ser revelado en toda su Magnificencia en tu vida; Él es la Luz verdadera, la Luz que alumbra a todo hombre; esa Luz que está sobre ti para hacerte ver todo lo que está mal en tu conciencia, que forma parte de tu espíritu nacido de nuevo; es allí donde Él te hace saber todo aquello que no está bien, aquello que no le agrada a Él. En el interior te das cuenta, con tan solamente pensar mal, que no puedes continuar y te debes detener, porque al Señor, nuestro Dios no le agrada aun lo que piensas.

Por eso está esa Luz, para que tú vivas en virtud, agradándole a Él. Es la Luz que Él ha traído a tu vida cuando tú has aceptado a Jesús como Señor y Salvador. Él es tu Luz y es tu Salvación. Él es tu Salvación en la tribulación, en el dolor, en la angustia, en la tristeza, en la desesperación, en la zozobra, en las circunstancias adversas. Él con Justicia juzga y pelea, y vendrá a ti para poderte ayudar, para poderte salvar, para poderte sustentar, para poderte consolar.

Y cuando estés totalmente atribulado, sin poder avanzar, por todo aquello que pueda en tu vida pasar, a través del Cántico de AMOR de este mensaje, Él te quiere enseñar que en su regazo tú te puedes acurrucar; horas de horas puedas así estar, sin sentir que el tiempo pasa, y puedas saber que Él es tu Luz y tu Salvación, por más que estés lleno de temor o terror. Él te dará Fuerza y Fortaleza para que puedas continuar, y con la Fuerza de Él, de tu Salvador, de tu Luz, vas a poder decir con toda confianza en tu corazón: “¿De quién temeré?”.

¿De quién temerás?; si Él es tu Luz y tu Salvación.

Cuando sientas que no hay Fuerzas para seguir, que no hay Fortaleza en tu vida, por todo aquello que pueda acontecer en la familia; con el cónyuge, con los hijos, con los padres, cosas graves y muy graves, allí estará Él para darte la Fuerza y la Fortaleza, si tú te acurrucas en su costado y buscas su Presencia de AMOR que acabará con la preocupación.

“YO SOY EL QUE SOY ES LA FORTALEZA DE MI VIDA”, podrás decir, como David en sus días. Y vencerás, y seguirás adelante, porque estarás escondido en Él, en lo reservado de su morada, parado sobre la Roca con la cabeza levantada».

Pr. Ricardo Claure Peñaloza

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«El Salmo 24 en conjunción con Isaías 61:6 ha de ser abierto aún más ante los ojos espirituales de aquellos que con corazón sencillo se humillan delante del Dios Altísimo, corazones que son llamados y elegidos y fieles.

Esta Palabra ha de ser revelada en todos aquellos que dispongan su vida, si hoy abren las puertas de su corazón. Y no solamente recibirán un conocimiento de oídas, sino va a estar revelado muy dentro de su ser, por revelación del Espíritu de Dios en su espíritu. Podrán recibir el conocimiento de la Gloria de Dios que es sublime; y lo sublime es aquello que está lleno de amor, ternura y dulzura.

Y eso es lo que sucedió en Palmasola y en Sucre; lo viví, lo experimenté, y es lo que me da la Fuerza y hace que ahora nada pueda detenerme; porque lo importante es poder llevar Luz a sus vidas a través de esta Palabra que está siendo revelada aún más con toda la experiencia vivida.

Cuando el Señor dice: “Alzad, oh puertas, vuestras cabezas”, se refiere a que nosotros somos esas puertas, y también esas cabezas, que debemos erguir porque viene nuestro Rey de Gloria que revela la Palabra predicada en el Salmo 24. Puertas eternas, por cuanto el Señor nos ha hecho partícipes de su Eternidad, poniendo en nosotros un alma eterna, un corazón eterno, poniendo en nuestro cuerpo físico terrenal, eternidad. Y Él no quiere que esa alma eterna se pierda en el Seol, para luego ser arrojados al lago que arde con fuego y azufre. Por eso Él murió en la cruz del Calvario; y es lo que nos mueve a predicar a tiempo y fuera de tiempo.

Cada uno en su corazón tiene muchas puertas, y esas puertas tienen que ser abiertas para que entre el Rey de Gloria y Él llene de su Gloria todo su ser.

Estás ahora a tiempo de que toda puerta abierta al mundo, al rey de este mundo —Satanás— sea cerrada, como en la Pascua, untando el dintel y los dos postes con la sangre del Cordero en cada una de las puertas de tu corazón. Para que de esta manera tú puedas —en el momento preciso— esperar al Señor con las puertas abiertas, y entre el Rey de Gloria —Jesús de Nazareth— y te llene de ella.

Alza tu cabeza y abre las puertas eternas de tu corazón para poder esperar al Dios de Abraham, Isaac y Jacob, el Gran YO SOY EL QUE SOY DE LOS EJÉRCITOS».

Pr. Ricardo Claure Peñaloza

PARA QUE SU IGLESIA SE PREPARE… PARA TESTIMONIO A LAS NACIONES

«El Salmo 24 en conjunción con Isaías 61:6 ha de ser abierto aún más ante los ojos espirituales de aquellos que con corazón sencillo se humillan delante del Dios Altísimo, corazones que son llamados y elegidos y fieles.

Esta Palabra ha de ser revelada en todos aquellos que dispongan su vida, si hoy abren las puertas de su corazón. Y no solamente recibirán un conocimiento de oídas, sino va a estar revelado muy dentro de su ser, por revelación del Espíritu de Dios en su espíritu. Podrán recibir el conocimiento de la Gloria de Dios que es sublime; y lo sublime es aquello que está lleno de amor, ternura y dulzura.

Y eso es lo que sucedió en Palmasola y en Sucre; lo viví, lo experimenté, y es lo que me da la Fuerza y hace que ahora nada pueda detenerme; porque lo importante es poder llevar Luz a sus vidas a través de esta Palabra que está siendo revelada aún más con toda la experiencia vivida.

Cuando el Señor dice: “Alzad, oh puertas, vuestras cabezas”, se refiere a que nosotros somos esas puertas, y también esas cabezas, que debemos erguir porque viene nuestro Rey de Gloria que revela la Palabra predicada en el Salmo 24. Puertas eternas, por cuanto el Señor nos ha hecho partícipes de su Eternidad, poniendo en nosotros un alma eterna, un corazón eterno, poniendo en nuestro cuerpo físico terrenal, eternidad. Y Él no quiere que esa alma eterna se pierda en el Seol, para luego ser arrojados al lago que arde con fuego y azufre. Por eso Él murió en la cruz del Calvario; y es lo que nos mueve a predicar a tiempo y fuera de tiempo.

Cada uno en su corazón tiene muchas puertas, y esas puertas tienen que ser abiertas para que entre el Rey de Gloria y Él llene de su Gloria todo su ser.

Estás ahora a tiempo de que toda puerta abierta al mundo, al rey de este mundo —Satanás— sea cerrada, como en la Pascua, untando el dintel y los dos postes con la sangre del Cordero en cada una de las puertas de tu corazón. Para que de esta manera tú puedas —en el momento preciso— esperar al Señor con las puertas abiertas, y entre el Rey de Gloria —Jesús de Nazareth— y te llene de ella.

Alza tu cabeza y abre las puertas eternas de tu corazón para poder esperar al Dios de Abraham, Isaac y Jacob, el Gran YO SOY EL QUE SOY DE LOS EJÉRCITOS».

Pr. Ricardo Claure Peñaloza

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“A través de este mensaje determinarás en tu corazón si tomas la decisión de buscar habitar las Moradas de nuestro Dios, o vives habitando las moradas de maldad. Verás en tu corazón qué es lo que anhela verdaderamente tu alma, si realmente tienes el deseo ardiente de estar en los Atrios de nuestro Dios; o de otra manera, en la moradas de tinieblas y oscuridad; totalmente ajenas al Dios Vivo y su Santidad.

Esta Palabra te ayudará a descubrir qué es lo que tienes en el corazón, qué es lo que hay en tu carne, donde probablemente hay amor por el mundo y los placeres que éste te ofrece, pero no está la Presencia del Espíritu Santo de Dios.

Mediante este mensaje vas a poder conocer de qué manera el Dios Viviente tiene cuidado de las aves, de su morada, del nido de las aves para los polluelos; y podrás reconocer si verdaderamente lo sientes como un Rey personal, un Dios personal; o si tienes a otro rey en tu vida, relacionado con el pecado, con las cosas del mundo, con las cosas de esta tierra.

Descubrirás si tendrás la dicha de habitar en la Casa de nuestro Dios, o si estarás fuera de ella por toda la eternidad.

Si confías en tus propias fuerzas, en la fuerza de tu voluntad, en la fuerza de tu carne, de tu economía; a través de esta Palabra podrás saber si verdaderamente tienes dicha y gozo en tu vida, sobre todo si en este tipo de fuerzas están tus propias decisiones, los caminos propios de tu corazón no crucificados en la cruz del Calvario.

Este mensaje es para aquellos que aman la Morada de nuestro Dios, pero saben que para poder llegar a ella deben atravesar un valle de lágrimas, sufrimiento y dolor; porque el camino del Señor es angosto y pedregoso; el camino que lleva a la perdición es ancho, libre de piedras, libre de tropiezos, libre de dolores, libre de sufrimientos. El camino que lleva a las Moradas de nuestro Dios implica pasar muchas veces por valle de lágrimas, lugares de desierto, dolor, tristeza; lugares de debilidad en que uno ya no confía en sus propias fuerzas, sino confía en la Fuerza que solamente el Señor puede proveernos a través de su Espíritu Santo por medio de esa obra que Él ha consumado en la cruz del Calvario.

Comprenderás que solamente siguiendo ese camino podrás recibir el Poder de ese Amor que emana de la obra de la cruz del Calvario —ese Amor Infinito derramado en la cárcel de “Palmasola” y en Sucre—, es un Amor Sobrenatural que no puede ser explicado siquiera con palabras. Y esto está reservado para aquellos que aman a Dios, para aquellos que quieren ver a Dios en Sion, que es el lugar donde se encuentran sus Moradas Celestiales”.

Pr. Ricardo Claure Peñaloza

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«La Palabra predicada en este mensaje se refiere al holocausto.

Durante años, desde muy jovencito, vengo predicando que viene un holocausto a nivel mundial; y hace como 20 años, aproximadamente, ya había producido una video-prédica con imágenes respecto del Holocausto que se dio durante la Segunda Guerra Mundial, y que simplemente se constituía en una figura y sombra de lo que vendría a nivel mundial: un holocausto de proporciones gigantescas en toda la tierra.

Y así como había un hombre —Hitler— que fue instrumento terrible para poder llevar adelante todo ese holocausto, hay otro que vendría para más adelante. Comúnmente se lo denomina “el anticristo”: “el que está en contra de Cristo, el que se pone en lugar de Cristo, el que se pone en lugar de Dios, en contra de Dios”, y que, por supuesto, ha sido identificado —en base a una cantidad enorme de prédicas— como “el hombre de pecado, el hijo de perdición”, en el cual ha de operar el Abadón, el Apolión, el destructor, Gog, el ángel del abismo, el rey de los demonios tipo langosta; un destructor que ya sabe que saldrá del abismo y pronto será libre al toque de la Quinta Trompeta mencionada en el libro de la Revelación de Juan, el libro de Apocalipsis de Juan.

Debes entender y decidir —conforme a esta Palabra— si quieres ser parte del tronco del roble, de la encina, o de la madera de la vid, del sarmiento. Aquellos que escogen el pecado, en la banalidad de la vida, y viven dando rienda suelta a todo lo que la carne del cuerpo les pueda exigir, son madera de la vid, son madera del sarmiento; no forman parte de la madera del roble, de la encina, que son la simiente santa.

Y el Señor te hará entender que aquellos que son de otro tipo de madera son especial tesoro para Él, y tiene su nombre escrito en su Libro para aquellos que le temen y piensan en su Nombre.

¿Ustedes creen que si no le sirven, aún así sus nombres estarán en ese libro? No. Somos parte de un Ejército, somos el Ejército profetizado por el profeta Joel, ese Ejército digno que ha de venir con el Señor, ese Ejército de llamados, elegidos y fieles, lavados con la sangre del Cordero, vestidos con vestiduras limpias, blancas y resplandecientes.

Y deben entender que cuando no hay las ganas de servir, de obedecer al llamado que se hace, es porque en el corazón todavía hay pecado, el corazón todavía está endurecido, en el corazón todavía hay grosura; y un corazón endurecido es un corazón soberbio. Los que no le sirven no son especial tesoro, no son justificados, no son justos.

La madera que sirve es la madera que decide servir al Señor; es aquel que toma la madera de la cruz para hacer morir a su “yo”, a su vida en esta tierra, y renuncia a toda obra de la carne, todo lo que hay en el corazón, para así servir a nuestro Dios. Esa es madera que sirve y forma parte de la simiente santa».

Pr. Ricardo Claure Peñaloza

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“Este mensaje lleva una Palabra que todos podrán entender y comprender.

Hoy temprano, en la mañana, cuando yo estaba orando y buscando de nuestro Dios una Palabra que pudiera predicar en este día, leí esta porción de las Escrituras, y sentía ya en mi interior que era el mensaje que tenía que predicar. Mas quería estar seguro, y estuve —como siempre lo hago— leyendo las Escrituras por un lado y por el otro, del derecho y del revés, de Apocalipsis a Génesis, de Génesis a Apocalipsis, buscando algo que pueda verdaderamente darme la seguridad en el espíritu de que sea el mensaje que debo predicar en el día. Y después de bastante tiempo que había transcurrido comprendí, y dije:

—Es eso. Hoy debo predicar de Jerusalem, de la ciudad del gran Rey.

No es Washington, no es Roma, no es Moscú, no es Pekín, no es Tokio, no es Londres ni ninguna otra ciudad en la tierra. Vengo a predicarles de la ciudad de nuestro Dios aquí en la tierra, de la ciudad de Jerusalem.

Y para poder entender esta Palabra debemos dejarnos llevar en el Espíritu a aquel tiempo en que ya el Señor ha establecido su Reino. Dejémonos llevar ya en el Espíritu en la línea del tiempo, y estar todos ya presentes cuando el gran Rey está gobernando la tierra desde Jerusalem; y ver al Rey en su Hermosura, ver a nuestro gran Rey, el Mesías de Israel, Yeshua Hamashiaj, Jesús el Mesías de Israel reinando desde Jerusalem, ver su Grandeza.

Y es ahí donde todos podemos estar ahora, viendo el Esplendor de nuestro Dios. E imagínense poder ver a nuestro Dios sentado en su Trono aquí en la tierra; y por el Espíritu ser transportados a ese tiempo, y ver su Grandeza, su Poder, su Hermosura y su Gloria, descrito en el Salmo 48.

El YO SOY EL QUE SOY estará reinando para aquel instante por sobre toda la tierra, y será —como ahora es— Digno, pero ahí se lo verá en su Excelsa Presencia, se verá su Dignidad, la Dignidad de su Santidad, la Dignidad de ese Amor que solamente pueden recibir los de corazón sencillo”.

Pr. Ricardo Claure Peñaloza

PARA QUE SU IGLESIA SE PREPARE… PARA TESTIMONIO A LAS NACIONES

“Este mensaje lleva una Palabra que todos podrán entender y comprender.

Hoy temprano, en la mañana, cuando yo estaba orando y buscando de nuestro Dios una Palabra que pudiera predicar en este día, leí esta porción de las Escrituras, y sentía ya en mi interior que era el mensaje que tenía que predicar. Mas quería estar seguro, y estuve —como siempre lo hago— leyendo las Escrituras por un lado y por el otro, del derecho y del revés, de Apocalipsis a Génesis, de Génesis a Apocalipsis, buscando algo que pueda verdaderamente darme la seguridad en el espíritu de que sea el mensaje que debo predicar en el día. Y después de bastante tiempo que había transcurrido comprendí, y dije:

—Es eso. Hoy debo predicar de Jerusalem, de la ciudad del gran Rey.

No es Washington, no es Roma, no es Moscú, no es Pekín, no es Tokio, no es Londres ni ninguna otra ciudad en la tierra. Vengo a predicarles de la ciudad de nuestro Dios aquí en la tierra, de la ciudad de Jerusalem.

Y para poder entender esta Palabra debemos dejarnos llevar en el Espíritu a aquel tiempo en que ya el Señor ha establecido su Reino. Dejémonos llevar ya en el Espíritu en la línea del tiempo, y estar todos ya presentes cuando el gran Rey está gobernando la tierra desde Jerusalem; y ver al Rey en su Hermosura, ver a nuestro gran Rey, el Mesías de Israel, Yeshua Hamashiaj, Jesús el Mesías de Israel reinando desde Jerusalem, ver su Grandeza.

Y es ahí donde todos podemos estar ahora, viendo el Esplendor de nuestro Dios. E imagínense poder ver a nuestro Dios sentado en su Trono aquí en la tierra; y por el Espíritu ser transportados a ese tiempo, y ver su Grandeza, su Poder, su Hermosura y su Gloria, descrito en el Salmo 48.

El YO SOY EL QUE SOY estará reinando para aquel instante por sobre toda la tierra, y será —como ahora es— Digno, pero ahí se lo verá en su Excelsa Presencia, se verá su Dignidad, la Dignidad de su Santidad, la Dignidad de ese Amor que solamente pueden recibir los de corazón sencillo”.

Pr. Ricardo Claure Peñaloza

PARA QUE SU IGLESIA SE PREPARE… PARA TESTIMONIO A LAS NACIONES

“Si has decidido recibir esta Palabra es porque el Señor Jesús de Nazareth ya ha derramado su Unción sobre ti, el Conocimiento de Él, de un Dios Vivo, un Dios Eterno, un Dios lleno de Misericordia para con tu vida.

Recibe este mensaje buscando su Presencia; porque Él va delante de ti y está enderezando tus lugares torcidos. Quiere quebrantar puertas de bronce, cerrojos de hierro, para hacerlos pedazos. Quiere darte los tesoros escondidos, los tesoros de las cosas viejas, que tú podrás recibir el día de hoy, para que puedas atesorarlos en tu corazón: detalles de su Palabra, secretos muy guardados, y que ahora deben estar en tu corazón para que sepas que es un Dios Verdadero, YO SOY EL QUE SOY, el Dios de la Biblia, el Dios que creó los cielos y la tierra. Y poner tus ojos en Él, en Jesús, el Autor y Consumador de la Fe; no es por vista, es por la fe. Y por la fe tienes conocimiento de Él, te permite tener la Unción del Santo por la cual conocemos todas las cosas, sin necesidad de que nadie nos enseñe, porque viene por revelación del Espíritu Santo de Dios.

Hay puertas de bronce, hay cerrojos de hierro que te impiden avanzar. Tú tienes que vencer con Él, creyendo en Él, que va delante de ti; y tendrás la victoria si tomas la cruz. Solamente con el Poder de Amor que emana de la cruz podrás romper los cerrojos de hierro, podrás romper las puertas de bronce que te impiden avanzar, y seguir caminando hacia la Patria celestial. No vas a poder lograrlo con tu fuerza de voluntad; solamente tienes que disponer tu corazón con todas tus fuerzas para reconocer tus pecados, para reconocer todo aquello que te impide avanzar, que te jala para Egipto, para el mundo. He ahí la razón de constantes derrotas, encontrarte con las puertas de bronce, los cerrojos de hierro.

Él te levanta ahora, Él te toma de tu mano ahora para que puedas permanecer en Él, para que puedas reconocer la Autoridad que hay en Él, que hay en tu vida, que es de Él, esa autoridad por la cual tú puedes vencer los problemas, por la cual tú puedes destruir las obras del diablo, y tú puedes sujetar inclusive naciones enteras, donde está tu familia, nuestras familias, y también lo que te rodea”.

Pr. Ricardo Claure Peñaloza

PARA QUE SU IGLESIA SE PREPARE… PARA TESTIMONIO A LAS NACIONES

“Si has decidido recibir esta Palabra es porque el Señor Jesús de Nazareth ya ha derramado su Unción sobre ti, el Conocimiento de Él, de un Dios Vivo, un Dios Eterno, un Dios lleno de Misericordia para con tu vida.

Recibe este mensaje buscando su Presencia; porque Él va delante de ti y está enderezando tus lugares torcidos. Quiere quebrantar puertas de bronce, cerrojos de hierro, para hacerlos pedazos. Quiere darte los tesoros escondidos, los tesoros de las cosas viejas, que tú podrás recibir el día de hoy, para que puedas atesorarlos en tu corazón: detalles de su Palabra, secretos muy guardados, y que ahora deben estar en tu corazón para que sepas que es un Dios Verdadero, YO SOY EL QUE SOY, el Dios de la Biblia, el Dios que creó los cielos y la tierra. Y poner tus ojos en Él, en Jesús, el Autor y Consumador de la Fe; no es por vista, es por la fe. Y por la fe tienes conocimiento de Él, te permite tener la Unción del Santo por la cual conocemos todas las cosas, sin necesidad de que nadie nos enseñe, porque viene por revelación del Espíritu Santo de Dios.

Hay puertas de bronce, hay cerrojos de hierro que te impiden avanzar. Tú tienes que vencer con Él, creyendo en Él, que va delante de ti; y tendrás la victoria si tomas la cruz. Solamente con el Poder de Amor que emana de la cruz podrás romper los cerrojos de hierro, podrás romper las puertas de bronce que te impiden avanzar, y seguir caminando hacia la Patria celestial. No vas a poder lograrlo con tu fuerza de voluntad; solamente tienes que disponer tu corazón con todas tus fuerzas para reconocer tus pecados, para reconocer todo aquello que te impide avanzar, que te jala para Egipto, para el mundo. He ahí la razón de constantes derrotas, encontrarte con las puertas de bronce, los cerrojos de hierro.

Él te levanta ahora, Él te toma de tu mano ahora para que puedas permanecer en Él, para que puedas reconocer la Autoridad que hay en Él, que hay en tu vida, que es de Él, esa autoridad por la cual tú puedes vencer los problemas, por la cual tú puedes destruir las obras del diablo, y tú puedes sujetar inclusive naciones enteras, donde está tu familia, nuestras familias, y también lo que te rodea”.

Pr. Ricardo Claure Peñaloza

PARA QUE SU IGLESIA SE PREPARE… PARA TESTIMONIO A LAS NACIONES

Nuestro Amado Señor Jesús tenía el alma muy acongojada, sabiendo que recibiría el embate de todos los pecados de la humanidad sobre Él, y conociendo el supremo sacrificio que consumaría por la redención de ella, con su sangre preciosa derramada, muriendo y resucitando, venciendo a la muerte y a Satanás. Del mismo modo ahora, conociendo, por el Testimonio de Jesús, que es el Espíritu de la Profecía (Apocalipsis 19:10), lo que viene, y lo que está por venir: una terrible persecución y odio maligno contra los seguidores del Dios de la Biblia; nuestra alma se llena de tristeza y angustia; al ser participantes de los padecimientos de Cristo, y ser perseguidos y atacados por el enemigo, en nuestro caminar cristiano, nuestro corazón se llena del anhelo de ver pronto a nuestro Señor Jesús.

Este mensaje predicado por nuestro amado Pastor Ricardo Claure, lleno del Espíritu de la Profecía, es un llamado a la iglesia del Señor a perseverar con la esperanza de nuestra redención que se acerca, y a vivir cada día sabiendo que por la señal de la mujer con dolores de parto (Apocalipsis 12:2), -la iglesia del Señor Jesús, viviendo los días finales- la hora del alumbramiento del Hijo Varón se aproxima, lo que significa que vamos a ver al Señor en poco tiempo más.

Y si queremos ser tenidos por dignos de escapar de la gran tribulación que se cierne sobre esta humanidad de pecado, debemos aborrecer la vida caída del alma, muriendo a las obras de la carne cada día. Como nos enseñó nuestro Señor Jesús en su Palabra:

De cierto, de cierto os digo, que si el grano de trigo no cae en la tierra y muere, queda solo; pero si muere, lleva mucho fruto.

Juan 12:24

Sigamos, pues, el ejemplo de nuestro Amado Señor Jesús, que se hizo obediente hasta la muerte, y muerte de cruz. Y recordemos lo que dijo antes de su partida, en cuerpo lleno de gloria:

Todavía un poco, y no me veréis; y de nuevo un poco, y me veréis; porque yo voy al Padre.

Juan 16:16

Vuelve pronto Señor Jesús, te estamos esperando, amamos tu Venida...

PARA QUE SU IGLESIA SE PREPARE… PARA TESTIMONIO A LAS NACIONES

18 No os acordéis de las cosas pasadas, ni traigáis a memoria las cosas antiguas.

Isaías 43:18

“Esta Palabra está dirigida a todas aquellas personas que todavía tienen cosas del pasado en su interior.

Estoy seguro que algunas o muchas personas han podido leer el pasaje bíblico compartido en este mensaje, han escuchado alguna predicación al respecto, pero no ha surtido el efecto que el Señor ha querido en su vida interior.

Tal vez has podido experimentar que algunos detalles del pasado han sido clavados, crucificados en la cruz, y has podido vencer sobre ellos; pero descuidaste otros. Y es el Señor Jesús de Nazareth que quiere hablar ahora a tu vida a través de esta Palabra. Esta Palabra es para ti que vives encadenada al pasado, encadenado a las cosas que ocurrieron en el pasado.

El Señor quiere obrar en tu vida; no quiere que lleves más esa forma de vida cristiana trayendo siempre a tu memoria las cosas que ocurrieron en el pasado. Y es por eso que el Señor ha determinado por su Espíritu Santo que se comparta este mensaje; porque hay pueblo que aún sigue acordándose de las cosas pasadas, sigue trayendo a memoria las cosas antiguas de hace mucho tiempo, de hace muchos años; vuelven de pronto como en película detalles de sus vidas, detalles penosos, dolorosos, terribles, horrendos.

¡Es importante que dispongas tu corazón para poder recibir esta Palabra!, ¡esta Palabra que el Dios Todopoderoso que creó los cielos y la tierra quiere sembrar en tu corazón, quiere sembrar en tu interior!; ¡no para hacerte daño, sino para que tú seas redimido, para que tú seas restaurado, para que tú seas renovado!

¡El Dios de Israel, el Dios Todopoderoso, a través de esta Palabra quiere glorificarse en tu interior! Porque hay problemas en tu vida actual, por todas aquellas cosas que ocurrieron en el pasado que te lastimaron, te hirieron, te provocaron dolor; no solamente en algunos casos dolor físico, sino en muchos casos dolor del alma. El dolor físico a veces es más soportable que el dolor del alma, el dolor del corazón del alma. No hay médico en esta tierra que pueda sanar el dolor del alma, el dolor interior; no hay nadie en esta tierra que pueda cumplir este propósito; solamente hay uno que ahora a través de esta Palabra quiere hablar a tu vida, y su Nombre es: Jesús de Nazareth, el Verbo de Vida, el Verbo de Dios, ¡el Rey de reyes y Señor de señores! ¡El que es, el que era, el que ha de venir, el Dios Todopoderoso!”.

Pr. Ricardo Claure Peñaloza

PARA QUE SU IGLESIA SE PREPARE… PARA TESTIMONIO A TODAS LAS NACIONES

«Tú no puedes seguir llevando tu vida en soledad, en desierto, en sufrimiento. Y así dormido, dormida como estás, el Señor quiere hacerte despertar a una realidad. Y es que Él te está llamando, Él quiere que despiertes, ¡Él quiere que te levantes!, quiere que abras tus ojos y te des cuenta que Él te ha llevado al Monte de Sion. ¡Y en su Santuario!, que está construido sobre el Monte, quiere que allí tú sólo le cantes Melodías de Amor, palabras de Amor, como este Cántico que Él nos ha dado. Y Él quiere redimirte, quiere consolarte, quiere darte a conocer su Amor, su Misericordia; solamente necesitas escuchar su voz para poder levantarte, ¡y vestirte de la ropa hermosa que Él te ha dado!; porque te ha traído ropa hermosa, ropa emblanquecida con su sangre derramada en la cruz. Y es lo que Él te ofrece. Te ha despertado y te ha traído una ropa hermosa, y quiere que te vistas de ella. Él quiere hacerte ver y entender que tú no estás solo, tú no estás sola.

Jesús, nuestro Dios de Sion, nuestro Dios Bendito ha venido a despertarte para hacerte saber cuán grande es su Amor. Y tú puedes corresponderle como Él te pide: “Sólo canta, sólo canta”. Y Él te redimirá y te consolará, ¡soltará tus ataduras!, soltará todo aquello que te impide avanzar, y que te hace así durmiendo estar.

Sólo necesitas despertar, abrir tus ojos y entender que tu Dios de Amor ha venido a hacerte conocer que no te puedes sumir en la soledad, en la depresión, en la tristeza, en la desolación, por todo aquello que en tu vida puede acontecer. Él te ama, y es un Dios tan lleno de Amor, que te hace parte de su Ciudad, una Ciudad hermosa que Él ha creado, y la ha preparado para ti, para cada uno. Y al llamarnos: “Jerusalem, ciudad amada, ciudad santa”, nos hace parte ya de esa Ciudad, ¡te hace parte ya de esa Ciudad!, esa Ciudad hermosa, en la que Él te promete que tú vas a estar, si hoy escuchas su voz y decides despertar y levantar tu alma de la postración, de la soledad, del desierto en todo lo que está aconteciendo en tu vida.

No te dejes vencer por el desánimo, por el desaliento. Porque en medio de la prueba, de la tribulación, del sufrimiento, de todo aquello que afecta tu alma, ¡tú decides dormir!, ¡y no despertar! Y viendo tu condición, el Señor quiere hacerte saber que tú para salir de eso, de ese estado de postración, de esa penosa situación, sólo tienes que cantar, y cantarle a Él en su Presencia. ¡Y pronto, pronto Él ha de derramar su Amor bendito y su Misericordia! Es tu Dios que con todo Amor ha venido a despertarte donde tú estabas sufrido, sufrida, en soledad, en tristeza y en desolación.

Ese es el mensaje sencillo de nuestro Dios para tu vida, y solamente necesitas escuchar su voz y despertar. Despertar, levantarte, vestirte de tu ropa hermosa que Él te ha traído. Ceñirte de Poder por su Espíritu Santo que Él hoy quiere derramar.

Nunca te olvides, que así como Él nos ha enseñado, puedes utilizar este Cántico que hoy nos ha dado para que tú en la soledad, en el desierto, en el sufrimiento puedas cantar. Sólo canta, y pronto, pronto, Él derramará su Amor, su Misericordia, y podrás estar con Él con toda esa Presencia de Poder, siendo parte de la Jerusalem amada, ¡la Jerusalem celestial!, la ciudad santa. Ciudadano de la Jerusalem celestial te quiere hacer, ¡y hoy te ha venido justamente a recordar, que eres parte de la Patria celestial que te está esperando, y vas a estar en ella!, en esa Ciudad amada por Él y por nosotros, esa ciudad santa. Y por ello tienes que buscar la santidad para poder estar en ella. Es necesario que te levantes, hazlo ahora, ¡decide en tu corazón! levantarte ahora».

Pr. Ricardo Claure Peñaloza

PARA QUE SU IGLESIA SE PREPARE… PARA TESTIMONIO A LAS NACIONES

«Tú no puedes seguir llevando tu vida en soledad, en desierto, en sufrimiento. Y así dormido, dormida como estás, el Señor quiere hacerte despertar a una realidad. Y es que Él te está llamando, Él quiere que despiertes, ¡Él quiere que te levantes!, quiere que abras tus ojos y te des cuenta que Él te ha llevado al Monte de Sion. ¡Y en su Santuario!, que está construido sobre el Monte, quiere que allí tú sólo le cantes Melodías de Amor, palabras de Amor, como este Cántico que Él nos ha dado. Y Él quiere redimirte, quiere consolarte, quiere darte a conocer su Amor, su Misericordia; solamente necesitas escuchar su voz para poder levantarte, ¡y vestirte de la ropa hermosa que Él te ha dado!; porque te ha traído ropa hermosa, ropa emblanquecida con su sangre derramada en la cruz. Y es lo que Él te ofrece. Te ha despertado y te ha traído una ropa hermosa, y quiere que te vistas de ella. Él quiere hacerte ver y entender que tú no estás solo, tú no estás sola.

Jesús, nuestro Dios de Sion, nuestro Dios Bendito ha venido a despertarte para hacerte saber cuán grande es su Amor. Y tú puedes corresponderle como Él te pide: “Sólo canta, sólo canta”. Y Él te redimirá y te consolará, ¡soltará tus ataduras!, soltará todo aquello que te impide avanzar, y que te hace así durmiendo estar.

Sólo necesitas despertar, abrir tus ojos y entender que tu Dios de Amor ha venido a hacerte conocer que no te puedes sumir en la soledad, en la depresión, en la tristeza, en la desolación, por todo aquello que en tu vida puede acontecer. Él te ama, y es un Dios tan lleno de Amor, que te hace parte de su Ciudad, una Ciudad hermosa que Él ha creado, y la ha preparado para ti, para cada uno. Y al llamarnos: “Jerusalem, ciudad amada, ciudad santa”, nos hace parte ya de esa Ciudad, ¡te hace parte ya de esa Ciudad!, esa Ciudad hermosa, en la que Él te promete que tú vas a estar, si hoy escuchas su voz y decides despertar y levantar tu alma de la postración, de la soledad, del desierto en todo lo que está aconteciendo en tu vida.

No te dejes vencer por el desánimo, por el desaliento. Porque en medio de la prueba, de la tribulación, del sufrimiento, de todo aquello que afecta tu alma, ¡tú decides dormir!, ¡y no despertar! Y viendo tu condición, el Señor quiere hacerte saber que tú para salir de eso, de ese estado de postración, de esa penosa situación, sólo tienes que cantar, y cantarle a Él en su Presencia. ¡Y pronto, pronto Él ha de derramar su Amor bendito y su Misericordia! Es tu Dios que con todo Amor ha venido a despertarte donde tú estabas sufrido, sufrida, en soledad, en tristeza y en desolación.

Ese es el mensaje sencillo de nuestro Dios para tu vida, y solamente necesitas escuchar su voz y despertar. Despertar, levantarte, vestirte de tu ropa hermosa que Él te ha traído. Ceñirte de Poder por su Espíritu Santo que Él hoy quiere derramar.

Nunca te olvides, que así como Él nos ha enseñado, puedes utilizar este Cántico que hoy nos ha dado para que tú en la soledad, en el desierto, en el sufrimiento puedas cantar. Sólo canta, y pronto, pronto, Él derramará su Amor, su Misericordia, y podrás estar con Él con toda esa Presencia de Poder, siendo parte de la Jerusalem amada, ¡la Jerusalem celestial!, la ciudad santa. Ciudadano de la Jerusalem celestial te quiere hacer, ¡y hoy te ha venido justamente a recordar, que eres parte de la Patria celestial que te está esperando, y vas a estar en ella!, en esa Ciudad amada por Él y por nosotros, esa ciudad santa. Y por ello tienes que buscar la santidad para poder estar en ella. Es necesario que te levantes, hazlo ahora, ¡decide en tu corazón! levantarte ahora».

Pr. Ricardo Claure Peñaloza

PARA QUE SU IGLESIA SE PREPARE… PARA TESTIMONIO A LAS NACIONES

«Tú no puedes seguir llevando tu vida en soledad, en desierto, en sufrimiento. Y así dormido, dormida como estás, el Señor quiere hacerte despertar a una realidad. Y es que Él te está llamando, Él quiere que despiertes, ¡Él quiere que te levantes!, quiere que abras tus ojos y te des cuenta que Él te ha llevado al Monte de Sion. ¡Y en su Santuario!, que está construido sobre el Monte, quiere que allí tú sólo le cantes Melodías de Amor, palabras de Amor, como este Cántico que Él nos ha dado. Y Él quiere redimirte, quiere consolarte, quiere darte a conocer su Amor, su Misericordia; solamente necesitas escuchar su voz para poder levantarte, ¡y vestirte de la ropa hermosa que Él te ha dado!; porque te ha traído ropa hermosa, ropa emblanquecida con su sangre derramada en la cruz. Y es lo que Él te ofrece. Te ha despertado y te ha traído una ropa hermosa, y quiere que te vistas de ella. Él quiere hacerte ver y entender que tú no estás solo, tú no estás sola.

Jesús, nuestro Dios de Sion, nuestro Dios Bendito ha venido a despertarte para hacerte saber cuán grande es su Amor. Y tú puedes corresponderle como Él te pide: “Sólo canta, sólo canta”. Y Él te redimirá y te consolará, ¡soltará tus ataduras!, soltará todo aquello que te impide avanzar, y que te hace así durmiendo estar.

Sólo necesitas despertar, abrir tus ojos y entender que tu Dios de Amor ha venido a hacerte conocer que no te puedes sumir en la soledad, en la depresión, en la tristeza, en la desolación, por todo aquello que en tu vida puede acontecer. Él te ama, y es un Dios tan lleno de Amor, que te hace parte de su Ciudad, una Ciudad hermosa que Él ha creado, y la ha preparado para ti, para cada uno. Y al llamarnos: “Jerusalem, ciudad amada, ciudad santa”, nos hace parte ya de esa Ciudad, ¡te hace parte ya de esa Ciudad!, esa Ciudad hermosa, en la que Él te promete que tú vas a estar, si hoy escuchas su voz y decides despertar y levantar tu alma de la postración, de la soledad, del desierto en todo lo que está aconteciendo en tu vida.

No te dejes vencer por el desánimo, por el desaliento. Porque en medio de la prueba, de la tribulación, del sufrimiento, de todo aquello que afecta tu alma, ¡tú decides dormir!, ¡y no despertar! Y viendo tu condición, el Señor quiere hacerte saber que tú para salir de eso, de ese estado de postración, de esa penosa situación, sólo tienes que cantar, y cantarle a Él en su Presencia. ¡Y pronto, pronto Él ha de derramar su Amor bendito y su Misericordia! Es tu Dios que con todo Amor ha venido a despertarte donde tú estabas sufrido, sufrida, en soledad, en tristeza y en desolación.

Ese es el mensaje sencillo de nuestro Dios para tu vida, y solamente necesitas escuchar su voz y despertar. Despertar, levantarte, vestirte de tu ropa hermosa que Él te ha traído. Ceñirte de Poder por su Espíritu Santo que Él hoy quiere derramar.

Nunca te olvides, que así como Él nos ha enseñado, puedes utilizar este Cántico que hoy nos ha dado para que tú en la soledad, en el desierto, en el sufrimiento puedas cantar. Sólo canta, y pronto, pronto, Él derramará su Amor, su Misericordia, y podrás estar con Él con toda esa Presencia de Poder, siendo parte de la Jerusalem amada, ¡la Jerusalem celestial!, la ciudad santa. Ciudadano de la Jerusalem celestial te quiere hacer, ¡y hoy te ha venido justamente a recordar, que eres parte de la Patria celestial que te está esperando, y vas a estar en ella!, en esa Ciudad amada por Él y por nosotros, esa ciudad santa. Y por ello tienes que buscar la santidad para poder estar en ella. Es necesario que te levantes, hazlo ahora, ¡decide en tu corazón! levantarte ahora».

Pr. Ricardo Claure Peñaloza

PARA QUE SU IGLESIA SE PREPARE… PARA TESTIMONIO A LAS NACIONES

«Tú no puedes seguir llevando tu vida en soledad, en desierto, en sufrimiento. Y así dormido, dormida como estás, el Señor quiere hacerte despertar a una realidad. Y es que Él te está llamando, Él quiere que despiertes, ¡Él quiere que te levantes!, quiere que abras tus ojos y te des cuenta que Él te ha llevado al Monte de Sion. ¡Y en su Santuario!, que está construido sobre el Monte, quiere que allí tú sólo le cantes Melodías de Amor, palabras de Amor, como este Cántico que Él nos ha dado. Y Él quiere redimirte, quiere consolarte, quiere darte a conocer su Amor, su Misericordia; solamente necesitas escuchar su voz para poder levantarte, ¡y vestirte de la ropa hermosa que Él te ha dado!; porque te ha traído ropa hermosa, ropa emblanquecida con su sangre derramada en la cruz. Y es lo que Él te ofrece. Te ha despertado y te ha traído una ropa hermosa, y quiere que te vistas de ella. Él quiere hacerte ver y entender que tú no estás solo, tú no estás sola.

Jesús, nuestro Dios de Sion, nuestro Dios Bendito ha venido a despertarte para hacerte saber cuán grande es su Amor. Y tú puedes corresponderle como Él te pide: “Sólo canta, sólo canta”. Y Él te redimirá y te consolará, ¡soltará tus ataduras!, soltará todo aquello que te impide avanzar, y que te hace así durmiendo estar.

Sólo necesitas despertar, abrir tus ojos y entender que tu Dios de Amor ha venido a hacerte conocer que no te puedes sumir en la soledad, en la depresión, en la tristeza, en la desolación, por todo aquello que en tu vida puede acontecer. Él te ama, y es un Dios tan lleno de Amor, que te hace parte de su Ciudad, una Ciudad hermosa que Él ha creado, y la ha preparado para ti, para cada uno. Y al llamarnos: “Jerusalem, ciudad amada, ciudad santa”, nos hace parte ya de esa Ciudad, ¡te hace parte ya de esa Ciudad!, esa Ciudad hermosa, en la que Él te promete que tú vas a estar, si hoy escuchas su voz y decides despertar y levantar tu alma de la postración, de la soledad, del desierto en todo lo que está aconteciendo en tu vida.

No te dejes vencer por el desánimo, por el desaliento. Porque en medio de la prueba, de la tribulación, del sufrimiento, de todo aquello que afecta tu alma, ¡tú decides dormir!, ¡y no despertar! Y viendo tu condición, el Señor quiere hacerte saber que tú para salir de eso, de ese estado de postración, de esa penosa situación, sólo tienes que cantar, y cantarle a Él en su Presencia. ¡Y pronto, pronto Él ha de derramar su Amor bendito y su Misericordia! Es tu Dios que con todo Amor ha venido a despertarte donde tú estabas sufrido, sufrida, en soledad, en tristeza y en desolación.

Ese es el mensaje sencillo de nuestro Dios para tu vida, y solamente necesitas escuchar su voz y despertar. Despertar, levantarte, vestirte de tu ropa hermosa que Él te ha traído. Ceñirte de Poder por su Espíritu Santo que Él hoy quiere derramar.

Nunca te olvides, que así como Él nos ha enseñado, puedes utilizar este Cántico que hoy nos ha dado para que tú en la soledad, en el desierto, en el sufrimiento puedas cantar. Sólo canta, y pronto, pronto, Él derramará su Amor, su Misericordia, y podrás estar con Él con toda esa Presencia de Poder, siendo parte de la Jerusalem amada, ¡la Jerusalem celestial!, la ciudad santa. Ciudadano de la Jerusalem celestial te quiere hacer, ¡y hoy te ha venido justamente a recordar, que eres parte de la Patria celestial que te está esperando, y vas a estar en ella!, en esa Ciudad amada por Él y por nosotros, esa ciudad santa. Y por ello tienes que buscar la santidad para poder estar en ella. Es necesario que te levantes, hazlo ahora, ¡decide en tu corazón! levantarte ahora».

Pr. Ricardo Claure Peñaloza

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«Tú no puedes seguir llevando tu vida en soledad, en desierto, en sufrimiento. Y así dormido, dormida como estás, el Señor quiere hacerte despertar a una realidad. Y es que Él te está llamando, Él quiere que despiertes, ¡Él quiere que te levantes!, quiere que abras tus ojos y te des cuenta que Él te ha llevado al Monte de Sion. ¡Y en su Santuario!, que está construido sobre el Monte, quiere que allí tú sólo le cantes Melodías de Amor, palabras de Amor, como este Cántico que Él nos ha dado. Y Él quiere redimirte, quiere consolarte, quiere darte a conocer su Amor, su Misericordia; solamente necesitas escuchar su voz para poder levantarte, ¡y vestirte de la ropa hermosa que Él te ha dado!; porque te ha traído ropa hermosa, ropa emblanquecida con su sangre derramada en la cruz. Y es lo que Él te ofrece. Te ha despertado y te ha traído una ropa hermosa, y quiere que te vistas de ella. Él quiere hacerte ver y entender que tú no estás solo, tú no estás sola.

Jesús, nuestro Dios de Sion, nuestro Dios Bendito ha venido a despertarte para hacerte saber cuán grande es su Amor. Y tú puedes corresponderle como Él te pide: “Sólo canta, sólo canta”. Y Él te redimirá y te consolará, ¡soltará tus ataduras!, soltará todo aquello que te impide avanzar, y que te hace así durmiendo estar.

Sólo necesitas despertar, abrir tus ojos y entender que tu Dios de Amor ha venido a hacerte conocer que no te puedes sumir en la soledad, en la depresión, en la tristeza, en la desolación, por todo aquello que en tu vida puede acontecer. Él te ama, y es un Dios tan lleno de Amor, que te hace parte de su Ciudad, una Ciudad hermosa que Él ha creado, y la ha preparado para ti, para cada uno. Y al llamarnos: “Jerusalem, ciudad amada, ciudad santa”, nos hace parte ya de esa Ciudad, ¡te hace parte ya de esa Ciudad!, esa Ciudad hermosa, en la que Él te promete que tú vas a estar, si hoy escuchas su voz y decides despertar y levantar tu alma de la postración, de la soledad, del desierto en todo lo que está aconteciendo en tu vida.

No te dejes vencer por el desánimo, por el desaliento. Porque en medio de la prueba, de la tribulación, del sufrimiento, de todo aquello que afecta tu alma, ¡tú decides dormir!, ¡y no despertar! Y viendo tu condición, el Señor quiere hacerte saber que tú para salir de eso, de ese estado de postración, de esa penosa situación, sólo tienes que cantar, y cantarle a Él en su Presencia. ¡Y pronto, pronto Él ha de derramar su Amor bendito y su Misericordia! Es tu Dios que con todo Amor ha venido a despertarte donde tú estabas sufrido, sufrida, en soledad, en tristeza y en desolación.

Ese es el mensaje sencillo de nuestro Dios para tu vida, y solamente necesitas escuchar su voz y despertar. Despertar, levantarte, vestirte de tu ropa hermosa que Él te ha traído. Ceñirte de Poder por su Espíritu Santo que Él hoy quiere derramar.

Nunca te olvides, que así como Él nos ha enseñado, puedes utilizar este Cántico que hoy nos ha dado para que tú en la soledad, en el desierto, en el sufrimiento puedas cantar. Sólo canta, y pronto, pronto, Él derramará su Amor, su Misericordia, y podrás estar con Él con toda esa Presencia de Poder, siendo parte de la Jerusalem amada, ¡la Jerusalem celestial!, la ciudad santa. Ciudadano de la Jerusalem celestial te quiere hacer, ¡y hoy te ha venido justamente a recordar, que eres parte de la Patria celestial que te está esperando, y vas a estar en ella!, en esa Ciudad amada por Él y por nosotros, esa ciudad santa. Y por ello tienes que buscar la santidad para poder estar en ella. Es necesario que te levantes, hazlo ahora, ¡decide en tu corazón! levantarte ahora».

Pr. Ricardo Claure Peñaloza

PARA QUE SU IGLESIA SE PREPARE… PARA TESTIMONIO A LAS NACIONES

«Tú no puedes seguir llevando tu vida en soledad, en desierto, en sufrimiento. Y así dormido, dormida como estás, el Señor quiere hacerte despertar a una realidad. Y es que Él te está llamando, Él quiere que despiertes, ¡Él quiere que te levantes!, quiere que abras tus ojos y te des cuenta que Él te ha llevado al Monte de Sion. ¡Y en su Santuario!, que está construido sobre el Monte, quiere que allí tú sólo le cantes Melodías de Amor, palabras de Amor, como este Cántico que Él nos ha dado. Y Él quiere redimirte, quiere consolarte, quiere darte a conocer su Amor, su Misericordia; solamente necesitas escuchar su voz para poder levantarte, ¡y vestirte de la ropa hermosa que Él te ha dado!; porque te ha traído ropa hermosa, ropa emblanquecida con su sangre derramada en la cruz. Y es lo que Él te ofrece. Te ha despertado y te ha traído una ropa hermosa, y quiere que te vistas de ella. Él quiere hacerte ver y entender que tú no estás solo, tú no estás sola.

Jesús, nuestro Dios de Sion, nuestro Dios Bendito ha venido a despertarte para hacerte saber cuán grande es su Amor. Y tú puedes corresponderle como Él te pide: “Sólo canta, sólo canta”. Y Él te redimirá y te consolará, ¡soltará tus ataduras!, soltará todo aquello que te impide avanzar, y que te hace así durmiendo estar.

Sólo necesitas despertar, abrir tus ojos y entender que tu Dios de Amor ha venido a hacerte conocer que no te puedes sumir en la soledad, en la depresión, en la tristeza, en la desolación, por todo aquello que en tu vida puede acontecer. Él te ama, y es un Dios tan lleno de Amor, que te hace parte de su Ciudad, una Ciudad hermosa que Él ha creado, y la ha preparado para ti, para cada uno. Y al llamarnos: “Jerusalem, ciudad amada, ciudad santa”, nos hace parte ya de esa Ciudad, ¡te hace parte ya de esa Ciudad!, esa Ciudad hermosa, en la que Él te promete que tú vas a estar, si hoy escuchas su voz y decides despertar y levantar tu alma de la postración, de la soledad, del desierto en todo lo que está aconteciendo en tu vida.

No te dejes vencer por el desánimo, por el desaliento. Porque en medio de la prueba, de la tribulación, del sufrimiento, de todo aquello que afecta tu alma, ¡tú decides dormir!, ¡y no despertar! Y viendo tu condición, el Señor quiere hacerte saber que tú para salir de eso, de ese estado de postración, de esa penosa situación, sólo tienes que cantar, y cantarle a Él en su Presencia. ¡Y pronto, pronto Él ha de derramar su Amor bendito y su Misericordia! Es tu Dios que con todo Amor ha venido a despertarte donde tú estabas sufrido, sufrida, en soledad, en tristeza y en desolación.

Ese es el mensaje sencillo de nuestro Dios para tu vida, y solamente necesitas escuchar su voz y despertar. Despertar, levantarte, vestirte de tu ropa hermosa que Él te ha traído. Ceñirte de Poder por su Espíritu Santo que Él hoy quiere derramar.

Nunca te olvides, que así como Él nos ha enseñado, puedes utilizar este Cántico que hoy nos ha dado para que tú en la soledad, en el desierto, en el sufrimiento puedas cantar. Sólo canta, y pronto, pronto, Él derramará su Amor, su Misericordia, y podrás estar con Él con toda esa Presencia de Poder, siendo parte de la Jerusalem amada, ¡la Jerusalem celestial!, la ciudad santa. Ciudadano de la Jerusalem celestial te quiere hacer, ¡y hoy te ha venido justamente a recordar, que eres parte de la Patria celestial que te está esperando, y vas a estar en ella!, en esa Ciudad amada por Él y por nosotros, esa ciudad santa. Y por ello tienes que buscar la santidad para poder estar en ella. Es necesario que te levantes, hazlo ahora, ¡decide en tu corazón! levantarte ahora».

Pr. Ricardo Claure Peñaloza

PARA QUE SU IGLESIA SE PREPARE… PARA TESTIMONIO A LAS NACIONES

«Tú no puedes seguir llevando tu vida en soledad, en desierto, en sufrimiento. Y así dormido, dormida como estás, el Señor quiere hacerte despertar a una realidad. Y es que Él te está llamando, Él quiere que despiertes, ¡Él quiere que te levantes!, quiere que abras tus ojos y te des cuenta que Él te ha llevado al Monte de Sion. ¡Y en su Santuario!, que está construido sobre el Monte, quiere que allí tú sólo le cantes Melodías de Amor, palabras de Amor, como este Cántico que Él nos ha dado. Y Él quiere redimirte, quiere consolarte, quiere darte a conocer su Amor, su Misericordia; solamente necesitas escuchar su voz para poder levantarte, ¡y vestirte de la ropa hermosa que Él te ha dado!; porque te ha traído ropa hermosa, ropa emblanquecida con su sangre derramada en la cruz. Y es lo que Él te ofrece. Te ha despertado y te ha traído una ropa hermosa, y quiere que te vistas de ella. Él quiere hacerte ver y entender que tú no estás solo, tú no estás sola.

Jesús, nuestro Dios de Sion, nuestro Dios Bendito ha venido a despertarte para hacerte saber cuán grande es su Amor. Y tú puedes corresponderle como Él te pide: “Sólo canta, sólo canta”. Y Él te redimirá y te consolará, ¡soltará tus ataduras!, soltará todo aquello que te impide avanzar, y que te hace así durmiendo estar.

Sólo necesitas despertar, abrir tus ojos y entender que tu Dios de Amor ha venido a hacerte conocer que no te puedes sumir en la soledad, en la depresión, en la tristeza, en la desolación, por todo aquello que en tu vida puede acontecer. Él te ama, y es un Dios tan lleno de Amor, que te hace parte de su Ciudad, una Ciudad hermosa que Él ha creado, y la ha preparado para ti, para cada uno. Y al llamarnos: “Jerusalem, ciudad amada, ciudad santa”, nos hace parte ya de esa Ciudad, ¡te hace parte ya de esa Ciudad!, esa Ciudad hermosa, en la que Él te promete que tú vas a estar, si hoy escuchas su voz y decides despertar y levantar tu alma de la postración, de la soledad, del desierto en todo lo que está aconteciendo en tu vida.

No te dejes vencer por el desánimo, por el desaliento. Porque en medio de la prueba, de la tribulación, del sufrimiento, de todo aquello que afecta tu alma, ¡tú decides dormir!, ¡y no despertar! Y viendo tu condición, el Señor quiere hacerte saber que tú para salir de eso, de ese estado de postración, de esa penosa situación, sólo tienes que cantar, y cantarle a Él en su Presencia. ¡Y pronto, pronto Él ha de derramar su Amor bendito y su Misericordia! Es tu Dios que con todo Amor ha venido a despertarte donde tú estabas sufrido, sufrida, en soledad, en tristeza y en desolación.

Ese es el mensaje sencillo de nuestro Dios para tu vida, y solamente necesitas escuchar su voz y despertar. Despertar, levantarte, vestirte de tu ropa hermosa que Él te ha traído. Ceñirte de Poder por su Espíritu Santo que Él hoy quiere derramar.

Nunca te olvides, que así como Él nos ha enseñado, puedes utilizar este Cántico que hoy nos ha dado para que tú en la soledad, en el desierto, en el sufrimiento puedas cantar. Sólo canta, y pronto, pronto, Él derramará su Amor, su Misericordia, y podrás estar con Él con toda esa Presencia de Poder, siendo parte de la Jerusalem amada, ¡la Jerusalem celestial!, la ciudad santa. Ciudadano de la Jerusalem celestial te quiere hacer, ¡y hoy te ha venido justamente a recordar, que eres parte de la Patria celestial que te está esperando, y vas a estar en ella!, en esa Ciudad amada por Él y por nosotros, esa ciudad santa. Y por ello tienes que buscar la santidad para poder estar en ella. Es necesario que te levantes, hazlo ahora, ¡decide en tu corazón! levantarte ahora».

Pr. Ricardo Claure Peñaloza

PARA QUE SU IGLESIA SE PREPARE… PARA TESTIMONIO A LAS NACIONES

“Esta Palabra está dirigida a aquellas personas que están buscando sustento y abrigo, que sienten el alma quebrada, el corazón roto, roto por las circunstancias que sobrevienen naturalmente en su vida cotidiana: el corazón desengañado, el corazón amargado, el corazón triste, el corazón del alma destruido.

Hay muchas vidas que desearían inclusive tener dolores en el cuerpo que muchas veces son más soportables que aquellos dolores que se dan en el corazón del alma como producto de todo lo que ocurre en la familia, como producto de todas las circunstancias adversas que suceden alrededor.

Hay personas que están en el interior gritando pidiendo socorro, gritando pidiendo ayuda, pidiendo auxilio, y nadie ha podido prestarles ese auxilio. Han podido escuchar buenos consejos, pero quedaron en eso. Escucharon buenas palabras de orientación, pero simplemente fueron buenas palabras de consejo, y no hubo algo sobrenatural en ellas. No hubo el Poder de Dios para poder sanar el corazón quebrado, para poder sanar el corazón rasgado, para poder sanar el corazón herido.

¡Y el Señor sabe lo que está ocurriendo en tu vida!, ¡el Señor sabe lo que está ocurriendo a tu alrededor!, ¡lo que pasa en tu vida!

Hay tantas vidas que llevan un dolor interno tan profundo, que inclusive se endurecen en su interior y les es imposible poder compartir con otros lo que les está pasando, y soportan todo por dentro, se atormentan en el interior, y así poco a poco van flaqueando, se van debilitando aún más. No han aprendido a acudir al Dios Eterno, no han aprendido a acudir al Dios de Israel, al Dios Todopoderoso. Y de esta forma se van alejando aún más de Él; porque el corazón herido se va encostrando, las llagas que hay en el corazón herido se van haciendo gruesas costras y se van endureciendo. Y sucede que cuando esas costras del corazón se arrancan por algún hecho que ocurre en la vida, la herida incurable vuelve a sangrar en el aspecto espiritual. Y es por esto que hay vidas que sienten que el corazón les sangra, por lo que está ocurriendo en su familia y en sus vidas personales.

¡El Señor sabe lo que ha estado ocurriendo contigo! ¡El Señor ha permitido que recibas este mensaje porque Él quiere llevarte Palabra! ¡Palabra de Vida Eterna! ¡Palabra que va a sanar tu corazón!”.

Pr. Ricardo Claure Peñaloza

PARA QUE SU IGLESIA SE PREPARE… PARA TESTIMONIO A LAS NACIONES.

“Este mensaje es respecto a la vida sexual de las personas dentro de la Santidad del Señor, y de qué forma el espíritu de Jezabel está corrompiendo la sexualidad de aquellos comprados por precio de sangre en la cruz del Calvario.

Esta Palabra está dirigida a aquellos en cuyos corazones y en cuyas mentes están permitiendo al espíritu de Jezabel en su vida.

Es el Señor que quiere que escribas este mensaje con Fuego en tu interior. No puedes tolerar más a Jezabel en tu vida, a través de tus ojos, a través de tu boca, a través de tus labios, a través de todo tu cuerpo, a través de tu parte sexual inclusive, a través de tu vida sexual; ¡no! No puedes tolerar más a Jezabel, el Señor quiere que haya santidad.

¡Mira!, ¡abre tus ojos!, ¡abre tu entendimiento! La palabra porneia es una palabra griega que está ahí escrita claramente en sus textos originales en el Nuevo Testamento. Y porneia nos amplifica claramente lo que es el concepto de pecado sexual que se está practicando en la vida cotidiana de la iglesia en Tiatira, empezando en la mente y en el corazón. Ahí es donde se gesta todo, ahí es donde nace todo, ahí es el semillero de las caídas, ahí es el semillero del pecado, allí en el corazón, en la mente. Y tú estás tolerando eso en tu interior, estás tolerando ese espíritu de Jezabel en tu vida, y esto el Señor quiere que lo conozcas. Y es más, este espíritu te enseña a cometer fornicación.

El sexo creado por Dios en sí mismo es puro, es santo; de otra forma nos hubiera creado asexuados. Pero ha sido creado con un objetivo, y es solamente dentro del matrimonio, y en total pureza para goce y disfrute de la pareja en el matrimonio, para la unión no solamente en alma y en espíritu, sino también en cuerpo, en que ambos se entregan en santidad uno al otro. Mas lo demás es porneia. Y Dios no te ha creado para esas cosas, y tú no puedes desobedecer al Señor”.

Pr. Ricardo Claure Peñaloza

PARA QUE SU IGLESIA SE PREPARE… PARA TESTIMONIO A LAS NACIONES.

“No solamente puedes ver el Reino de Dios, sino también puedes entrar en el Reino de Dios, que es un Reino espiritual; y es a través del nacimiento de agua que podrás subir a la Presencia del Señor, a ese Reino espiritual.

El nuevo nacimiento es el nacimiento de agua, y es además el nacimiento del Espíritu Santo. Y tú —para poder entrar en el Reino de Dios— necesitas no solamente bautizarte en agua, sino también tienes que nacer del Espíritu Santo.

No es un nacimiento físico. Nacer de nuevo es el nacimiento espiritual en tu vida, cuando no llevas vida espiritual porque tu espíritu está muerto, está apagado, está dormido; tu espíritu a causa del pecado heredado inclusive desde Adán está sin la capacidad de poder entender las cosas que son de Dios, sin poder experimentar la Presencia de Dios que es espíritu; y solamente cuando tu espíritu nazca de nuevo vas a poder experimentar la Presencia del Espíritu Santo de Dios en tu vida, y de esa manera podrás ver el Reino de Dios tal cual está escrito en la Palabra. Pero de otra manera estarás como estás ahora: pura mente, pura lógica, puras emociones, pero nada del Espíritu Santo de Dios obrando en lo más profundo de tu ser.

En lo más profundo de tu ser hay un órgano espiritual, es tu espíritu; no es tangible, no es algo que puedes palpar con la mano; es un órgano espiritual intangible, es aire, es pneuma, es un órgano con la capacidad de poder sentir la Presencia de Dios, de poder tener comunión con Dios, de poder experimentar lo que a Dios le agrada y lo que no le agrada. En lo más profundo de tu ser está tu espíritu, y tu espíritu necesita nacer de nuevo porque está muerto a causa del pecado. Mas si tú crees con sincero arrepentimiento en tu corazón que estás en pecado, y crees que Jesús murió en la cruz del Calvario por tus pecados al crucificar la carne en la cruz del Calvario y crees que la sangre que Él derramó en la cruz del Calvario te limpia de todo pecado, esto te da el Poder para crucificar tus propias obras de la carne que son espirituales, que salen de tu corazón. De esa manera experimentarás un nacimiento espiritual; algo en tu interior ha de ser cambiado, renovado y modificado, y eso es justamente el nuevo nacimiento”.

Pr. Ricardo Claure Peñaloza

PARA QUE SU IGLESIA SE PREPARE… PARA TESTIMONIO A LAS NACIONES

“En el camino del Señor hay mucho pueblo que pasa prueba y tribulación. Este mensaje es para ese pueblo que está en constante lucha, ese pueblo cristiano que está en constante prueba, en constantes problemas.

Esta Palabra es para aquellas personas que tienen tristeza en el corazón, que no encuentran consuelo en sus vidas, que se sienten probadas, que están pasando tribulación en su vida familiar, en su hogar, en las instituciones donde trabajan o donde estudian y están en constante aflicción.

El Señor está hablando a tu corazón y a tu vida. El Señor quiere darte a conocer cosas ocultas, misterios del Reino de los cielos y hacerte comprender su Palabra, y solamente podrás comprender si dispones tu corazón y te humillas delante de Él. Por eso el Señor demanda no hablar a tu mente, sino hablar a tu corazón. Él quiere enseñarte, quiere ayudarte, consolarte.

Pero en la situación en que te encuentras no has podido recibir su Consuelo, y sientes que la Presencia del Señor se ha alejado de tu vida. Tu pecado te ha sumergido en un desierto, te sientes en soledad; has estado viviendo sin preparar a Jesucristo en tu vida interior, sin enderezar lo torcido, sin allanar lo áspero que hay en ti. ¿Cuántas veces has manifestado aspereza? Ahí tú puedes —en la Presencia del Señor— ver con cuántas personas eres áspero, áspera. Con tu esposa, tu esposo, tus padres, tus hijos, tus hermanos, tus hermanas, tu hermano en Cristo, tu hermana en Cristo. ¿Te das cuenta?

Jesús de Nazareth quiere hacer una obra en ti, quiere hablar a tu corazón: tu tiempo es ya cumplido, ahora es el momento de experimentar el Consuelo del Señor, simplemente acercándote a la cruz, allí donde ya por la fe hemos recibido el Perdón de pecados, ahí donde tú puedes ser libre de aquellas áreas de tu vida que no le agradan al Señor. Entonces serás consolado, serás consolada, con ese Consuelo que sólo puede venir del Dios Todopoderoso”.

Pr. Ricardo Claure Peñaloza

PARA QUE SU IGLESIA SE PREPARE… PARA TESTIMONIO A LAS NACIONES

“La Palabra de Dios en este tiempo, quiere hablar a muchas vidas que están en aflicción, en tribulación, vidas que llevan cargas de opresión, que llevan trabajo espiritual terrible sobre sus almas. Y hay promesa para más adelante, para todos aquellos que quieren vivir en Cristo Jesús.

Esta Palabra es para tu vida, para alimentarla, es Palabra que ha de alentar tu corazón; porque tú debes estar, ya por la fe, formando parte de esa multitud, la cual nadie podrá contar, de todas naciones y tribus y pueblos y lenguas, que estarán delante del Trono y en la Presencia del Cordero, vestida de vestiduras blancas y con palmas en las manos, que habrán salido fuera de la gran tribulación.

Este mensaje es para tu vida espiritual, es inclusive para todos aquellos que forman parte de tu casa, de tu familia. Ya que hay una sola forma de ser librados de la gran tribulación, y es justamente lavar nuestras ropas y emblanquecerlas con la sangre del Cordero, con la sangre del Dios Todopoderoso. Y ahora puedes entregar tu corazón a Cristo. Ahora, en este tiempo, tú puedes permitir que esa sangre limpie tus vestiduras. Y así serás parte de esa gran multitud, la multitud del arrebatamiento, esa gran multitud que ha de ser lavada con la sangre del Cordero.

¿Y qué es lo que Dios dice? ¿Cuál es la promesa que el Señor te hace conocer ahora? Esta promesa que debe alentar tu vida, esta promesa que debe alentar tu corazón, ¡porque tú no debes desmayar!, ¡tú no debes desanimarte más!; ¡tú debes seguir adelante!, porque el Dios Viviente está hablando a tu vida. Es lo que dice el Dios Todopoderoso, Él nos ha de recibir. Lo importante es que nosotros vivamos conforme a su promesa, conforme a la santidad que Él nos ha llamado.

Escucha bien, esta es promesa para con tu vida, para con nuestras vidas.

Hay promesa para seguir adelante. Hay un galardón, hay un galardón grande. Él ha hablado y lo ha de cumplir. Pronto, pronto estaremos en su Presencia, y sabremos que Él es nuestro Dios, y estaremos sirviéndole de día y de noche en su Templo, y Él enjugará toda lágrima de nuestros ojos. Ya no habrá más hambre ni sed, porque el mismo Cordero de Dios estará pastoreando nuestras vidas, y guiándonos a Fuentes de Aguas de Vida. Esta Palabra es para ti”.

Pr. Ricardo Claure P.

PARA QUE SU IGLESIA SE PREPARE… PARA TESTIMONIO A LAS NACIONES

“El Señor Jesús ahora está llamando a través de este mensaje, está llamando a tu vida ahora. Te dice: “Vuelve, oh, Israel”.

“Israel”, significa: “el que lucha con Dios”. Israel tenía antes el nombre de Jacob, y luchó con Él hasta conseguir bendición. Y es lo que el Señor quiere de tu vida, que tú luches. No puedes dejarte amilanar, no puedes retroceder después de haberlo conocido al Señor, tú tienes que permanecer en Él. Por eso Él ahora te está llamando a través de este mensaje.

Si has caído de los lugares celestiales, si has dejado la vida espiritual, si has dejado el Reino de los cielos con todas las cosas profundas de Dios, y nuevamente has estado sumergiéndote en las cosas terrenales, en las cosas de este mundo; debes darte cuenta que el Dios Eterno, el Dios de Israel te está llamando. El Dios Todopoderoso está queriendo que tú estés nuevamente en su Presencia.

Puedes estar allí en el cuerpo, pero con el corazón lejos de Él. Puedes estar con el cuerpo en un lugar cristiano, pero tu corazón puede estar lejos de Él, con la mente en otro lugar, con la mente extraviada, con la mente difusa. Y es por ello que el Señor ahora te está llamando, y te hace ver que la caída es como producto del pecado. La caída de los lugares celestiales es como producto del pecado que sale del corazón, del corazón del alma. Esas obras de la carne que forman parte de tu carácter: la mentira, el engaño, la malignidad, la murmuración, la crítica, el juicio y todo aquello que tú experimentas en tu vida cotidiana.

—¡Pero yo soy así!, ¡es mi carácter, es mi forma de ser! —podrá decir alguno.

Pero tú necesitas cambiar, tú necesitas darle muerte de cruz a esos aspectos de tu carácter, de tu vida; de otra forma siempre, constantemente estarás cayéndote de la Presencia de Dios y sumiéndote ahí en un lugar de tormento, de desconsuelo, de desilusión, de depresión, de desesperación, de zozobra.

Lo que el Señor quiere es que tú recibas no simplemente el entendimiento, el conocimiento de la mente de su Palabra; sino el conocimiento revelado espiritual en tu propio espíritu. De tal forma que esta Palabra sea Vida en tu interior, que esta Palabra sea una realidad espiritual”.

Pr. Ricardo Claure Peñaloza

“Este mensaje está dirigido para aquellos que han abandonado la tierra santa del Dios Viviente, y se han ido a otra tierra, a la tierra del enemigo para estar en cautiverio, con insomnio, con desconsuelo, con falta de sentido a su vida, acusando a otros por los errores cometidos, por la prueba y tribulación que puedes estar pasando.

Este mensaje está dirigido a los que todavía no han comprendido lo que es la disciplina de Dios, el castigo de parte del Dios Viviente, como Padre de los cielos, Padre de nuestra vida. O si te has apartado de Él por enfermedad, por problemas interiores, problemas con otras personas, problemas en tu hogar; y de pronto has dejado la Presencia de Dios, has dejado de subir al Trono de la Gracia.

Tal vez tú estás bajo tormento interior, sientes de pronto como que ya no estás como antes, como al principio, ¡algo ha pasado en el interior! ¿Dónde están aquellos días cuando había oración en tu vida?, ¿alabanza? Todo el momento estaba tu boca llena de la Palabra de Dios, llena de la Presencia de Dios; y ahora de pronto te ves que estás viviendo en pelea, contienda, disensión, murmuración, crítica, chisme, prejuicio, acusación a otros, confrontación con honestidad a toda costa, rechazo, autorechazo, temor al rechazo, rebeldía, control, posesión, orgullo, terquedad, obstinación, ira, enojo, amargura por todo lo que está aconteciendo en tu vida.

Tu hogar: ¿cómo está tu esposa?, ¿cómo está tu esposo?, ¿cómo están tus hijos? Si estás sin familia, ¿cómo estás tú?

Esta Palabra es para ti. Es una Palabra que ha de alentar tu vida. ¡Simplemente tienes que dejar que el Espíritu Santo de Dios obre en tu interior!

Te has apartado o te sientes apartado del Señor, ya has perdido la vida espiritual; ¡ya no hay ganas de orar!, ¡ya no hay ganas de leer la Palabra, de congregarte! Te has vuelto simplemente una persona que el momento que tiene tiempo —si es que lo tiene—, se congrega. Y por ahí tal vez escucha un programa radial, o ve algún programa en televisión, pero lejos del Señor, como que no le llena, como que hay una coraza, ¡una coraza que le impide sentir la Presencia de Dios!

El Señor te da el Poder y la Fuerza para poder comprender que hay recompensa si permaneces en Él. El Señor te hace saber que hay Poder y Fuerza para que vuelvas de la tierra del enemigo, donde estás tú ahora. El Señor quiere obrar en tu interior, el Señor quiere transformar tu vida”.

Pr. Ricardo Claure Peñaloza

PARA QUE SU IGLESIA SE PREPARE… PARA TESTIMONIO A LAS NACIONES