La misión que el Señor encomienda a todo Bautizado que quiere ser su Discípulo, según su estado, es:

Exhortar a la conversión

Expulsar a los demonios

Sanar a los enfermos con el óleo

"En aquel tiempo, llamó Jesús a los Doce, los envió de dos en dos y les dio poder sobre los espíritus inmundos. Les mandó que no llevaran nada para el camino: ni pan, ni mochila, ni dinero en el cinto, sino únicamente un bastón, sandalias y una sola túnica.

Y les dijo: “Cuando entren en una casa, quédense en ella hasta que se vayan de ese lugar. Si en alguna parte no los reciben ni los escuchan, al abandonar ese lugar, sacúdanse el polvo de los pies, como una advertencia para ellos”.

Los discípulos se fueron a predicar el arrepentimiento. Expulsaban a los demonios, ungían con aceite a los enfermos y los curaban".

5⁰ Domingo de Pascua. Ciclo B. 28/04/2024

HomilíasBy Fr. Sebastián OPApr 28, 2024